LECTURAS BÍBLICAS PARA LA LITURGIA

 

IGLESIA EN MARCHA

EL PAN VIVO DE CADA DÍA

 
PERIPLOS D


LECTURAS DE JUNIO 2015

 

Junio 2015

L

M

M

J

V

S

D

1

2

3

4

5

6

7

8

9

10

11

12

13

14

15

16

17

18

19

20

21

22

23

24

25

26

27

28

29

30


Regresar

1 JUNIO – LUNES – SAN JUSTINO, MÁRTIR


Ap 12,10-12a / Sal 126 / Lc 9,23-26 – ROJO

Nace en Flavio Neapolis (actual Jordania) en una familia pagana. En su búsqueda de la verdad, pasa por varias escuelas filosóficas hasta que descubre en Éfeso el Antiguo Testamento y el Cristianismo. Es uno de los primeros apologistas de la Iglesia, lucho por reconciliar la doctrina cristiana con la cultura pagana. Se supone que compuso 8 obras, pero solo tres se conservan, entre ellas se encuentran los diálogos con el judío Trifón y las Apologías del cristianismo, dirigidas al emperador Antonio Pío. Tertuliano al referirse a San Justino lo llama "filosofo y mártir". Fue martirizado y decapitado en Roma.

5. Oración Colecta
Padre todopoderoso, que concediste a san Justino pelear el combate de la fe hasta derramar su sangre, te rogamos que su intercesión nos ayude a soportar por tu amor la adversidad, y a caminar con valentía hacia ti, fuente de toda vida. Por nuestro Señor.

6. Primera Lectura: Ap 12,10-12a
Lectura del libro del Apocalípsis
Oí una fuerte voz en el cielo, que decía: “Ya llegó la salvación, el poder y el reino de nuestro Dios, y la autoridad de su Mesías; porque ha sido expulsado el acusador de nuestros hermanos, el que día y noche los acusaba delante de nuestro Dios. Nuestros hermanos lo han vencido con la sangre derramada del Cordero y con el mensaje que ellos proclamaron; no tuvieron miedo de perder la vida, sino que estuvieron dispuestos a morir. ¡Alégrense, pues, cielos, y ustedes que viven en ellos! Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.

7. Salmo Responsorial: Del salmo 126
R. “¡El Señor ha hecho grandes cosas por nosotros!”
Sí, el Señor había hecho grandes cosas por nosotros, y estábamos alegres. ¡Señor, haz que cambie de nuevo nuestra suerte, como cambia el desierto con las lluvias! R.
Los que siembran con lágrimas, cosecharán con gritos de alegría. Aunque lloren mientras llevan el saco de semilla, volverán cantando de alegría, con manojos de trigo entre los brazos. R.

9. Aleluya.

10. Evangelio: Lc 9,23-26
† Lectura del Evangelio según san Lucas
Jesús les dijo a todos:—Si alguno quiere ser discípulo mío, olvídese de sí mismo, cargue con su cruz cada día y sígame. Porque el que quiera salvar su vida, la perderá; pero el que pierda la vida por causa mía, la salvará. ¿De qué le sirve al hombre ganar el mundo entero, si se pierde o se destruye a sí mismo? Pues si alguno se avergüenza de mí y de mi mensaje, también el Hijo del hombre se avergonzará de él cuando venga con su gloria y con la gloria de su Padre y de los santos ángeles. Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.

Oración sobre las Ofrendas
Te ofrecemos, Señor, estas ofrendas en la festividad de san Justino, mártir, a quien ninguna tentación ha podido separar de la unidad de tu Iglesia. Por Jesucristo.

21. Oración después de la Comunión
Reanimados por estos sacramentos te rogamos, Señor, que imitando la constancia de san Justino merezcamos recibir de tus manos el premio prometido a la paciencia. Por Jesucristo nuestro Señor.


PERIPLOS DEL OBISPO
Regresar

2 JUNIO – MARTES – SANTOS MARCELINO Y PEDRO, MÁRTIRES

St 1,2-4.12 / Sal 34 / Mt 10,34-39 – ROJO

Ambos fueron perseguidos en la época de Diocleciano en el año 303. Marcelino era presbítero y Pedro exorcista, los llevaron a un lugar en el bosque y les hicieron cavar sus fosas, luego los decapitaron y los enterraron. Las tumbas fueron encontradas y sus restos trasladados a la Vía Labicana, donde se construyó una basílica por orden de Constantino.

5. Oración Colecta
Dios todopoderoso y eterno que concediste a los mártires Marcelino y Pedro la gracia de morir por Cristo, ayúdanos en nuestra debilidad para que, así como ellos no dudaron en morir por ti, así también nosotros nos mantengamos fuertes en la confesión de tu nombre. Por nuestro Señor Jesucristo.

6. Primera Lectura: St 1,2-4.12
Lectura de la carta del Apóstol Santiago
Hermanos míos, ustedes deben tenerse por muy dichosos cuando se vean sometidos a pruebas de toda clase. Pues ya saben que cuando su fe es puesta a prueba, ustedes aprenden a soportar con fortaleza el sufrimiento. Pero procuren que esa fortaleza los lleve a la perfección, a la madurez plena, sin que les falte nada. Dichoso el hombre que soporta la prueba con fortaleza, porque al salir aprobado recibirá como premio la vida, que es la corona que Dios ha prometido a los que lo aman. Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.

7. Salmo Responsorial: Del salmo 34
R. Bendeciré al Señor a todas horas.
Bendeciré al Señor a todas horas; mis labios siempre lo alabarán. Yo me siento orgulloso del Señor; ¡óiganlo y alégrense, hombres humildes! R.
Los que miran al Señor quedan radiantes de alegría y jamás se verán defraudados. R.
El ángel del Señor protege y salva a los que honran al Señor. Prueben, y vean que el Señor es bueno. ¡Feliz el hombre que en él confía! R.

9. Aleluya.

10. Evangelio: Mt 10,34-39
† Lectura del Evangelio según san Mateo
Jesús dijo a la multitud: “No crean que yo he venido a traer paz al mundo; no he venido a traer paz, sino guerra. He venido a poner al hombre contra su padre, a la hija contra su madre y a la nuera contra su suegra; de modo que los enemigos de cada cual serán sus propios parientes.
“El que quiere a su padre o a su madre más que a mí, no merece ser mío; el que quiere a su hijo o a su hija más que a mí, no merece ser mío; y el que no toma su cruz y me sigue, no merece ser mío. El que trate de salvar su vida, la perderá, pero el que pierda su vida por causa mía, la salvará. Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.

Oración sobre las Ofrendas
Sea agradable a tus ojos, Señor, esta ofrenda que va a ser consagrada en la festividad gloriosa de tus mártires Marcelino y Pedro, para que nos purifique de nuestros pecados y te mueva a escuchar las plegarias de tu pueblo. Por Jesucristo nuestro Señor.

21. Oración después de la Comunión
Alimentados con el pan del cielo, viviendo la unidad como miembros del Cuerpo de Cristo, te rogamos, Señor, que no nos separemos del amor de tu Hijo, y a ejemplo de tus mártires Marcelino y Pedro, logremos superar con valentía cualquier dificultad por aquel que nos amó sobre toda medida. Por Jesucristo nuestro Señor.


PERIPLOS D
Regresar

3 JUNIO – MIÉRCOLES – 9ª SEMANA TIEMPO ORDINARIO

Tob 3, 1-11.16-17 / Sal 24 / Mc 12, 18-27 – VERDE

5. Oración Colecta
Nos acogemos, Señor, a tu providencia, y te pedimos humildemente que apartes de nosotros todo mal y nos concedas aquello que pueda contribuir a nuestro bien. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que siendo Dios vive y reina contigo, en la unidad.

6. Primera Lectura: Tob 3, 1-11.16-17
Lectura del libro Tobías
Yo, Tobías, me puse muy triste, y suspiré y lloré; y entre suspiros comencé a orar así: “Tú eres justo, Señor; todo lo que haces es justo. Tú procedes siempre con amor y fidelidad. Tú eres el juez del mundo. Ahora, Señor, acuérdate de mí, vuelve tus ojos hacia mí. No me castigues por mis pecados, por las faltas que yo o mis antepasados hemos cometido sin saberlo. Hemos pecado contra ti, hemos desobedecido a tus mandamientos. Reconozco que todas tus decisiones son justas al castigarme por mis pecados. No hemos cumplido tus órdenes, no hemos sido leales contigo. Trátame como mejor te parezca. Manda que me quiten la vida, para que yo desaparezca de este mundo y me convierta en tierra. ¡Señor, líbrame de esta angustia! Déjame ir al lugar del eterno descanso. Señor, no me vuelvas la espalda. Prefiero morir a pasar tantas angustias en mi vida y tener que escuchar tantos insultos.”
Ese mismo día, una mujer llamada Sara, hija de Ragüel, que vivía en la ciudad de Ecbatana, en el país de Media, tuvo que sufrir también los insultos de una criada de su padre. Resulta que Sara había sido dada en matrimonio siete veces, pero en cada caso Asmodeo, un demonio malvado, había matado al esposo antes de que este se uniera a ella como en todo matrimonio.
Entonces la criada le dijo: “¡Tú eres la que matas a tus maridos! Ya has tenido siete maridos, y no has podido llevar el apellido de ninguno de ellos. Pero el que tus maridos se te mueran no es razón para que nos castigues. ¡Muérete con ellos, sin nunca haber tenido hijos!”
Sara se puso muy triste y empezó a llorar. Luego se subió a la parte alta de la casa de su padre, con la intención de ahorcarse. Pero después de pensarlo bien, dijo: “Sería una vergüenza para mi padre que le dijeran: ‘Tenías una hija única, tan querida, y se ahorcó por sus sufrimientos.’ Con eso haría morir de tristeza a mi anciano padre. Es mejor que no me ahorque; pero voy a pedirle al Señor que me haga morir para no tener que oír más insultos en mi vida.”
Entonces extendió los brazos hacia la ventana y dijo: “Alabado seas, Dios compasivo; alabado sea tu nombre por siempre; que todo lo que has creado te alabe eternamente.”
En ese momento las oraciones de Tobit y de Sara llegaron a la presencia gloriosa de Dios, quien las escuchó y envió al ángel Rafael a curar a los dos: a sanar a Tobit de las nubes que tenía en los ojos, para que así pudiera volver a ver la luz de Dios, y a librar a Sara, la hija de Ragüel, de Asmodeo, el demonio malvado, y dársela como esposa a Tobías, el hijo de Tobit. En efecto, Tobías tenía más derecho a casarse con ella que cualquier otro pretendiente. En el mismo momento, Tobit, que estaba fuera, entraba en su casa, y Sara bajaba de la parte alta de la suya. Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.

7. Salmo Responsorial: Del salmo 24
R. A ti, Señor, levanto mi alma.
- Mi Dios, en ti confío: no dejes que me hunda en la vergüenza. ¡Que no se rían de mí mis enemigos! ¡Que no sea jamás avergonzado ninguno de los que en ti confían!. R.
- Señor, muéstrame tus caminos; guíame por tus senderos; guíame, encamíname en tu verdad, pues tú eres mi Dios y Salvador. R.
- Señor, acuérdate del amor y la ternura que siempre nos has manifestado. Señor, acuérdate de mí, por tu gran amor y bondad. R.
- El Señor es bueno y justo; él corrige la conducta de los pecadores y guía por su camino a los humildes; ¡los instruye en la justicia! R.
9. Aleluya.

10. Evangelio: Mc 12, 18-27
† Lectura del Evangelio según san Marcos
En aquel entonces fueron a ver a Jesús algunos saduceos. Estos dicen que los muertos no resucitan; por eso le presentaron este caso: —Maestro, Moisés nos dejó escrito que si un hombre casado muere sin haber tenido hijos con su mujer, el hermano del difunto deberá tomar por esposa a la viuda, para darle hijos al hermano que murió. Pues bien, había una vez siete hermanos, el primero de los cuales se casó, pero murió sin dejar hijos. Entonces el segundo se casó con la viuda, pero él también murió sin dejar hijos. Lo mismo pasó con el tercero, y con los siete; pero ninguno dejó hijos. Finalmente murió también la mujer. Pues bien, en la resurrección, cuando vuelvan a vivir, ¿de cuál de ellos será esposa esta mujer, si los siete estuvieron casados con ella?
Jesús les contestó: —Ustedes están equivocados, porque no conocen las Escrituras ni el poder de Dios. Cuando los muertos resuciten, los hombres y las mujeres no se casarán, pues serán como los ángeles que están en el cielo. Y en cuanto a que los muertos resucitan, ¿no han leído ustedes en el libro de Moisés el pasaje de la zarza que ardía? Dios le dijo a Moisés: ‘Yo soy el Dios de Abraham, de Isaac y de Jacob.’ ¡Y él no es Dios de muertos, sino de vivos! Ustedes están muy equivocados. Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.

Oración sobre las Ofrendas
Confiados en tu misericordia, Señor, venimos a tu altar con nuestros dones a fin de que nos purifiques por este memorial que estamos celebrando. Por Jesucristo.

21. Oración después de la Comunión
Padre santo, tú que nos has alimentado con el Cuerpo y la Sangre de tu Hijo, guíanos por medio de tu Espíritu a fin de que, no sólo con palabras, sino con toda nuestra vida podamos demostrarte nuestro amor e irradiar la presencia de tu Reino. Por Jesucristo.


PERIPLOS DEL OBISPO
Regresar

4 JUNIO – JUEVES – 9ª SEMANA TIEMPO ORDINARIO

Tob 6, 10a-11a;7,1.9-17;8,4-10 / Sal 127 / Mc 12, 28b-34 – VERDE

6. Primera Lectura: Tob 6, 10a-11a;7,1.9-17;8,4-10
Lectura del libro de Tobías
Habiendo llegado a Media, Daniel y Rafael se acercaban ya a Ecbatana. Entonces le dijo el ángel Rafael al muchacho: —Amigo Tobías.
—¡A tus órdenes! —contestó él.
El ángel le dijo:–Debemos pasar la noche en la casa de Ragüel. Es pariente tuyo.
Cuando llegaron a Ecbatana, dijo Tobías: —Amigo Azarías, llévame inmediatamente a casa de Ragüel, nuestro pariente.
Entonces el ángel lo llevó a casa de Ragüel. Lo encontraron sentado junto a la puerta de entrada de su casa, y se adelantaron a saludarlo. Él les respondió: —¡Muy buenos días, amigos! ¡Bienvenidos! Y los hizo entrar en la casa.
Luego se bañaron, se lavaron las manos y se sentaron a la mesa. Tobías dijo entonces a Rafael:–Amigo Azarías, dile a Ragüel que me dé a mi parienta Sara.
Ragüel lo alcanzó a oir y dijo al muchacho: —Come y bebe, y pasa alegremente esta noche. Porque, amigo, ningún otro fuera de ti tiene derecho a casarse con mi hija Sara. Por la misma razón, yo no puedo dársela a nadie sino a ti; tú eres mi pariente más cercano. Sin embargo, hijo, te debo decir la verdad. Ya antes se la he dado a siete esposos, parientes nuestros, y todos han muerto la misma noche en que se acercaron a ella. Ahora, hijo, come y bebe; el Señor hará que les vaya bien.
Pero Tobías contestó: —No probaré esta cena hasta que resuelvas mi asunto.
Ragüel le dijo: —Bueno, lo haré. Según está dispuesto en el libro de Moisés, y ya que Dios ha decretado dártela, te la doy. Te entrego, pues, a tu parienta Sara. De ahora en adelante serás su marido, y ella será tu esposa. Es tuya desde hoy y para siempre. Hijo, que el Señor del cielo los favorezca esta noche, y les muestre su amor y les conceda bienestar.
Ragüel llamó a su hija Sara. Cuando llegó, su padre la tomó de la mano y se la entregó a Tobías, diciéndole: —Yo te la entrego conforme a la ley y según el decreto escrito en el libro de Moisés, que manda que te la dé como esposa. Tómala y vuelve sano y salvo a casa de tus padres. Que el Dios del cielo les conceda bienestar.
Entonces llamó a la madre, le pidió que trajera una hoja, y en ella escribió el contrato de matrimonio, certificando que entregaba a su hija para ser la esposa de Tobías, como lo manda la ley de Moisés. Después de esto comenzaron a cenar. Ragüel llamó después a su esposa Edna, y le dijo: —Querida, prepara la otra habitación, y lleva a Sara allá.
Ella fue y preparó la habitación como él se lo había pedido, y llevó allá a su hija. Y empezó a llorar por ella. Luego se secó las lágrimas, y le dijo: —Ten confianza, hija. Que el Señor del cielo te conceda alegría en vez de tristeza. ¡Ten confianza, hija! Y salió.
Las otras personas también salieron de la habitación y cerraron la puerta.
Tobías se levantó de la cama y le dijo a Sara: “Mi amor, levántate y hagamos oración para pedirle al Señor que tenga misericordia de nosotros y nos proteja.”
Ella se levantó, y los dos comenzaron a orar así, pidiendo a Dios que los protegiera: “Alabado seas, Dios de nuestros antepasados, alabado sea tu nombre por siempre. Que el cielo y la creación entera te alaben por todos los siglos. Tú creaste a Adán y le diste a su esposa Eva como compañera y apoyo. Y de ellos dos nació todo el género humano. Tú dijiste: ‘No es bueno que el hombre esté solo. Le voy a hacer alguien que sea una ayuda adecuada para él.’Ahora, yo no tomo a esta mujer movido por deseos impuros, sino con intenciones sinceras. Dígnate tener compasión de mí y de ella, y concédenos llegar juntos a la vejez.”
Y ambos añadieron: “Amén, amén”, y se acostaron para pasar la noche.
Mientras tanto Ragüel se levantó y llamó a sus criados, y se fueron a cavar una fosa, pues pensaba: “Si acaso ha muerto, que la gente no se burle de nosotros y nos insulte.” Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.

7. Salmo Responsorial: Del salmo 127
R. ¡Que el Señor te bendiga todos los días de tu vida!  
Feliz tú, que honras al Señor y le eres obediente. Comerás del fruto de tu trabajo, serás feliz y te irá bien. R.
Feliz tú, que honras al Señor y le eres obediente. Comerás del fruto de tu trabajo, serás feliz y te irá bien. R.
Así bendecirá el Señor al hombre que lo honra. ¡Que el Señor te bendiga desde el monte Sión! ¡Que veas el bienestar de Jerusalén todos los días de tu vida! R.

9. Aleluya.

10. Evangelio: Mc 12,28b-34
† Lectura del Evangelio según san Marcos
Uno de los maestros de la ley, se acercó a Jesús y le preguntó: — ¿Cuál es el primero de todos los mandamientos?
Jesús le contestó: —El primer mandamiento de todos es: ‘Oye, Israel: el Señor nuestro Dios es el único Señor. Ama al Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma, con toda tu mente y con todas tus fuerzas.’ Pero hay un segundo: ‘Ama a tu prójimo como a ti mismo.’ Ningún mandamiento es más importante que estos. El maestro de la ley le dijo:–Muy bien, Maestro. Es verdad lo que dices: hay un solo Dios, y no hay otro fuera de él. Y amar a Dios con todo el corazón, con todo el entendimiento y con todas las fuerzas, y amar al prójimo como a uno mismo, vale más que todos los holocaustos y todos los sacrificios que se queman en el altar.
Al ver Jesús que el maestro de la ley había contestado con buen sentido, le dijo: —No estás lejos del reino de Dios.
Y ya nadie se atrevía a hacerle más preguntas. Palabra del Señor. Gloriaati,SeñorJesús.


PERIPLOS DEL OBISPO
Regresar

5 JUNIO – VIERNES – SAN BONIFACIO, MÁRTIR

2 Pe 3, 12-15a.17-18 / Sal 89 / Mc 12, 13-17 – ROJO

Gregorio II, le da el nombre de Bonifacio, en honor al mártir romano. Su misión apostólica se extendió por el reino franco. Este monje benedictino es conocido como el "Apóstol de Alemania". Fue el primer obispo de Maguncia, funda los obispado de Frisia, Hesse, Turingia y Baviera, establece Monasterio como el célebre de Fulda; y reorganiza las iglesias. En su vejez realiza su apostolado por tierras holandesas acompañado por 52 monjes. Es martirizado en Dokkum por los paganos que pretendía evangelizar.

5. Oración Colecta
Mira, Señor, a tu pueblo al que el obispo san Bonifacio evangelizó con la predicación de la palabra y alimentó con el sacramento de la vida, y haz que quienes por tu misericordia se han mantenido fieles a sus enseñanzas, por su intercesión, mantengan siempre vivo el fuego del amor. Por nuestro Señor Jesucristo.

6. Primera Lectura: 2 Pe 3, 12-15a.17-18
Lectura de la segunda carta del Apóstol Pedro
Hermanos: Esperen la llegada del día de Dios, y hagan lo posible por apresurarla. Ese día los cielos serán destruidos por el fuego, y los elementos se derretirán entre las llamas; pero nosotros esperamos el cielo nuevo y la tierra nueva que Dios ha prometido, en los cuales todo será justo y bueno. Por eso, queridos hermanos, mientras esperan estas cosas, hagan todo lo posible para que Dios los encuentre en paz, sin mancha ni culpa. Tengan en cuenta que la paciencia con que nuestro Señor nos trata es para nuestra salvación. Por eso, queridos hermanos, ya que ustedes saben de antemano estas cosas, cuídense, para que no sean arrastrados por los engaños de los malvados ni caigan de su firme posición. Pero conozcan mejor a nuestro Señor y Salvador Jesucristo y crezcan en su amor. ¡Gloria a él ahora y para siempre! Amén. Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.

7. Salmo Responsorial: Del salmo 89
R. Señor, tú has sido nuestro refugio por todas las edades.
Desde antes que se formaran los montes y que existieran la tierra y el mundo, desde los tiempos antiguos y hasta los tiempos postreros, tú eres Dios. R.
Haces que el hombre vuelva al polvo cuando dices: “Vuelvan al polvo, seres humanos.” En verdad, mil años, para ti, son como el día de ayer, que pasó. ¡Son como unas cuantas horas de la noche! R.
Setenta son los años que vivimos; los más fuertes llegan hasta ochenta; pero el orgullo de vivir tanto solo trae molestias y trabajo. ¡Los años pronto pasan, lo mismo que nosotros! R.
Llénanos de tu amor al comenzar el día, y alegres cantaremos toda nuestra. vida ¡Haz que tus siervos y sus descendientes puedan ver tus obras y tu gloria! R.

9. Aleluya.

10. Evangelio: Mc 12, 13-17
† Lectura del Evangelio según san Marcos
Mandaron a Jesús algunos de los fariseos y del partido de Herodes, para hacerle decir algo de que pudieran acusarlo. Estos fueron y le dijeron: —Maestro, sabemos que tú dices la verdad, sin dejarte llevar por lo que diga la gente, porque no hablas para darles gusto. Tú enseñas de veras el camino de Dios. ¿Está bien que paguemos impuestos al emperador romano, o no? ¿Debemos o no debemos pagarlos?
Pero Jesús, que conocía su hipocresía, les dijo: — ¿Por qué me tienden trampas? Tráiganme una moneda de denario, para que la vea.
Se la llevaron, y Jesús les dijo: — ¿De quién es esta cara y el nombre que aquí está escrito? Le contestaron: — Del emperador.
Entonces Jesús les dijo: —Pues den al emperador lo que es del emperador, y a Dios lo que es de Dios.
Y su respuesta los dejó admirados. Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.

Oración sobre las Ofrendas
Dios todopoderoso, que este sacrificio que te ofrece tu pueblo en la fiesta de san Bonifacio traiga consigo los dones del cielo que esperamos de tu misericordia. Por Jesucristo nuestro Señor.

21. Oración después de la Comunión
Celebrando con gozo la fiesta de san Bonifacio hemos recibido, Señor, la prenda de la salvación eterna; que ella sea para nosotros auxilio en esta vida participación en la vida futura. Por Jesucristo nuestro Señor.


PERIPLOS DEL O
Regresar

6 JUNIO – SÁBADO – 9ª SEMANA TIEMPO ORDINARIO

Tob 12, 1.5-15.20 / Tob 13 / Mc 12, 38-44 – VERDE

6. Primera Lectura: Tob 12, 1.5-15.20
Lectura del libro Tobías
Tobit llamó a su hijo Tobías y le dijo: —Hijo, no dejes de pagarle a tu compañero de viaje lo que estaba convenido, y aun dale más.
Entonces Tobías lo llamó y le dijo: —Toma como paga la mitad de todo lo que trajiste, y que te vaya bien.
Entonces Rafael llamó aparte a los dos y les dijo: —Alaben a Dios, y hablen de sus beneficios delante de todos los hombres. Alábenlo y canten salmos a su nombre. Honren a Dios dando a conocer a todo hombre lo que él ha hecho. No se cansen de darle gracias. Cuando el rey le confía a uno un secreto, es bueno quedarse callado; pero hay que honrar a Dios contando a todos y publicando lo que él ha hecho. Hagan el bien, y ningún mal vendrá sobre ustedes. Mucho mejor es la oración acompañada de ayuno, y dar limosna viviendo honradamente, que tener riquezas y ser un malvado. Ahora voy a contarles toda la verdad, no voy a ocultarles nada. Ya les había dicho que cuando el rey le confía a uno un secreto, es bueno quedarse callado, pero que hay que honrar a Dios dando a conocer lo que él ha hecho. Pues bien, Tobit, mientras tú y Sara oraban, yo presentaba sus oraciones ante la presencia gloriosa del Señor, para que él las tuviera en cuenta. Y lo mismo hacía yo mientras tú enterrabas a los muertos. Aquella vez, cuando no dudaste en levantarte y dejar servida la comida para ir a enterrar a aquel muerto, Dios me envió a ponerte a prueba. Y ahora también me ha enviado Dios a sanarte, lo mismo que a Sara, tu nuera. Yo soy Rafael, uno de los siete ángeles que están al servicio del Señor y que pueden entrar ante su presencia gloriosa. Den gracias ahora al Señor de la tierra, alaben a Dios. Yo voy a subir a Dios, que me envió. Pongan por escrito todo lo que les ha sucedido. Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.

7. Salmo Responsorial: Tobías 13
R. Bendito sea el Señor para siempre.
- “Alabado sea Dios, que vive y reina por siempre. Él castiga, pero también tiene compasión. Hace bajar hasta el reino de la muerte, y salva de la gran perdición. Nada puede escapar a su poder. R.
- “Si se vuelven a Dios de todo corazón y con toda el alma, y proceden sinceramente ante él, él se volverá a ustedes y no se les ocultará más. R.
- Vean ahora lo que hizo con ustedes, y denle gracias públicamente. Alaben al Señor, que hace justicia; den gloria al Rey eterno. R.
- “Yo lo alabo en este país de mi destierro, y muestro a una nación pecadora la fuerza y la grandeza de Dios. Les digo: ‘Pecadores, vuélvanse a Dios, hagan lo que es recto a los ojos de él. Quizá sea favorable a ustedes y les tenga compasión.’” R.

9. Aleluya.

10. Evangelio: Mc 12, 38-44

† Lectura del Evangelio según san Marcos
Jesús decía en su enseñanza: “Cuídense de los maestros de la ley, pues les gusta andar con ropas largas y que los saluden con todo respeto en las plazas. Buscan los asientos de honor en las sinagogas y los mejores lugares en las comidas; y despojan de sus bienes a las viudas, y para disimularlo hacen largas oraciones. Ellos recibirán mayor castigo.”
Jesús estaba una vez sentado frente a los cofres de las ofrendas, mirando cómo la gente echaba dinero en ellos. Muchos ricos echaban mucho dinero. En esto llegó una viuda pobre, y echó en uno de los cofres dos moneditas de cobre, de muy poco valor. Entonces Jesús llamó a sus discípulos, y les dijo: —Les aseguro que esta viuda pobre ha dado más que todos los otros que echan dinero en los cofres;  pues todos dan de lo que les sobra, pero ella, en su pobreza, ha dado todo lo que tenía para vivir. Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.


PERIPLOS DEL OBISPO
Regresar

7 JUNIO – DOMINGO – CORPUS CHRISTI

Ex 24,3-8 / Sal 115 / Heb 9,11-15 / Mc 14,12-16.22-26 – BLANCO

5. Oración Colecta
Señor nuestro Jesucristo, que en este sacramento admirable nos dejaste el memorial de tu pasión, concédenos venerar de tal modo los sagrados misterios de tu Cuerpo y de tu Sangre, que experimentemos constantemente en nosotros el fruto de tu redención. Tú que vives y reinas con el Padre en la unidad del Espíritu Santo.

6. Primera Lectura:Ex 24,3-8
Lectura del libro del Éxodo
Moisés fue y le contó al pueblo todo lo que el Señor había dicho y ordenado, y todos a una voz contestaron: —¡Haremos todo lo que el Señor ha ordenado!
Entonces Moisés escribió todo lo que el Señor había dicho, y al día siguiente, muy temprano, se levantó y construyó un altar al pie del monte, y colocó doce piedras sagradas, una por cada tribu de Israel. Luego mandó a unos jóvenes israelitas que mataran toros y los ofrecieran al Señor como holocaustos y sacrificios de reconciliación. Moisés tomó la mitad de la sangre y la echó en unos tazones, y la otra mitad la roció sobre el altar. Después tomó el libro de la alianza y se lo leyó al pueblo, y ellos dijeron: —Pondremos toda nuestra atención en hacer lo que el Señor ha ordenado.
Entonces Moisés tomó la sangre y, rociándola sobre la gente, dijo: —Esta es la sangre que confirma la alianza que el Señor ha hecho con ustedes, sobre la base de todas estas palabras. Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.

7. Salmo Responsorial: Del salmo 115
R. Invocaré tu nombre, Señor.
¿Cómo podré pagar al Señor todo el bien que me ha hecho? ¡Levantaré la copa de la salvación e invocaré su nombre! R.
Mucho le cuesta al Señor ver morir a los que lo aman. ¡Oh Señor, yo soy tu siervo! ¡Yo soy el hijo de tu sierva! Tú has roto los lazos que me ataban. R.
En gratitud, te ofreceré sacrificios, e invocaré, Señor, tu nombre. Cumpliré mis promesas al Señor en presencia de todo su pueblo. R.

8. Segunda Lectura: Heb 9,11-15
Lectura de la carta a los Hebreos
Hermanos: Cristo ya vino, y ahora él es el Sumo Sacerdote de los bienes definitivos. El santuario donde él actúa como sacerdote es mejor y más perfecto, y no ha sido hecho por los hombres; es decir, no es de esta creación. Cristo ha entrado en el santuario, ya no para ofrecer la sangre de chivos y becerros, sino su propia sangre; ha entrado una sola vez y para siempre, y ha obtenido para nosotros la liberación eterna. Es verdad que la sangre de los toros y chivos, y las cenizas de la becerra que se quema en el altar, las cuales son rociadas sobre los que están impuros, tienen poder para consagrarlos y purificarlos por fuera. Pero si esto es así, ¡cuánto más poder tendrá la sangre de Cristo! Pues por medio del Espíritu eterno, Cristo se ofreció a sí mismo a Dios como sacrificio sin mancha, y su sangre limpia nuestra conciencia de las obras que llevan a la muerte, para que podamos servir al Dios viviente. Por eso, Jesucristo es mediador de una nueva alianza y un nuevo testamento, pues con su muerte libra a los hombres de los pecados cometidos bajo la primera alianza, y hace posible que los que Dios ha llamado reciban la herencia eterna que él les ha prometido. Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.

9. Aleluya.

10. Evangelio: Mc 14,12-16.22-26
† Lectura del Evangelio según san Marcos
El primer día de la fiesta en que se comía el pan sin levadura, cuando se sacrificaba el cordero de Pascua, los discípulos de Jesús le preguntaron: —¿Dónde quieres que vayamos a prepararte la cena de Pascua?
Entonces envió a dos de sus discípulos, diciéndoles: —Vayan a la ciudad. Allí encontrarán a un hombre que lleva un cántaro de agua; síganlo, y donde entre, digan al dueño de la casa: ‘El Maestro pregunta: ¿Cuál es el cuarto donde voy a comer con mis discípulos la cena de Pascua?’ Él les mostrará en el piso alto un cuarto grande, arreglado y ya listo para la cena. Prepárennos allí lo necesario.
Los discípulos salieron y fueron a la ciudad. Lo encontraron todo como Jesús les había dicho, y prepararon la cena de Pascua.
Mientras comían, Jesús tomó en sus manos el pan y, habiendo pronunciado la bendición, lo partió y se lo dio a ellos, diciendo: —Tomen, esto es mi cuerpo.
Luego tomó en sus manos una copa y, habiendo dado gracias a Dios, se la pasó a ellos, y todos bebieron. Les dijo: —Esto es mi sangre, con la que se confirma la alianza,  sangre que es derramada en favor de muchos. Les aseguro que no volveré a beber del producto de la vid, hasta el día en que beba el vino nuevo en el reino de Dios. Después de cantar los salmos, se fueron al Monte de los Olivos. Palabra del Señor. Gloria a ti Señor Jesús.

13. Oración de los Fieles
+ El Señor hace nuevamente presente su pascua, que salva a la humanidad, sobre el altar; elevémosle nuestras súplicas diciendo: Te rogamos, Señor, óyenos.
- Para que cuando los presbíteros presidan la celebración eucarística, el pueblo vea en ellos la imagen viva de Cristo, roguemos al Señor. R.
- Para que pronto llegue el día en que todos los cristianos celebremos la Eucaristía en la unidad de una sola Iglesia, roguemos al Señor. R.
- Para que los fieles que se encuentran a las puertas de la muerte dejen este mundo fortalecidos con el Cuerpo y Sangre de Cristo, roguemos al Señor. R.
- Para que adoremos siempre en espíritu y verdad a Cristo, realmente presente en el admirable sacramento de la Eucaristía, roguemos al Señor. R.
+ Mira, Padre, a tu pueblo, reunido en torno a la mesa de tu Hijo para celebrar el sacrificio de la nueva alianza y escucha sus súplicas. Por Jesucristo, nuestro Señor.

Oración sobre las Ofrendas
Señor, concede a tu Iglesia los dones de la unidad y de la paz, simbolizados en las ofrendas sacramentales que te presentamos. Por Jesucristo, nuestro Señor.

21. Oración después de la Comunión
Concédenos, Señor, disfrutar eternamente del gozo de tu divinidad que ahora pregustamos, en la comunión de tu Cuerpo y de tu Sangre. Tú que vives y reinas.


PERIPLOS DEL OBISPO
Regresar

8 JUNIO – LUNES – 10ª SEMANA TIEMPO ORDINARIO

2 Cor 1,1-7 / Sal 33/ Mt 5,1-12 – VERDE

5. Oración Colecta
Dios nuestro, de quien todo bien procede, inspíranos propósitos de justicia y santidad y concédenos tu ayuda para poder cumplirlos. Por nuestro Señor Jesucristo.
6. Primera Lectura: 2 Cor 1,1-7
Comienzo de la segunda carta del Apóstol Pablo a los Corintios
Pablo, apóstol de Cristo Jesús por la voluntad de Dios,  saluda, junto con el hermano Timoteo,  a la iglesia de Dios que está en la ciudad de Corinto  y a los demás hermanos de toda la región de Acaya. Que Dios nuestro Padre y el Señor Jesucristo derramen su gracia y su paz sobre ustedes. 
Alabado sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, pues él es el Padre que nos tiene compasión y el Dios que siempre nos consuela. Él nos consuela en todos nuestros sufrimientos, para que nosotros podamos consolar también a los que sufren, dándoles el mismo consuelo que él nos ha dado a nosotros. Porque así como los sufrimientos de Cristo se desbordan sobre nosotros y nosotros sufrimos con él, así también por medio de Cristo se desborda nuestro consuelo. Pues si nosotros sufrimos, es para que ustedes tengan consuelo y salvación; y si Dios nos consuela, también es para que ustedes tengan consuelo y puedan soportar con fortaleza los mismos sufrimientos que nosotros padecemos. Tenemos una esperanza firme en cuanto a ustedes, porque nos consta que, así como tienen parte en los sufrimientos, también tienen parte en el consuelo. Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.

7. Salmo Responsorial: Del salmo 33
R. Feliz el que confía en el Señor.
- Bendeciré al Señor a todas horas; mis labios siempre lo alabarán. Yo me siento orgulloso del Señor; ¡óiganlo y alégrense, hombres humildes! R.
- Alabemos juntos y a una voz la grandeza del nombre del Señor. Recurrí al Señor, y él me contestó, y me libró de todos mis temores. R.
- Los que miran al Señor quedan radiantes de alegría y jamás se verán defraudados. Este pobre gritó, y el Señor lo oyó y lo libró de todas sus angustias. R.
- El ángel del Señor protege y salva a los que honran al Señor. Prueben, y vean que el Señor es bueno. ¡Feliz el hombre que en él confía! R.

9. Aleluya.

10. Evangelio: Mt 5, 1-12
† Lectura del Evangelio según san Mateo
Al ver la multitud, Jesús subió al monte y se sentó. Sus discípulos se le acercaron, y él tomó la palabra y comenzó a enseñarles, diciendo: “Dichosos los que tienen espíritu de pobres, porque de ellos es el reino de los cielos.
“Dichosos los que sufren, porque serán consolados.
“Dichosos los humildes, porque heredarán la tierra prometida.
“Dichosos los que tienen hambre y sed de la justicia, porque serán satisfechos.
“Dichosos los compasivos, porque Dios tendrá compasión de ellos.
“Dichosos los de corazón limpio, porque verán a Dios.
“Dichosos los que trabajan por la paz, porque Dios los llamará hijos suyos.
“Dichosos los perseguidos por hacer lo que es justo, porque de ellos es el reino de los cielos.
“Dichosos ustedes, cuando la gente los insulte y los maltrate, y cuando por causa mía los ataquen con toda clase de mentiras. Alégrense, estén contentos, porque van a recibir un gran premio en el cielo; pues así también persiguieron a los profetas que vivieron antes que ustedes.” Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
Oración sobre las Ofrendas
Mira, Señor, con bondad, estos dones que te presentamos humildemente, para que sean gratos a tus ojos y nos hagan crecer en tu amor. Por Jesucristo, nuestro Señor.

21. Oración después de la Comunión
Señor, que la fuerza redentora de esta Eucaristía nos libre de nuestras malas inclinaciones y nos guíe siempre por el camino de tus mandamientos. Por Jesucristo.


PERIPLOS DEL OBISPO
Regresar

9 JUNIO – MARTES – SAN EFRÉN DE SIRIA, DIÁCONO

2 Tim 4, 1-8 / Sal 70 / Mc 12, 38-44 – BLANCO

Nació en Nísibis, Mesopotamia (Irak), a principio del siglo IV, en una familia cristiana. Su formación espiritual estuvo en manos de los obispos Santiago y Vologeses. Fue Consejero del obispo Narsés y fundador de la escuela llamada "de los persas". Distinguido con "la cítara del Espíritu Santo", por su exquisito aporte como poeta a la escuela poética siríaca. Son famosas sus composiciones de himnos religiosos. En la antigüedad era considerado como el más grande cantor de la Santísima Virgen. Se conservan 77 himnos de su autoría escritos en honor a Cristo, la Virgen Santísima y otros temas sagrados.

5. Oración Colecta
Señor, que infundiste en el diácono san Efrén tu admirable doctrina, concédenos, por su
intercesión, permanecer siempre fieles a esa misma doctrina, y modelar conforme a ella nuestra propia conducta. Por nuestro Señor.

6. Primera Lectura: 2 Tim 4, 1-8
Lectura de la segunda carta del Apóstol Pablo a Timoteo
Hermano: Delante de Dios y de Cristo Jesús, que vendrá glorioso como Rey a juzgar a los vivos y a los muertos, te encargo mucho que prediques el mensaje, y que insistas cuando sea oportuno y aun cuando no lo sea. Convence, reprende y anima, enseñando con toda paciencia. Porque va a llegar el tiempo en que la gente no soportará la sana enseñanza; más bien, según sus propios caprichos, se buscarán un montón de maestros que solo les enseñen lo que ellos quieran oír. Darán la espalda a la verdad y harán caso a toda clase de cuentos. Pero tú conserva siempre el buen juicio, soporta los sufrimientos, dedícate a anunciar el evangelio, cumple bien con tu trabajo.
Yo ya estoy para ser ofrecido en sacrificio; ya se acerca la hora de mi muerte. He peleado la buena batalla, he llegado al término de la carrera, me he mantenido fiel. Ahora me espera la corona merecida que el Señor, el Juez justo, me dará en aquel día. Y no me la dará solamente a mí, sino también a todos los que con amor esperan su venida gloriosa. Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.

7. Salmo Responsorial: Del salmo 70
R. Contaré las grandes cosas que tú, Señor, has hecho.
Todo el día están llenos mis labios de alabanzas a tu gloria; no me desprecies cuando ya sea viejo; no me abandones cuando ya no tenga fuerzas. R.
Pero yo esperaré en todo momento, y más y más te alabaré; todo el día anunciaré con mis labios que tú nos has salvado y nos has hecho justicia. R.
Contaré las grandes cosas que tú, Señor, has hecho; ¡proclamaré que solo tú eres justo! Dios mío, tú me has enseñado desde mi juventud, y aún sigo anunciando tus grandes obras. R.
Yo, por mi parte, cantaré himnos y alabaré tu lealtad al son del arpa y del salterio, Dios mío, Santo de Israel. R.

9. Aleluya.

10. Evangelio: Mc 12, 38-44
† Lectura del Evangelio según san Marcos
Jesús decía en su enseñanza: “Cuídense de los maestros de la ley, pues les gusta andar con ropas largas y que los saluden con todo respeto en las plazas. Buscan los asientos de honor en las sinagogas y los mejores lugares en las comidas; y despojan de sus bienes a las viudas, y para disimularlo hacen largas oraciones. Ellos recibirán mayor castigo.”
Jesús estaba una vez sentado frente a los cofres de las ofrendas, mirando cómo la gente echaba dinero en ellos. Muchos ricos echaban mucho dinero. En esto llegó una viuda pobre, y echó en uno de los cofres dos moneditas de cobre, de muy poco valor. Entonces Jesús llamó a sus discípulos, y les dijo:—Les aseguro que esta viuda pobre ha dado más que todos los otros que echan dinero en los cofres;  pues todos dan de lo que les sobra, pero ella, en su pobreza, ha dado todo lo que tenía para vivir. Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.

Oración sobre las Ofrendas
Al celebrar estos divinos misterios, te rogamos, Señor, que el Espíritu Santo derrame sobre nosotros aquella misma luz con la que iluminó a tu siervo san Efrén y lo impulsó a la propagación de tu gloria. Por Jesucristo nuestro Señor.

21. Oración después de la Comunión
Reanimados con el pan del cielo, te rogamos, Señor, que, a imitación de san Efrén, permanezcamos en continua acción de gracias por los dones recibidos. Por Jesucristo.


PERIPLOS DEL OBISPO
Regresar

10 JUNIO – MIÉRCOLES – 10ª SEMANA TIEMPO ORDINARIO

2 Cor 3, 4-11 / Sal 98 / Mt 5, 17-19 – VERDE

6. Primera Lectura: 2 Cor 3, 4-11
Lectura de la segunda carta del Apóstol Pablo a los Corintios
Hermanos: Confiados en Dios por medio de Cristo, estamos seguros de esto. No es que nosotros mismos estemos capacitados para considerar algo como nuestro; al contrario, todo lo que podemos hacer viene de Dios, pues él nos ha capacitado para ser servidores de una nueva alianza, basada no en una ley, sino en la acción del Espíritu. La ley condena a muerte, pero el Espíritu de Dios da vida. Si la promulgación de una ley que llevaba a la muerte y que estaba grabada sobre tablas de piedra se hizo con tanta gloria que los israelitas ni siquiera podían mirar la cara de Moisés, debido a que ese resplandor destinado a desaparecer era tan grande, ¡cuánta más será la gloria del anuncio de una nueva alianza fundada en el Espíritu! Es decir, que si fue tan gloriosa la promulgación de una ley que sirvió para condenarnos, ¡cuánto más glorioso será el anuncio de que Dios nos hace justos! Porque la gloria anterior ya no es nada en comparación con esto, que es mucho más glorioso. Y si fue glorioso lo que había de terminar por desaparecer, mucho más glorioso será lo que permanece para siempre. Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.

7. Salmo Responsorial: Del salmo 98
R. Santo es el Señor, nuestro Dios.
- ¡Alaben al Señor, nuestro Dios, y arrodíllense delante de sus pies! ¡Dios es santo! R.
- Moisés y Aarón están entre sus sacerdotes; Samuel está entre los que alabaron su nombre. El Señor les respondía cuando ellos pedían su ayuda. R.
- Dios habló con ellos desde la columna de nube, y ellos cumplieron sus mandatos y la ley que les dio. R.
- Señor, Dios nuestro, ¡tú les respondías! Fuiste para ellos un Dios de perdón, pero también castigaste sus maldades. R.
- Alaben al Señor nuestro Dios, ¡arrodíllense ante su santo monte! R.

9. Aleluya.

10. Evangelio: Mt 5, 17-19
† Lectura del Evangelio según san Mateo
Jesús dijo a sus discípulos: “No crean ustedes que yo he venido a suprimir la ley o los profetas; no he venido a ponerles fin, sino a darles su pleno valor. Pues les aseguro que mientras existan el cielo y la tierra, no se le quitará a la ley ni un punto ni una letra, hasta que todo llegue a su cumplimiento. Por eso, el que no obedece uno de los mandatos de la ley, aunque sea el más pequeño, ni enseña a la gente a obedecerlo, será considerado el más pequeño en el reino de los cielos. Pero el que los obedece y enseña a otros a hacer lo mismo, será considerado grande en el reino de los cielos. Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.


PERIPLOS DEL OBISPO
Regresar

11 JUNIO – JUEVES – SAN BERNABÉ, APÓSTOL

Hch 11, 21b-26; 13, 1-3 / Sal 97 / Mt 10, 7-13 – ROJO

Bernabé, varón bueno, lleno de Espíritu Santo y de fe, formó parte de los primeros creyentes en Jerusalén y predicó el Evangelio en Antioquía e introdujo entre los hermanos a Saulo de Tarso, recién convertido. Con él realizó un primer viaje por Asia, participó luego en el Concilio de Jerusalén y terminó sus días en la isla de Chipre, su patria, sin cesar de difundir el Evangelio (s. I).

5. Oración Colecta
Señor, tu que llenaste de fe y de amor al apóstol san Bernabé y lo destinaste a predicar la salvación a los paganos, ayúdanos, por su intercesión, dar a conocer a todos tu Evangelio por medio de nuestra vida y de nuestra palabra. Por nuestro Señor.

6. Primera Lectura: Hch 11, 21b-26. 13,1-3
Lectura del libro de los Hechos de los Apóstoles
En aquellos días muchos dejaron sus antiguas creencias y creyeron en el Señor. Los de la iglesia de Jerusalén, al conocer esta noticia, mandaron a Bernabé a Antioquia. Al llegar, Bernabé vio cómo Dios los había bendecido, y se alegró mucho. Les aconsejó a todos que con corazón firme siguieran fieles al Señor. Porque Bernabé era un hombre bueno, lleno del Espíritu Santo y de fe. Y así mucha gente se unió al Señor. Después de esto, Bernabé fue a Tarso a buscar a Saulo, y cuando lo encontró, lo llevó a Antioquia. Allí estuvieron con la iglesia un año entero, enseñando a mucha gente. Fue en Antioquia donde por primera vez se les dio a los discípulos el nombre de cristianos. En la iglesia que estaba en Antioquía había profetas y maestros. Eran Bernabé, Simón (al que también llamaban el Negro), Lucio de Cirene, Menahem (que se había criado junto con Herodes, el que gobernó en Galilea) y Saulo. Un día, mientras estaban celebrando el culto al Señor y ayunando, el Espíritu Santo dijo: “Sepárenme a Bernabé y a Saulo para el trabajo al cual los he llamado.”
Entonces, después de orar y ayunar, les impusieron las manos y los despidieron. Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.

7. Salmo Responsorial: Del salmo 97
R. El Señor revela a las naciones su justicia.
¡Canten al Señor una canción nueva, pues ha hecho maravillas! ¡Ha alcanzado la victoria con su gran poder, con su santo brazo! R.
El Señor ha anunciado su victoria, ha mostrado su justicia a la vista de las naciones; ha tenido presentes su amor y su lealtad hacia el pueblo de Israel. R.
¡Hasta el último rincón del mundo ha sido vista la victoria de nuestro Dios! Canten a Dios con alegría, habitantes de toda la tierra; den rienda suelta a su alegría y cántenle himnos. R.
Canten himnos al Señor al son del arpa, al son de los instrumentos de cuerda. Canten con alegría ante el Señor, el Rey, al son de los instrumentos de viento. R.

9. Aleluya.

10. Evangelio: Mt 10, 7-13
† Lectura del Evangelio según san Mateo
Jesús dijo a los apóstoles: “Vayan y anuncien que el reino de los cielos se ha acercado. Sanen a los enfermos, resuciten a los muertos, limpien de su enfermedad a los leprosos y expulsen a los demonios. Ustedes recibieron gratis este poder; no cobren tampoco por emplearlo.
“No lleven oro ni plata ni cobre ni provisiones para el camino. No lleven ropa de repuesto ni sandalias ni bastón, pues el trabajador tiene derecho a su alimento.
“Cuando lleguen ustedes a un pueblo o aldea, busquen alguna persona de confianza y quédense en su casa hasta que se vayan de allí. Al entrar en la casa, saluden a los que viven en ella. Si la gente de la casa lo merece, su deseo de paz se cumplirá; pero si no lo merece, ustedes nada perderán.” Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.

Oración sobre las Ofrendas
Que el sacrificio que vamos a ofrecerte encienda, Señor, en nosotros el amor que impulsó a san Bernabé, apóstol, a difundir la luz del Evangelio. Por Jesucristo.

21. Oración después de la Comunión
Te suplicamos, Señor, por intercesión de san Bernabé, que esta Eucaristía, en la que hemos recibido a Cristo sacramentalmente, nos partícipes de la vida nueva del Reino. Por Jesucristo, nuestro Señor.


PERIPLOS DEL OBISPO
Regresar

12 JUNIO – VIERNES – SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

Os 11,1b.3-4.8c-9 / Is 12,2-6 / Ef 3,8-12.14-19 / Jn 19,31-37 – BLANCO

5. Oración Colecta
Padre, que has depositado infinitos tesoros de misericordia en el corazón de tu amado Hijo, herido por nuestros pecados, concédenos que, al rendirle nuestro homenaje de amor, logremos también tributarle una debida reparación. Por nuestro Señor.

6. Primera Lectura: Os 11,1b.3-4.8c-9
Lectura del libro del profeta Oseas
Dice el Señor: “A Israel, que era mi hijo, lo llamé de Egipto. Con todo, yo guié al pueblo de Efraín y lo enseñé a caminar; pero ellos no comprendieron que era yo quien los cuidaba. Con lazos de ternura, con cuerdas de amor, los atraje hacia mí; los acerqué a mis mejillas como si fueran niños de pecho; me incliné a ellos para darles de comer. ¡Mi corazón está conmovido, lleno de compasión por ti! No actuaré según el ardor de mi ira: no volveré a destruir a Efraín, porque yo soy Dios, no hombre. Yo soy el Santo, que estoy en medio de ti, y no he venido a destruirte. Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.

7. Salmo Responsorial: De Is 12,2-6
R. Sacarán aguas con gozo, de las fuentes de la salvación.
- Dios es quien me salva; tengo confianza, no temo. El Señor es mi refugio y mi fuerza, él es mi salvador.” También ustedes podrán beber con alegría en esa fuente de salvación. R.
- “Den gracias e invoquen al Señor, cuenten a las naciones las cosas que ha hecho, recuérdenles que él está por encima de todo. R.
- Canten al Señor, porque ha hecho algo grandioso que debe conocerse en toda la tierra. Den gritos de alegría, habitantes de Sión, porque el Dios Santo de Israel está en medio de ustedes con toda su grandeza.” R.

8. Segunda Lectura: Ef 3,8-12.14-19
Lectura de la carta del apóstol Pablo a los Efesios
Hermanos: Yo soy menos que el más pequeño de todos los que pertenecen al pueblo santo; pero él me ha concedido este privilegio de anunciar a los no judíos la buena noticia de las incontables riquezas de Cristo. Y me ha encargado hacerles ver a todos cuál es la realización de ese designio que Dios, creador de todas las cosas, había mantenido secreto desde la eternidad. De esta manera ahora, por medio de la iglesia, todos los poderes y autoridades en el cielo podrán conocer la sabiduría de Dios, que se muestra en tan variadas formas. Dios hizo esto de acuerdo con el plan eterno que llevó a cabo en Cristo Jesús nuestro Señor. Y en Cristo tenemos libertad para acercarnos a Dios, con la confianza que nos da nuestra fe en él.
Por esta razón me pongo de rodillas delante del Padre, de quien recibe su nombre toda familia, tanto en el cielo como en la tierra. Pido al Padre que de su gloriosa riqueza les dé a ustedes, interiormente, poder y fuerza por medio del Espíritu de Dios, que Cristo viva en sus corazones por la fe, y que el amor sea la raíz y el fundamento de sus vidas. Y que así puedan comprender con todo el pueblo santo cuán ancho, largo, alto y profundo es el amor de Cristo. Pido, pues, que conozcan ese amor, que es mucho más grande que todo cuanto podemos conocer, para que lleguen a colmarse de la plenitud total de Dios. Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.

9. Aleluya.

10. Evangelio: Jn 19,31-37
† Lectura del Evangelio según san Juan
Como era el día antes de la Pascua, y los judíos no querían que los cuerpos quedaran en las cruces durante el sábado, pues precisamente aquel sábado era muy solemne. Por eso le pidieron a Pilato que ordenara quebrar las piernas a los crucificados y que quitaran de allí los cuerpos. Los soldados fueron entonces y le quebraron las piernas al primero, y también al otro que estaba crucificado junto a Jesús. Pero al acercarse a Jesús, vieron que ya estaba muerto. Por eso no le quebraron las piernas.
Sin embargo, uno de los soldados le atravesó el costado con una lanza, y al momento salió sangre y agua. El que cuenta esto es uno que lo vio, y dice la verdad; él sabe que dice la verdad, para que ustedes también crean. Porque estas cosas sucedieron para que se cumpliera la Escritura que dice: “No le quebrarán ningún hueso.” Y en otra parte, la Escritura dice: “Mirarán al que traspasaron.” Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.

Oración sobre las Ofrendas
Ten en cuenta, Señor, el inefable amor de tu Hijo, para que este don que te ofrecemos, sea agradable a tus ojos y sirva como expiación de nuestros pecados. Por Jesucristo.

21. Oración después de la Comunión
Señor, que este sacramento de caridad nos haga arder en un santo amor que, atrayéndonos siempre hacia tu Hijo, nos enseñe a reconocerlo en cada uno de nuestros hermanos. Por Jesucristo, nuestro Señor.


PERIPLOS DEL OBISPO
Regresar

13 JUNIO – SÁBADO – INMACULADO CORAZÓN DE MARÍA

Hch 1,12-14 / Sal 45, 11-12.14-17 / Lc 2,41-51 – BLANCO

5. Oración Colecta
Dios nuestro, que formaste en el corazón de santa María una digna morada al Espíritu Santo, ayúdanos, por su maternal intercesión, a que dispongamos nuestro corazón, para que tu Espíritu habite en nosotros. Por nuestro Señor Jesucristo.

6. Primera Lectura: Hch 1,12-14
Lectura del libro de los Hechos de los Apóstoles
Desde el monte llamado de los Olivos, regresaron los apóstoles a Jerusalén: un trecho corto, precisamente lo que la ley permitía caminar en sábado. Cuando llegaron a la ciudad, subieron al piso alto de la casa donde estaban alojados. Eran Pedro, Juan, Santiago, Andrés, Felipe, Tomás, Bartolomé, Mateo, Santiago hijo de Alfeo, Simón el Celote, y Judas, el hijo de Santiago. Todos ellos se reunían siempre para orar con algunas mujeres, con María, la madre de Jesús, y con sus hermanos. Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.

7. Salmo Responsorial: Del salmo 45
R. Mi corazón se alegra por el Señor, mi salvador.
- El rey desea tu belleza; él es tu señor, y debes obedecerlo. Los más ricos del pueblo procuran con regalos ganarse tu favor. R.
- ¡Aquí entra la princesa, en toda su hermosura! ¡Su vestido es de brocado de oro! Espléndidamente vestida la llevan ante el rey, seguida de sus damas de honor. R.
- Avanzan con gran alegría; alegres entran en el palacio del rey. Tus hijos, oh rey, ocuparán el trono de tus antepasados, y harás que gobiernen en todo el país. R.

9. Aleluya.

10. Evangelio: Lc 2,41-51
† Lectura del Evangelio según san Lucas
Los padres de Jesús iban todos los años a Jerusalén para la fiesta de la Pascua. Y así, cuando Jesús cumplió doce años, fueron allá todos ellos, como era costumbre en esa fiesta. Pero pasados aquellos días, cuando volvían a casa, el niño Jesús se quedó en Jerusalén, sin que sus padres se dieran cuenta. Pensando que Jesús iba entre la gente, hicieron un día de camino; pero luego, al buscarlo entre los parientes y conocidos, no lo encontraron. Así que regresaron a Jerusalén para buscarlo allí.
Al cabo de tres días lo encontraron en el templo, sentado entre los maestros de la ley, escuchándolos y haciéndoles preguntas. Y todos los que lo oían se admiraban de su inteligencia y de sus respuestas. Cuando sus padres lo vieron, se sorprendieron; y su madre le dijo: —Hijo mío, ¿por qué nos has hecho esto? Tu padre y yo te hemos estado buscando llenos de angustia.
Jesús les contestó: —¿Por qué me buscaban? ¿No sabían que tengo que estar en la casa de mi Padre?
Pero ellos no entendieron lo que les decía.
Entonces volvió con ellos a Nazaret, donde vivió obedeciéndolos en todo. Su madre guardaba todo esto en su corazón. Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.

Oración sobre las Ofrendas
Señor, que el sacrificio que vamos a ofrecerte en esta festividad de la santa María, sea agradable a tus ojos y nos alcance tu redención. Por Jesucristo, nuestro Señor.

21. Oración después de la Comunión
Señor, que nos has hecho partícipes del memorial de nuestra redención, concédenos, por intercesión de santa María, la Madre de tu Hijo, participar más profundamente de tu vida y alegrarnos con la abundancia de tus bendiciones. Por Jesucristo, nuestro Señor.


PERIPLOS DEL OBISPO
Regresar

14 JUNIO – DOMINGO – 12ª SEMANA TIEMPO ORDINARIO

Ez 17, 22-24 / Sal 91 / 2 Cor 5,6-10 / Mc 4,26-34 – VERDE
5. Oración Colecta
Dios nuestro, fuerza de todos los que en ti confían, ayúdanos con tu gracia, sin la cual nada puede nuestra humana debilidad, para que podamos serte fieles en la observancia de tus mandamientos. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo.

6. Primera Lectura: Ez 17,22-24
Lectura del libro del Ezequiel
“Yo, el Señor, digo: También yo voy a tomar la punta más alta del cedro; arrancaré un retoño tierno de la rama más alta, y yo mismo lo plantaré en un monte muy elevado, en el monte más alto de Israel. Echará ramas, dará fruto y se convertirá en un cedro magnífico. Animales de toda clase vivirán debajo de él, y aves de toda especie anidarán a la sombra de sus ramas. Y todos los árboles del campo sabrán que yo soy el Señor. Yo derribo el árbol orgulloso y hago crecer el árbol pequeño. Yo seco el árbol verde y hago reverdecer el árbol seco. Yo, el Señor, lo digo y lo cumplo.” Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.

7. Salmo Responsorial: Del salmo 91
R. Señor, ¡qué bueno es darte gracias!
Altísimo Señor, ¡qué bueno es darte gracias y cantar himnos en tu honor! Anunciar por la mañana y por la noche tu gran amor y fidelidad. R.
Los buenos florecen como las palmas y crecen como los cedros del Líbano. Están plantados en el templo del Señor; florecen en los atrios de nuestro Dios. R.
Aun en su vejez, darán fruto; siempre estarán fuertes y lozanos, y anunciarán que el Señor, mi protector, es recto y no hay en él injusticia. R.

8. Segunda Lectura: 2Cor 5,6-10
Lectura de la segunda carta del Apóstol Pablo a los Corintios
Hermanos: Tenemos siempre confianza porque sabemos que mientras vivamos en este cuerpo estaremos como en el destierro, lejos del Señor. Ahora no podemos verlo, sino que vivimos sostenidos por la fe; pero tenemos confianza, y quisiéramos más bien desterrarnos de este cuerpo para ir a vivir con el Señor. Por eso procuramos agradar siempre al Señor, ya sea que sigamos viviendo aquí o que tengamos que irnos. Porque todos tenemos que presentarnos ante el tribunal de Cristo,  para que cada uno reciba lo que le corresponda, según lo bueno o lo malo que haya hecho mientras estaba en el cuerpo. Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.

9. Aleluya.

10. Evangelio: Mc 4,26-34
† Lectura del Evangelio según san Marcos
Jesús dijo a la multitud: “Con el reino de Dios sucede como con el hombre que siembra semilla en la tierra: que lo mismo da que esté dormido o despierto, que sea de noche o de día, la semilla nace y crece, sin que él sepa cómo. Y es que la tierra produce por sí misma: primero el tallo, luego la espiga y más tarde los granos que llenan la espiga. Y cuando ya el grano está maduro, lo recoge, porque ha llegado el tiempo de la cosecha.”
También dijo: “¿A qué se parece el reino de Dios, o con qué podremos compararlo? Es como una semilla de mostaza que se siembra en la tierra. Es la más pequeña de todas las semillas del mundo, pero una vez sembrada, crece y se hace mayor que todas las otras plantas del huerto, con ramas tan grandes que hasta las aves pueden posarse bajo su sombra.”
De esta manera les enseñaba Jesús el mensaje, por medio de muchas parábolas como estas, según podían entender. Pero no les decía nada sin parábolas, aunque a sus discípulos se lo explicaba todo aparte. Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.

13. Oración de los Fieles
+ Hermanos, elevemos nuestras súplicas a Dios Padre con la plena confianza de ser escuchados, respondiendo: Te rogamos, Señor, óyenos.
- Para que los presbíteros, vivan plenamente identificados con el Señor, y el pueblo vea en ellos la imagen viva de Cristo, roguemos al Señor. R.
- Para que pronto todos los seres humanos, de un extremo al otro del mundo, ofrezcan el sacrificio del Cuerpo y la Sangre de Cristo, roguemos al Señor. R.
- Para que los fieles que se encuentran a las puertas de la muerte, lleguen al reino de la felicidad y de la vida, roguemos al Señor. R.
- Para que el Señor fortalezca constantemente nuestra fe y acreciente nuestro amor, a fin de que adoremos en espíritu y verdad a Cristo, roguemos al Señor. R.
+ Padre santo, escucha las súplicas de tu pueblo y purifica nuestros corazones para que, participemos de la gloria de la Jerusalén del cielo. Por Jesucristo.

Oración sobre las Ofrendas
Dios nuestro, que en estos dones que te presentamos nos otorgas el pan que nos alimenta y el sacramento que nos da nueva vida, haz que nunca llegue a faltarnos este sustento del cuerpo y del espíritu. Por Jesucristo, nuestro Señor.

21. Oración después de la Comunión
Que nuestra participación en este sacramento signo de la unión de los fieles en ti, contribuya, Señor, a la unidad de tu Iglesia. Por Jesucristo, nuestro Señor.


PERIPLOS DEL OBISPO
Regresar

15 JUNIO – LUNES – 11ª SEMANA TIEMPO ORDINARIO

2 Cor 6, 1-10 / Sal 97 / Mt 5, 38-42 – VERDE

6. Primera Lectura: 2 Cor 6, 1-10
Lectura de la segunda carta del Apóstol Pablo a los Corintios
Hermanos: Como colaboradores en la obra de Dios, les rogamos a ustedes que no desaprovechen la bondad que Dios les ha mostrado. Porque él dice en las Escrituras: “En el momento oportuno te escuché; en el día de la salvación te ayudé.” Y ahora es el momento oportuno. ¡Ahora es el día de la salvación!
En nada damos mal ejemplo a nadie, para que nuestro trabajo no caiga en descrédito. Al contrario, en todo damos muestras de que somos siervos de Dios, soportando con mucha paciencia los sufrimientos, los desvelos y el hambre. También lo demostramos por nuestra pureza de vida, por nuestro conocimiento de la verdad, por nuestra tolerancia y bondad, por la presencia del Espíritu Santo en nosotros, por nuestro amor sincero, por nuestro mensaje de verdad y por el poder de Dios en nosotros. Usamos las armas de la rectitud, tanto para el ataque como para la defensa. Unas veces se habla bien de nosotros, y otras veces se habla mal. Nos tratan como a mentirosos, a pesar de que decimos la verdad. Nos tratan como a desconocidos, a pesar de que somos bien conocidos. Estamos medio muertos, pero seguimos viviendo; nos castigan, pero no nos matan. Parecemos tristes, pero siempre estamos contentos; parecemos pobres, pero enriquecemos a muchos; parece que no tenemos nada, pero lo tenemos todo. Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.

7. Salmo Responsorial: Del salmo 97
R. El Señor da a conocer su victoria.
- ¡Canten al Señor una canción nueva, pues ha hecho maravillas! ¡Ha alcanzado la victoria con su gran poder, con su santo brazo! R.
- El Señor ha anunciado su victoria, ha mostrado su justicia a la vista de las naciones; ha tenido presentes su amor y su lealtad hacia el pueblo de Israel. R.
- ¡Hasta el último rincón del mundo ha sido vista la victoria de nuestro Dios! Canten a Dios con alegría, habitantes de toda la tierra; den rienda suelta a su alegría y cántenle himnos. R.

9. Aleluya.

10. Evangelio: Mt 5, 38-42         
† Lectura del Evangelio según san Mateo
En aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos: “Ustedes han oído que se dijo: ‘Ojo por ojo y diente por diente.’ Pero yo les digo: No resistas al que te haga algún mal; al contrario, si alguien te pega en la mejilla derecha, ofrécele también la otra y si alguien te demanda y te quiere quitar la camisa, déjale que se lleve también tu capa. Si te obligan a llevar carga una milla, llévala dos. A cualquiera que te pida algo, dáselo; y no le vuelvas la espalda al que te pida prestado. Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.


PERIPLOS DEL OBISPO
Regresar

16 JUNIO – MARTES – 11ª SEMANA TIEMPO ORDINARIO

2 Cor 8, 1-9 / Sal 145 / Mt 5, 43-48 – VERDE

6. Primera Lectura: 2 Cor 8, 1-9
Lectura de la segunda carta del Apóstol Pablo a los Corintios
Ahora, hermanos, queremos contarles cómo se ha mostrado la bondad de Dios en las iglesias de Macedonia. A pesar de las pruebas por las que han tenido que pasar, son muy felices; y a pesar de ser muy pobres, sus ofrendas han sido tan generosas como si fueran ricos. Por su propia iniciativa nos rogaron mucho que les permitiéramos tomar parte en esta ayuda para el pueblo de Dios. Y hasta hicieron más de lo que esperábamos, pues se ofrendaron a sí mismos, primero al Señor y luego a nosotros, conforme a la voluntad de Dios. Por eso hemos rogado a Tito que recoja entre ustedes esta bondadosa colecta que él comenzó antes a recoger. Pues ustedes, que sobresalen en todo: en fe, en facilidad de palabra, en conocimientos, en buena disposición para servir y en amor que aprendieron de nosotros, igualmente deben sobresalir en esta obra de caridad. No les digo esto como un mandato; solamente quiero que conozcan la buena disposición de otros, para darles a ustedes la oportunidad de demostrar que su amor es verdadero. Porque ya saben ustedes que nuestro Señor Jesucristo, en su bondad, siendo rico se hizo pobre por causa de ustedes, para que por su pobreza ustedes se hicieran ricos. Palabra de Dios. Tealabamos, Señor.

7. Salmo Responsorial: Del salmo 145
R. Alaba, alma mía, al Señor.
- Alabaré al Señor mientras yo viva; cantaré himnos a mi Dios mientras yo exista. R.
- Feliz quien recibe ayuda del Dios de Jacob, quien pone su esperanza en el Señor. Él hizo cielo, tierra y mar, y todo lo que hay en ellos. Él siempre mantiene su palabra. R.
- Hace justicia a los oprimidos y da de comer a los hambrientos. El Señor da libertad a los presos. R.
- El Señor devuelve la vista a los ciegos; el Señor levanta a los caídos; el Señor ama a los hombres honrados; el Señor protege a los extranjeros y sostiene a los huérfanos y a las viudas. R.

9. Aleluya.

10. Evangelio: Mt 5, 43-48
† Lectura del Evangelio según san Mateo
Jesús dijo a la multitud: “También han oído que se dijo: ‘Ama a tu prójimo y odia a tu enemigo.’ Pero yo les digo: Amen a sus enemigos, y oren por quienes los persiguen. Así ustedes serán hijos de su Padre que está en el cielo; pues él hace que su sol salga sobre malos y buenos, y manda la lluvia sobre justos e injustos. Porque si ustedes aman solamente a quienes los aman, ¿qué premio recibirán? Hasta los que cobran impuestos para Roma se portan así. Y si saludan solamente a sus hermanos, ¿qué hacen de extraordinario? Hasta los paganos se portan así. Sean ustedes perfectos, como su Padre que está en el cielo es perfecto. Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.


PERIPLOS DEL OBISPO
Regresar

17 JUNIO – MIÉRCOLES – 11ª SEMANA TIEMPO ORDINARIO

2 Cor 9, 6-11 / Sal 111 / Mt 6, 1-6.16-18 – VERDE

6. Primera Lectura: 2 Cor 9, 6-11
Lectura de la segunda carta del Apóstol Pablo a los Corintios
Hermanos: El que siembra poco, poco cosecha; el que siembra mucho, mucho cosecha. Cada uno debe dar según lo que haya decidido en su corazón, y no de mala gana o a la fuerza, porque Dios ama al que da con alegría. Dios puede darles a ustedes con abundancia toda clase de bendiciones, para que tengan siempre todo lo necesario y además les sobre para ayudar en toda clase de buenas obras. La Escritura dice: “Ha dado abundantemente a los pobres, y su generosidad permanece para siempre.” Dios, que da la semilla que se siembra y el alimento que se come, les dará a ustedes todo lo necesario para su siembra, y la hará crecer, y hará que la generosidad de ustedes produzca una gran cosecha. Así tendrán ustedes toda clase de riquezas y podrán dar generosamente. Y la colecta que ustedes envíen por medio de nosotros, será motivo de que los hermanos den gracias a Dios. Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.

7. Salmo Responsorial: Del salmo 111
R. Dichosos quienes temen al Señor.
- Feliz el hombre que honra al Señor y se complace en sus mandatos. Los descendientes del hombre honrado serán bendecidos y tendrán poder en la tierra. R.
- En su casa hay abundantes riquezas, y su generosidad es constante. Brilla una luz en la oscuridad para los hombres honrados, para el que es compasivo, clemente y justo. R.
- Reparte limosna entre los pobres, su generosidad es constante, levanta la frente con honor. R.

9. Aleluya.

10. Evangelio: Mt 6,1-6. 16-18
† Lectura del Evangelio según san Mateo
 Jesús dijo a la multitud: “No hagan sus buenas obras delante de la gente solo para que los demás los vean. Si lo hacen así, su Padre que está en el cielo no les dará ningún premio. Por eso, cuando ayudes a los necesitados, no lo publiques a los cuatro vientos, como hacen los hipócritas en las sinagogas y en las calles para que la gente hable bien de ellos. Les aseguro que con eso ya tienen su premio. Cuando tú ayudes a los necesitados, no se lo cuentes ni siquiera a tu amigo más íntimo; hazlo en secreto. Y tu Padre, que ve lo que haces en secreto, te dará tu premio.
“Cuando ustedes oren, no sean como los hipócritas, a quienes les gusta orar de
pie en las sinagogas y en las esquinas de las plazas para que la gente los vea. Les aseguro que con eso ya tienen su premio. Pero tú, cuando ores, entra en tu cuarto, cierra la puerta y ora a tu Padre en secreto. Y tu Padre, que ve lo que haces en secreto, te dará tu premio.
“Cuando ustedes ayunen, no pongan cara triste, como los hipócritas, que aparentan tristeza para que la gente vea que están ayunando. Les aseguro que con eso ya tienen su premio. Tú, cuando ayunes, lávate la cara y arréglate bien, para que la gente no note que estás ayunando. Solamente lo notará tu Padre, que está en lo oculto, y tu Padre que ve en lo oculto te dará tu recompensa.” Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.


PERIPLOS DEL OBISPO
Regresar

18 JUNIO – JUEVES – 11ª SEMANA TIEMPO ORDINARIO

2 Cor 11, 1-11 / Sal 110 / Mt 6, 7-15 – VERDE

6. Primera Lectura: 2 Cor 11, 1-11
Lectura de la segunda carta del Apóstol Pablo a los Corintios
Hermanos: ¡Ojalá me soportaran ustedes un poco de locura! Como quiera que sea, sopórtenme. Porque el celo que siento por ustedes es un celo que viene de Dios. Yo los he comprometido en casamiento  con un solo esposo, Cristo, y quiero presentarlos ante él puros como una virgen. Pero temo que, así como la serpiente engañó con su astucia a Eva, también ustedes se dejen engañar, y que sus pensamientos se aparten de la actitud sincera y pura hacia Cristo. Ustedes soportan con gusto a cualquiera que llega hablándoles de un Jesús diferente del que nosotros les hemos predicado; y aceptan de buena gana un espíritu diferente del Espíritu que ya recibieron y un evangelio diferente del que ya han aceptado. Pues bien, yo no me siento inferior en nada a esos super apóstoles que vinieron después. Aunque yo sea torpe en mi modo de hablar,  no lo soy en cuanto a conocimientos; y esto se lo hemos demostrado a ustedes siempre y en todos nuestros hechos. ¿Será que hice mal en anunciarles el evangelio de Dios sin cobrarles nada, humillándome yo para enaltecerlos a ustedes? Les he quitado su dinero a otras iglesias, al aceptar que ellos me pagaran para poder servirles a ustedes. Y cuando estando entre ustedes necesité algo, nunca fui una carga para ninguno. Procuré no ser una carga para ustedes, y así seguiré haciéndolo. Tan seguro estoy que conozco la verdad de Cristo, como de que nadie me va a quitar este motivo de orgullo en toda la región de Acaya. ¿Por qué hablo así? ¿Será porque no los quiero a ustedes? ¡Dios sabe que sí los quiero! Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.

7. Salmo Responsorial: Del salmo 110
R. Justas y verdaderas son tus obras, Señor.
- Alabaré al Señor de todo corazón en la reunión de los hombres honrados, en la comunidad entera. Las obras del Señor son grandes, y quienes las aman, las estudian. R.
- Su obra es bella y esplendorosa, y su justicia permanece para siempre. Ha hecho inolvidables sus maravillas. El Señor es tierno y compasivo. R.
- Lo que él hace es justo y verdadero; se puede confiar en sus mandamientos, pues son firmes hasta la eternidad y están hechos con verdad y rectitud. R.

9. Aleluya.

10. Evangelio: Mt 6, 7-15
† Lectura del Evangelio según san Mateo
Jesús dijo a la multitud: “Y al orar no repitan ustedes palabras inútiles, como hacen los paganos que se imaginan que cuanto más hablen más caso les hará Dios.
No sean como ellos, porque su Padre ya sabe lo que ustedes necesitan, antes que se lo pidan. Ustedes deben orar así:
‘Padre nuestro que estás en el cielo, santificado sea tu nombre.
Venga tu reino. Hágase tu voluntad en la tierra, así como se hace en el cielo.
Danos hoy el pan que necesitamos.
Perdónanos el mal que hemos hecho, así como nosotros hemos perdonado a los que nos han hecho mal.
No nos expongas a la tentación, sino líbranos del maligno.’

“Porque si ustedes perdonan a otros el mal que les han hecho, su Padre que está en el cielo los perdonará también a ustedes; pero si no perdonan a otros, tampoco su Padre les perdonará a ustedes sus pecados.” Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús

PERIPLOS DEL OBISPO
Regresar

19 JUNIO – VIERNES – 11ª SEMANA TIEMPO ORDINARIO

2 Cor 11, 18.21b-30 / Sal 33 / Mt 6, 19-23 – VERDE

6. Primera Lectura: 2 Cor 11, 18.21b-30
Lectura de la segunda carta del Apóstol Pablo a los Corintios 
¡Ya que hay tantos que se glorían de sus propios méritos, también yo me gloriaré! Pero si los otros se atreven a jactarse, también yo me atreveré, aunque esto sea una locura. ¿Son ellos hebreos? Yo también. ¿Son israelitas? Yo también. ¿Son descendientes de Abraham? Yo también. ¿Son siervos de Cristo? Yo lo soy más que ellos, aunque al decir esto hablo como un loco. Yo he trabajado más que ellos, me han encarcelado más veces que a ellos, he sido azotado más que ellos, y muchas veces he estado en peligro de muerte. En cinco ocasiones los judíos me castigaron con los treinta y nueve azotes. Tres veces me apalearon, y una me apedrearon. En tres ocasiones se hundió el barco en que yo viajaba, y, a punto de ahogarme, pasé una noche y un día en alta mar. He viajado mucho, y me he visto en peligros de ríos, en peligros de ladrones, y en peligros entre mis paisanos y entre los extranjeros. También me he visto en peligros en la ciudad, en el campo y en el mar, y en peligros entre falsos hermanos. He pasado trabajos y dificultades; muchas veces me he quedado sin dormir; he sufrido hambre y sed; muchas veces no he comido; he sufrido por el frío y por la falta de ropa.
Además de estas y otras cosas, cada día pesa sobre mí la preocupación por todas las iglesias. Si alguien enferma, también yo enfermo; y si hacen caer a alguno, yo me indigno. Si de algo hay que gloriarse, me gloriaré de las cosas que demuestran mi debilidad. Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.

7. Salmo Responsorial: DelSalmo 33
R. Alabemos juntos la grandeza del Señor.
Bendeciré al Señor a todas horas; mis labios siempre lo alabarán. Yo me siento orgulloso del Señor; ¡óiganlo y alégrense, hombres humildes! R.
Alabemos juntos y a una voz la grandeza del nombre del Señor. Recurrí al Señor, y él me contestó, y me libró de todos mis temores. R.
Los que miran al Señor quedan radiantes de alegría y jamás se verán defraudados. Este pobre gritó, y el Señor lo oyó y lo libró de todas sus angustias. R.

9. Aleluya.

10. Evangelio: Mt 6, 19-23
† Lectura del Evangelio según san Mateo
Jesús dijo a la multitud: “No amontonen riquezas aquí en la tierra, donde la polilla destruye y las cosas se echan a perder, y donde los ladrones entran a robar. Más bien amontonen riquezas en el cielo, donde la polilla no destruye ni las cosas se echan a perder ni los ladrones entran a robar. Pues donde esté tu riqueza, allí estará también tu corazón.
“Los ojos son la lámpara del cuerpo; así que, si tus ojos son buenos, todo tu cuerpo tendrá luz; pero si tus ojos son malos, todo tu cuerpo estará en oscuridad. Y si la luz que hay en ti resulta ser oscuridad, ¡qué negra será la oscuridad misma! Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.


PERIPLOS DEL OBISPO
Regresar

20 JUNIO – SÁBADO – 11ª SEMANA TIEMPO ORDINARIO

2 Cor 12,1-10 / Sal 33 / Mt 6,24-34 – VERDE

6. Primera Lectura: 2 Cor 12,1-10
Lectura de la segunda carta del Apóstol Pablo a los Corintios
Nada gana uno con gloriarse de sí mismo. Sin embargo, tengo que hablar de las visiones y revelaciones que he recibido del Señor. Conozco a un seguidor de Cristo, que hace catorce años fue llevado al tercer cielo. No sé si fue llevado en cuerpo o en espíritu; Dios lo sabe. Pero sé que ese hombre (si en cuerpo o en espíritu, no lo sé, solo Dios lo sabe) fue llevado al paraíso, donde oyó palabras tan secretas que a ningún hombre se le permite pronunciarlas. Yo podría gloriarme de alguien así, pero no de mí mismo, a no ser de mis debilidades. Aunque si quisiera yo gloriarme, eso no sería ninguna locura, porque estaría diciendo la verdad; pero no lo hago, para que nadie piense que soy más de lo que aparento o de lo que digo, juzgándome por lo extraordinario de esas revelaciones. Por eso, para que yo no me crea más de lo que soy, he tenido un sufrimiento, una especie de espina clavada en el cuerpo, que como un instrumento de Satanás vino a maltratarme. Tres veces le he pedido al Señor que me quite ese sufrimiento; pero el Señor me ha dicho: “Mi amor es todo lo que necesitas; pues mi poder se muestra plenamente en la debilidad.” Así que prefiero gloriarme de ser débil, para que repose sobre mí el poder de Cristo. Y me alegro también de las debilidades, los insultos, las necesidades, las persecuciones y las dificultades que sufro por Cristo, porque cuando más débil me siento es cuando más fuerte soy. Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.

7. Salmo Responsorial: Del Salmo 33
R. Vengan, voy a enseñarles a honrar al Señor.
El ángel del Señor protege y salva a los que honran al Señor. Prueben, y vean que el Señor es bueno. ¡Feliz el hombre que en él confía! R.
Honren al Señor, los consagrados a él, pues nada falta a los que lo honran. Los ricos empobrecen, y sufren hambre, pero a los que buscan al Señor nunca les faltará nada. R.
Vengan, hijos míos, y escúchenme: voy a enseñarles a honrar al Señor. ¿Quieres vivir mucho tiempo? ¿Quieres gozar de la vida? R.

9. Aleluya.

10. Evangelio: Mt 6,24-34
† Lectura del Evangelio según san Mateo
Jesús dijo a la multitud: “Nadie puede servir a dos amos, porque odiará a uno y querrá al otro, o será fiel a uno y despreciará al otro. No se puede servir a Dios y a las riquezas. Por lo tanto, yo les digo: No se preocupen por lo que han de comer o beber para vivir, ni por la ropa que necesitan para el cuerpo. ¿No vale la vida más que la comida y el cuerpo más que la ropa? Miren las aves que vuelan por el aire: no siembran ni cosechan ni guardan la cosecha en graneros; sin embargo, el Padre de ustedes que está en el cielo les da de comer. ¡Y ustedes valen más que las aves! En todo caso, por mucho que uno se preocupe, ¿cómo podrá prolongar su vida ni siquiera una hora?
“¿Y por qué se preocupan ustedes por la ropa? Fíjense cómo crecen los lirios del campo:  no trabajan ni hilan. Sin embargo, les digo que ni siquiera el rey Salomón, con todo su lujo, se vestía como uno de ellos. Pues si Dios viste así a la hierba, que hoy está en el campo y mañana se quema en el horno, ¡con mayor razón los vestirá a ustedes, gente falta de fe! Así que no se preocupen, preguntándose: ‘¿Qué vamos a comer?’ o ‘¿Qué vamos a beber?’ o ‘¿Con qué vamos a vestirnos?’ Todas estas cosas son las que preocupan a los paganos, pero ustedes tienen un Padre celestial que ya sabe que las necesitan. Por lo tanto, pongan toda su atención en el reino de los cielos y en hacer lo que es justo ante Dios, y recibirán también todas estas cosas. No se preocupen por el día de mañana, porque mañana habrá tiempo para preocuparse. Cada día tiene bastante con sus propios problemas.” Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.


PERIPLOS DEL OBISPO
Regresar

21 JUNIO – DOMINGO – 12ª SEMANA TIEMPO ORDINARIO

Job 38, 1.8-11 / Sal 106 / 2 Cor 5, 14-17 / Mc 4, 35-40 – VERDE
5. Oración Colecta
Padre misericordioso, que nunca dejas de tu mano a quienes has hecho tus amigos, concédenos vivir siempre movidos por tu amor y por el filial temor de ofenderte. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que siendo Dios vive y reina contigo, en la unidad.

6. Primera Lectura: Job 38, 1.8-11
Lectura de libro de Job
El Señor le habló a Job de en medio de la tempestad: “Cuando el mar brotó del seno de la tierra, ¿quién le puso compuertas para contenerlo?
Yo le di una nube por vestido y la niebla por pañales. Yo le puse un límite al mar y cerré con llave sus compuertas. Y le dije: “Llegarás hasta aquí, y de aquí no pasarás; aquí se romperán tus olas arrogantes.” Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
Salmo Responsorial: Del salmo 106
R. Den gracias al Señor por su amor.
- Se hicieron a la mar los comerciantes. Surcaron las aguas con sus barcos, y allí, en alta mar, vieron la creación maravillosa del Señor. R.
- A la voz del Señor se desató una tormenta que levantaba grandes olas; eran lanzados hasta el cielo y hundidos hasta el fondo del mar; ¡perdieron el valor ante el peligro! R.
- Pero en su angustia clamaron al Señor, y él los sacó de la aflicción; convirtió en brisa la tempestad, y las olas se calmaron. R.
- Al ver tranquilas las olas, se alegraron, y Dios los llevó hasta el puerto deseado. Den gracias al Señor por su amor, ¡por lo que hace en favor de los hombres! R.

Segunda Lectura: 2 Cor 5, 14-17
Lectura de la segunda carta del Apóstol Pablo a los Corintios
Hermanos: El amor de Cristo  se ha apoderado de nosotros desde que comprendimos que uno  murió por todos y que, por consiguiente, todos han muerto. Y Cristo murió por todos, para que los que viven ya no vivan para sí mismos, sino para él, que murió y resucitó por ellos. Por eso, nosotros ya no pensamos de nadie según los criterios de este mundo; y aunque antes pensábamos de Cristo según tales criterios, ahora ya no pensamos así de él. Por lo tanto, el que está unido a Cristo es una nueva persona. Las cosas viejas pasaron; se convirtieron en algo nuevo. Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.

Aleluya.

Evangelio: Mc 4, 35-40

† Lectura del Evangelio según san Marcos 
Un día al anochecer, Jesús dijo a sus discípulos: —Vamos al otro lado del lago.
Entonces dejaron a la gente y llevaron a Jesús en la barca en que ya estaba; y también otras barcas lo acompañaban. En esto se desató una tormenta, con un viento tan fuerte que las olas caían sobre la barca, de modo que se llenaba de agua. Pero Jesús se había dormido en la parte de atrás, apoyado sobre una almohada. Lo despertaron y le dijeron: —¡Maestro! ¿No te importa que nos estemos hundiendo?
Jesús se levantó y dio una orden al viento, y dijo al mar:–¡Silencio! ¡Quédate quieto!
El viento se calmó, y todo quedó completamente tranquilo. Después dijo Jesús a los discípulos: —¿Por qué están asustados? ¿Todavía no tienen fe? Palabra del Señor. Gloria a ti Señor Jesús.
13. Oración de los Fieles
+ Elevemos, hermanos y hermanas, nuestros ojos al Señor y esperemos, confiados, su ayuda salvífica, respondiendo: Escúchanos, Señor.
- Por los obispos, por los presbíteros, diáconos, pastores y líderes de las diferentes Iglesias, roguemos al Señor. R.
- Por el buen tiempo, por la prosperidad del trabajo de todos, roguemos al Señor. R.
- Por todos los consagrados a Dios y por los religiosos y servidores que trabajan en nuestras comunidades, roguemos al Señor. R.
- Por todos los que hacen el bien en nuestras comunidades y por los que cuidan de los pobres y de los enfermos, roguemos al Señor. R.
+ Escucha, Señor, nuestras oraciones y fortalece nuestra fe, para que reconozcamos que nos acompañas en el camino de la vida. Por Jesucristo.

Oración sobre las Ofrendas
Acepta, Señor, este sacrificio de reconciliación que vamos a ofrecerte, a fin de que purifique nuestros corazones y podamos corresponder a tu amor. Por Jesucristo.

21. Oración después de la Comunión
Señor, tú que nos has renovado con el Cuerpo y la Sangre de tu Hijo, concédenos que la participación en esta Eucaristía nos ayude a obtener la plenitud de la redención. Por Jesucristo, nuestro Señor.


PERIPLOS DEL OBISPO
Regresar

22 JUNIO – LUNES – 12ª SEMANA TIEMPO ORDINARIO

Gn 12, 1-9 / Sal 32 / Mt 7, 1-5 – VERDE

6. Primera Lectura: Gn 12, 1-9
Lectura del libro del Génesis
Un día el Señor le dijo a Abram: “Deja tu tierra, tus parientes y la casa de tu padre, para ir a la tierra que yo te voy a mostrar. Con tus descendientes voy a formar una gran nación; voy a bendecirte y hacerte famoso, y serás una bendición para otros. Bendeciré a los que te bendigan y maldeciré a los que te maldigan; por medio de ti bendeciré a todas las familias del mundo.”
Abram salió de Harán tal como el Señor se lo había ordenado. Tenía setenta y cinco años cuando salió de allá para ir a la tierra de Canaán. Con él se llevó a su esposa Sarai y a su sobrino Lot, y también todas las cosas que tenían y la gente que habían adquirido en Harán. Cuando llegaron a Canaán, Abram atravesó toda esa región hasta llegar a Siquem, donde está la encina sagrada de Moré. Los cananeos vivían entonces en aquella región. Allí el Señor se le apareció y le dijo: “Esta tierra se la voy a dar a tu descendencia.”
Entonces Abram construyó un altar en honor del Señor, porque allí se le había aparecido. Luego se fue a la región montañosa que está al este de la ciudad de Betel, y allí puso su campamento. Betel quedaba al oeste de donde él había acampado, y la ciudad de Ai al este. En ese lugar Abram construyó otro altar e invocó el nombre del Señor. Después siguió su camino, poco a poco, hacia la región del Négueb. Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.

7. Salmo Responsorial: Del salmo 32
R. En el Señor está nuestra esperanza.
- Feliz el pueblo cuyo Dios es el Señor, el pueblo que ha escogido como suyo. El Señor mira desde el cielo y ve a todos los hombres. R.
- Pero el Señor cuida siempre de quienes lo honran y confían en su amor, para salvarlos de la muerte y darles vida en épocas de hambre. R.
- Nosotros confiamos en el Señor; ¡él nos ayuda y nos protege! ¡Que tu amor, Señor, nos acompañe, tal como esperamos de ti! R.

9. Aleluya.

10. Evangelio: Mt 7, 1-5
† Lectura del Evangelio según san Mateo
Jesús dijo a la multitud: “No juzguen a otros,  para que Dios no los juzgue a ustedes. Pues Dios los juzgará a ustedes de la misma manera que ustedes juzguen a otros; y con la misma medida con que ustedes den a otros, Dios les dará a ustedes. ¿Por qué te pones a mirar la astilla que tiene tu hermano en el ojo, y no te fijas en el tronco que tú tienes en el tuyo? Y si tú tienes un tronco en tu propio ojo, ¿cómo puedes decirle a tu hermano: ‘Déjame sacarte la astilla que tienes en el ojo’? ¡Hipócrita!, saca primero el tronco de tu propio ojo, y así podrás ver bien para sacar la astilla que tiene tu hermano en el suyo.” Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.


PERIPLOS DEL OBISPO
Regresar

23 JUNIO – MARTES – 12ª SEMANA TIEMPO ORDINARIO

Gn 13, 2.5-18 / Sal 14 / Mt 7, 6.12-14 – VERDE

6. Primera Lectura: Gn 13, 2.5-18
Lectura del libro del Génesis
Abram era muy rico, pues tenía oro, plata y muchos animales. Lot también era muy rico, pues, al igual que su tío Abram, tenía muchas ovejas y vacas, y gente que acampaba con él; pero el lugar donde estaban no bastaba para alimentar a tantos animales. Ya no podían vivir juntos, pues los que cuidaban el ganado de Abram se peleaban con los que cuidaban el ganado de Lot. Además, en aquel tiempo, los cananeos y ferezeos todavía vivían allí. Así que un día Abram le dijo a Lot: “Tú y yo somos parientes, así que no está bien que haya pleitos entre nosotros, ni entre tus pastores y los míos. Ahí está toda la tierra, para que escojas. Por favor, sepárate de mí. Si tú te vas al norte, yo me voy al sur, y si tú te vas al sur, yo me voy al norte.”
Lot miró por todo el valle del río Jordán y vio que, hasta el pueblecito de Sóar, el valle tenía bastante agua y era como un gran jardín. Se parecía a Egipto. (Esto era así antes de que el Señor destruyera las ciudades de Sodoma y Gomorra.) Entonces Lot escogió todo el valle del Jordán, y se fue al oriente del lugar donde estaban. De esta manera, Abram y Lot se separaron. Abram se quedó en Canaán, y Lot se fue a vivir a las ciudades del valle, cerca de la ciudad de Sodoma.
Después que Lot se fue, el Señor le dijo a Abram: “Desde el lugar donde estás, mira bien al norte y al sur, al este y al oeste; yo te daré toda la tierra que ves, y para siempre será tuya y de tus descendientes. Yo haré que ellos sean tantos como el polvo de la tierra. Así como no es posible contar los granitos de polvo, tampoco será posible contar tus descendientes. ¡Levántate, recorre esta tierra a lo largo y a lo ancho, porque yo te la voy a dar!” Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.

7. Salmo Responsorial: Del salmo 14
R. ¿Quién será grato a tus ojos, Señor?
- Solo el que vive sin tacha y practica la justicia; el que dice la verdad de todo corazón; el que no habla mal de nadie. R.
- El que no hace daño a su amigo ni ofende a su vecino; el que mira con desprecio a quien desprecio merece, pero honra a quien honra al Señor. R.
- El que presta su dinero sin exigir intereses; el que no acepta soborno en contra del inocente. El que así vive, jamás caerá. R.

9. Aleluya.

10. Evangelio: Mt 7, 6.12-14
† Lectura del Evangelio según san Mateo
Jesús dijo a sus discípulos: “No den las cosas sagradas a los perros, no sea que se vuelvan contra ustedes y los hagan pedazos. Y no echen sus perlas a los cerdos, no sea que las pisoteen. Hagan ustedes con los demás como quieran que los demás hagan con ustedes. Entren por la puerta angosta. Porque la puerta y el camino que llevan a la perdición son anchos y espaciosos, y muchos entran por ellos; pero la puerta y el camino que llevan a la vida son angostos y difíciles, y pocos los encuentran.” Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.


PERIPLOS DEL OBISPO
Regresar

24 JUNIO – MIÉRCOLES – NATIVIDAD DE SAN JUAN BAUTISTA

Is 49, 1-6 / Sal 138 / Hch 13, 22-26 / Lc 1, 57-66.80 – BLANCO

Uno de los descendientes de David fue Jesús, a quien Dios envió para salvar a Israel, como había prometido. Antes que Jesús viniera, Juan anunciaba el mensaje a todo el pueblo de Israel, diciéndoles que debían volverse a Dios y ser bautizados. Y cuando Juan se iba acercando al fin de su vida, dijo: ‘Yo no soy lo que ustedes piensan; pero después de mí viene uno a quien yo ni siquiera merezco desatarle las sandalias de los pies.’

5. Oración Colecta
Dios nuestro, que enviaste a san Juan Bautista para prepararle a Cristo, el Señor, un pueblo dispuesto a recibirlo, alegra ahora a tu Iglesia con la abundancia de los dones del Espíritu y guíala por el camino de la salvación y de la paz. Por nuestro Señor.

6. Primera Lectura: Is 49, 1-6
Lectura del libro del Profeta Isaías
Óiganme, países del mar, préstenme atención, naciones lejanas: El Señor me llamó desde antes de que yo naciera; pronunció mi nombre cuando aún estaba yo en el seno de mi madre. Convirtió mi lengua en espada afilada, me escondió bajo el amparo de su mano, me convirtió en una flecha aguda y me guardó en su aljaba. Me dijo: “Israel, tú eres mi siervo, en ti me mostraré glorioso.” Y yo que había pensado: “He pasado trabajos en vano, he gastado mis fuerzas sin objeto, para nada.” En realidad mi causa está en manos del Señor, mi recompensa está en poder de mi Dios. He recibido honor delante del Señor mi Dios, pues él ha sido mi fuerza. El Señor, que me formó desde el seno de mi madre para que fuera su siervo, para hacer que Israel, el pueblo de Jacob, se vuelva y se una a él, dice así: “No basta que seas mi siervo solo para restablecer las tribus de Jacob y hacer volver a los sobrevivientes de Israel; yo haré que seas la luz de las naciones, para que lleves mi salvación hasta las partes más lejanas de la tierra.” Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.

7. Salmo Responsorial: Del salmo 138
R. Te doy gracias, Señor, porque me has formado maravillosamente.
Señor, tú me has examinado y me conoces; tú conoces todas mis acciones; aun de lejos te das cuenta de lo que pienso. Sabes mis andanzas, ¡sabes todo lo que hago! R.
Tú fuiste quien formó todo mi cuerpo; tú me formaste en el vientre de mi madre. Te alabo porque estoy maravillado. R.
Es maravilloso lo que has hecho. ¡De ello estoy bien convencido! No te fue oculto el desarrollo de mi cuerpo mientras yo era formado en lo secreto, mientras era formado en lo más profundo de la tierra. R.

8. Segunda Lectura: Hch 13,22-26
Lectura del libro de los Hechos de los Apóstoles
Pablo dijo al pueblo: “Dios les dio por rey a David, de quien dijo: ‘He encontrado que David, hijo de Jesé, es un hombre que me agrada y que está dispuesto a hacer todo lo que yo quiero.’ Uno de los descendientes de este mismo David fue Jesús, a quien Dios envió para salvar a Israel, como había prometido. Antes que Jesús viniera, Juan anunciaba el mensaje a todo el pueblo de Israel, diciéndoles que debían volverse a Dios y ser bautizados. Y cuando Juan se iba acercando al fin de su vida, dijo: ‘Yo no soy lo que ustedes piensan; pero después de mí viene uno a quien yo ni siquiera merezco desatarle las sandalias de los pies.’ Hermanos descendientes de Abraham, y ustedes, los extranjeros que tienen temor de Dios: este mensaje de salvación es para nosotros.” Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.

9. Aleluya.

10. Evangelio: Lc 1,57-66.80
† Lectura del Evangelio según san Lucas
Al cumplirse el tiempo en que Isabel debía dar a luz, tuvo un hijo. Sus vecinos y parientes fueron a felicitarla cuando supieron que el Señor había sido tan bueno con ella. A los ocho días, llevaron a circuncidar al niño, y querían ponerle el nombre de su padre, Zacarías. Pero su madre dijo: —No. Tiene que llamarse Juan.
Le contestaron: —No hay nadie en tu familia con ese nombre.
Entonces preguntaron por señas al padre del niño, para saber qué nombre quería ponerle. El padre pidió una tabla para escribir, y escribió: ‘Su nombre es Juan.’ Y todos se quedaron admirados. En aquel mismo momento Zacarías volvió a hablar, y comenzó a alabar a Dios. Todos los vecinos estaban asombrados, y en toda la región montañosa de Judea se contaba lo sucedido. Todos los que lo oían se preguntaban a sí mismos: “¿Qué llegará a ser este niño?” Porque ciertamente el Señor mostraba su poder en favor de él.
El niño crecía y se hacía fuerte espiritualmente, y vivió en los desiertos hasta el día en que se dio a conocer a los israelitas. Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.

13. Oración de los Fieles
+ Dios, ha manifestado su misericordia enviando a Juan Bautista como precursor de Jesucristo. Confiadamente oremos diciendo: R. Te rogamos Señor, óyenos.
Para que la Iglesia de Dios anuncie a Cristo con tal convicción y entusiasmo, que los seres humanos se conviertan y crean en él, roguemos al Señor. R.
Para que el pueblo de Israel, escuchando la voz de Juan y los profetas, llegue a reconocer a Cristo como su Mesías y Salvador de todos, roguemos al Señor. R.
Para que quienes viven esclavizados por el pecado encuentren en su camino una voz que los llame a la conversión, roguemos al Señor. R.
Para que nosotros sigamos a Cristo con la misma fidelidad con que Juan lo precedió, roguemos al Señor. R.
+ Oremos: Bendice, Padre, a tu pueblo y, por la intercesión de san Juan Bautista, concédele todo lo que con fe te ha pedido. Por Jesucristo nuestro Señor.

Oración sobre las Ofrendas
Acepta, Señor, este sacrificio que vamos a ofrecerte para celebrar el nacimiento de san Juan Bautista, quien anuncio la venida de nuestro Salvador y señaló su presencia en el mundo. Por Jesucristo, nuestro Señor.

21. Oración después de la Comunión
Señor, que la comunión que hemos recibido, al celebrar el nacimiento del precursor de tu Hijo, renueve en nosotros el amor y la fidelidad a Jesucristo, que vive y reina.


PERIPLOS DEL OBISPO
Regresar

25 JUNIO – JUEVES – 12ª SEMANA TIEMPO ORDINARIO

Gn 16, 1-12.15-16 / Sal 105 / Mt 7, 21-29 – VERDE

6. Primera Lectura: Gn 16, 1-12.15-16
Lectura del libro del Génesis
Sarai no podía darle hijos a su esposo Abram, pero tenía una esclava egipcia que se llamaba Agar. Entonces le dijo a Abram: —Mira, el Señor no me ha permitido tener hijos, pero te ruego que te unas a mi esclava Agar, pues tal vez tendré hijos por medio de ella.
Abram aceptó lo que Sarai le dijo, y entonces ella tomó a Agar la egipcia y se la dio como mujer a Abram. Abram se unió a Agar, la cual quedó embarazada; pero cuando se dio cuenta de su estado comenzó a mirar a su señora con desprecio. Entonces Sarai le dijo a Abram: —¡Tú tienes la culpa de que Agar me desprecie! Yo misma te la di por mujer, y ahora que va a tener un hijo se cree más que yo. Que el Señor diga quién tiene la culpa, si tú o yo.
Y Abram le contestó: —Mira, tu esclava está en tus manos; haz con ella lo que mejor te parezca. Entonces Sarai comenzó a maltratarla tanto, que Agar huyó. Pero un ángel del Señor la encontró en el desierto, junto al manantial que está en el camino de Sur, y le preguntó: –Agar, esclava de Sarai, ¿de dónde vienes, y a dónde vas? —Estoy huyendo de mi señora Sarai —contestó ella.
Entonces el ángel del Señor le dijo: —Regresa al lado de tu señora, y obedécela en todo. Además el ángel del Señor le dijo: “Aumentaré tanto tus descendientes, que nadie los podrá contar. Estás encinta y tendrás un hijo, y le pondrás por nombre Ismael, porque el Señor escuchó tu aflicción. Él afirmará su casa aunque sus hermanos se opongan.” 
Y Agar le dio un hijo a Abram, y él lo llamó Ismael. Palabra de Dios. Tealabamos,Señor.

7. Salmo Responsorial: Del salmo 105
R. Demos gracias al Señor, porque es bueno.
- Den gracias al Señor, porque él es bueno, porque su amor es eterno. ¿Quién podrá describir las victorias del Señor? ¿Quién podrá alabarlo como merece? R.
- Felices los que practican la justicia y hacen siempre lo que es justo. Acuérdate de mí, Señor, cuando hagas bien a tu pueblo. R.
- tenme presente cuando vengas a salvar, para que vea yo la dicha de tus escogidos, para que me alegre y enorgullezca con el pueblo que te pertenece. R.

9. Aleluya.

10. Evangelio: Mt 7, 21-29
† Lectura del Evangelio según Mateo
Jesús dijo a la multitud: “No todos los que me dicen: ‘Señor, Señor’, entrarán en el reino de los cielos, sino solamente los que hacen la voluntad de mi Padre celestial. Aquel día muchos me dirán: ‘Señor, Señor, nosotros comunicamos mensajes en tu nombre, y en tu nombre expulsamos demonios, y en tu nombre hicimos muchos milagros.’ Pero entonces les contestaré: ‘Nunca los conocí; ¡aléjense de mí, malhechores!’ Por tanto, el que me oye y hace lo que yo digo, es como un hombre prudente que construyó su casa sobre la roca. Vino la lluvia, crecieron los ríos y soplaron los vientos contra la casa; pero no cayó, porque tenía su base sobre la roca. Pero el que me oye y no hace lo que yo digo, es como un tonto que construyó su casa sobre la arena. Vino la lluvia, crecieron los ríos, soplaron los vientos y la casa se vino abajo. ¡Fue un gran desastre!”
Cuando Jesús terminó de hablar, toda la gente estaba admirada de cómo les enseñaba, porque lo hacía con plena autoridad, y no como sus maestros de la ley. Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.


PERIPLOS DEL OBISPO
Regresar

26 JUNIO – VIERNES – 12ª SEMANA TIEMPO ORDINARIO

Gn 17,1.9-10.15-22 / Sal 127 / Mt 8,1-4 – VERDE

6. Primera Lectura: Gn 17,1.9-10.15-22
Lectura del libro del Génesis
Cuando Abram tenía noventa y nueve años, el Señor se le apareció y le dijo:
—Yo soy el Dios todopoderoso;  vive una vida sin tacha delante de mí. Cumple con mi alianza tú y todos tus descendientes. Esta es la alianza que hago con ustedes: todos los hombres entre ustedes deberán ser circuncidados. 
También Dios le dijo a Abraham: —Tu esposa Sarai ya no se va a llamar así. De ahora en adelante se llamará Sara. La voy a bendecir, y te daré un hijo por medio de ella. Ella será la madre de muchas naciones, y sus descendientes serán reyes de pueblos. Abraham se inclinó, y se rió, mientras pensaba: “¿Acaso un hombre de cien años puede ser padre? ¿Y acaso Sara va a tener un hijo a los noventa años?” Y Dios le contestó: —Lo que yo he dicho es que tu esposa Sara te dará un hijo, y tú le pondrás por nombre Isaac. Con él confirmaré mi alianza, la cual mantendré para siempre con sus descendientes. Mi alianza la mantendré con Isaac, el hijo que Sara te va a dar. Palabra de Dios. Tealabamos,Señor.
7. Salmo Responsorial: Del salmo 127
R. Esta es la bendición del que sirve al Señor.
- Feliz tú, que honras al Señor y le eres obediente. Comerás del fruto de tu trabajo, serás feliz y te irá bien. R.
- En la intimidad de tu hogar, tu mujer será como una vid cargada de uvas; tus hijos, alrededor de tu mesa, serán como retoños de olivo. R.
- Así bendecirá el Señor al hombre que lo honra. ¡Que el Señor te bendiga desde el monte Sión! ¡Que veas el bienestar de Jerusalén todos los días de tu vida! R.

9. Aleluya.

10. Evangelio: Mt 8, 1-4
† Lectura del Evangelio según san Mateo
Cuando Jesús bajó del monte, mucha gente lo siguió. En esto se le acercó un hombre enfermo de lepra, el cual se puso de rodillas delante de él y le dijo: —Señor, si quieres, puedes limpiarme de mi enfermedad.
Jesús lo tocó con la mano, y dijo: —Quiero. ¡Queda limpio!
Al momento, el leproso quedó limpio de su enfermedad. Jesús añadió:—Mira, no se lo digas a nadie; solamente ve y preséntate al sacerdote, y lleva la ofrenda que ordenó Moisés, para que conste ante los sacerdotes. Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.


PERIPLOS DEL OBISPO
Regresar

27 JUNIO – SÁBADO – SAN CIRILO DE ALEJANDRÍA, OBISPO

2 Tim 1,13-14; 2,1-3 / Sal 119, 9-14 / Mt 23,8-12 – BLANCO

Nació en Alejandría en el año 376, obispo y teólogo cristiano refuto el nestorianismo (herejía que consideraba que en Jesucristo había dos personas distintas, una humana y otra divina). San Cirilo consigue la sede de Alejandría. Su pontificado es ajetreado. Hizo clausurar las iglesias de los novacianos y expulsó a los judíos de Alejandría. Jugó un papel fundamental en el Concilio de Éfeso en el 431.

5. Oración Colecta
Señor, Dios nuestro, que has querido infundir en san Cirilo de Alejandría tu admirable doctrina, concédenos, por su intercesión, permanecer siempre fieles a esa misma doctrina, y modelar conforme a ella nuestra propia conducta. Por nuestro Señor.

6. Primera Lectura:2 Tim 1,13-14; 2,1-3
Lectura de la segunda carta del Apóstol Pablo a Timoteo
Hermano: Sigue el modelo de la sana enseñanza que de mí has recibido, y vive en la fe y el amor que tenemos gracias a Cristo Jesús. Con la ayuda del Espíritu Santo que vive en nosotros, cuida de la buena doctrina que se te ha encomendado. Saca fuerzas de la bondad que Dios te ha mostrado por medio de Cristo Jesús. Lo que me has oído decir delante de muchos testigos, encárgaselo a hombres de confianza que sean capaces de enseñárselo a otros. Toma tu parte en los sufrimientos  como un buen soldado de Cristo Jesús. Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.

7. Salmo Responsorial: Del salmo 119
R. Señor: ¡Enséñame tus leyes!
¿Cómo podrá el joven llevar una vida limpia? ¡Viviendo de acuerdo con tu palabra! R.
Yo te busco de todo corazón; no dejes que me aparte de tus mandamientos. He guardado tus palabras en mi corazón para no pecar contra ti. R.
¡Bendito tú, Señor! ¡Enséñame tus leyes! Con taré todos los decretos que pronuncies. Me alegraré en el camino de tus mandatos, más que en todas las riquezas. R.

9. Aleluya.

10. Evangelio: Mt 23,8-12
† Lectura del Evangelio según san Mateo
Jesús dijo a sus discípulos: “Ustedes no deben pretender que la gente los llame maestros, porque todos ustedes son hermanos y tienen solamente un Maestro. Y no llamen ustedes padre a nadie en la tierra, porque tienen solamente un Padre: el que está en el cielo. Ni deben pretender que los llamen guías, porque Cristo es su único Guía. El más grande entre ustedes debe servir a los demás. Porque el que a sí mismo se engrandece, será humillado; y el que se humilla, será engrandecido. Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.

Oración sobre las Ofrendas
Al celebrar estos divinos misterios, te rogamos, Señor, que el Espíritu Santo derrame sobre nosotros aquella misma luz con la que iluminó a tu siervo san Cirilo de Alejandría y lo impulsó a la propagación de tu gloria. Por Jesucristo nuestro Señor.

21. Oración después de la Comunión
Reanimados con el pan del cielo, te rogamos, Señor, que, a imitación de san Cirilo de Alejandría, permanezcamos en continua acción de gracias por los dones recibidos. Por Jesucristo nuestro Señor.


PERIPLOS DEL OBISPO
Regresar

28 JUNIO – DOMINGO – 13ª SEMANA TIEMPO ORDINARIO

Sab 1,13-15; 2,23-24 / Sal 29 2Cor 8,7.9.13-15 / Mc 5,21-43 – VERDE

5. Oración Colecta
Padre de bondad, que por medio de tu gracia nos has hecho hijos de la luz, líbranos de las tinieblas del error y haz que permanezcamos siempre en el esplendor de la verdad. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que siendo Dios vive y reina contigo.

6. Primera Lectura: Sab 1,13-15; 2,23-24
Lectura del libro de la Sabiduría
Dios no hizo la muerte ni se alegra destruyendo a los seres vivientes. Todo lo creó para que existiera; lo que el mundo produce es saludable, y en ello no hay veneno mortal; la muerte no reina en la tierra, porque la justicia es inmortal. En verdad, Dios creó al hombre para que no muriera, y lo hizo a imagen de su propio ser; sin embargo, por la envidia del diablo entró la muerte en el mundo, y la sufren los que del diablo son. Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.

7. Salmo Responsorial: Del salmo 29
R. Te ensalzaré, Señor porque me has librado.
- Señor, yo te alabo porque tú me libertaste, porque no has permitido que mis enemigos se burlen de mí. Señor, mi Dios, te pedí ayuda, y me sanaste; tú, Señor, me salvaste de la muerte; me diste vida, me libraste de morir. R.
- Ustedes, fieles del Señor, ¡cántenle himnos!, ¡alaben su santo nombre! Porque su enojo dura un momento, pero su buena voluntad, toda la vida. Si lloramos por la noche, por la mañana tendremos alegría. R.
- Señor, óyeme y ten compasión de mí; Señor, ¡ayúdame! Has cambiado en danzas mis lamentos: ¡te cantaré himnos de alabanza y siempre te daré gracias! R.

8. Segunda Lectura: 2 Cor 8,7.9.13-15
Lectura de la segunda carta del Apóstol Pablo a los Corintios
Hermanos: Ustedes, que sobresalen en todo: en fe, en facilidad de palabra, en conocimientos, en buena disposición para servir y en amor que aprendieron de nosotros, igualmente deben sobresalir en esta obra de caridad. Porque ya saben ustedes que nuestro Señor Jesucristo, en su bondad, siendo rico se hizo pobre por causa de ustedes, para que por su pobreza ustedes se hicieran ricos. No se trata de que por ayudar a otros ustedes pasen necesidad; se trata más bien de que haya igualdad. Ahora ustedes tienen lo que a ellos les falta; en otra ocasión ellos tendrán lo que les falte a ustedes, y de esta manera habrá igualdad. Como dice la Escritura: “Ni le sobró al que había recogido mucho, ni le faltó al que había recogido poco.” Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.

9. Aleluya.

10. Evangelio: Mc 5,21-43
† Lectura del Evangelio según san Marcos
En aquel tiempo, Jesús regresó en la barca al otro lado  del lago, se le reunió mucha gente, y él se quedó en la orilla. En esto llegó uno de los jefes de la sinagoga, llamado Jairo, que al ver a Jesús se echó a sus pies y le rogó mucho, diciéndole: —Mi hija se está muriendo; ven a poner tus manos sobre ella, para que sane y viva.
Jesús fue con él, y mucha gente lo acompañaba apretujándose a su alrededor. Entre la multitud había una mujer que desde hacía doce años estaba enferma, con derrames de sangre. Había sufrido mucho a manos de muchos médicos, y había gastado todo lo que tenía, sin que le hubiera servido de nada. Al contrario, iba de mal en peor. Cuando oyó hablar de Jesús, esta mujer se le acercó por detrás, entre la gente, y le tocó la capa. Porque pensaba: “Tan solo con que llegue a tocar su capa, quedaré sana.” Al momento, el derrame de sangre se detuvo, y sintió en el cuerpo que ya estaba curada de su enfermedad. Jesús, dándose cuenta de que había salido poder de él, se volvió a mirar a la gente, y preguntó: —¿Quién me ha tocado la ropa?
Sus discípulos le dijeron: —Ves que la gente te oprime por todos lados, y preguntas ‘¿Quién me ha tocado?’
Pero Jesús seguía mirando a su alrededor, para ver quién lo había tocado. Entonces la mujer, temblando de miedo y sabiendo lo que le había pasado, fue y se arrodilló delante de él, y le contó toda la verdad. Jesús le dijo: —Hija, por tu fe has sido sanada. Vete tranquila y curada ya de tu enfermedad.
Todavía estaba hablando Jesús, cuando llegaron unos de casa del jefe de la sinagoga a decirle al padre de la niña: —Tu hija ha muerto. ¿Para qué molestar más al Maestro?
Pero Jesús, sin hacer caso de ellos, le dijo al jefe de la sinagoga: —No tengas miedo; cree solamente.
Y no dejó que lo acompañaran más que Pedro, Santiago y Juan, el hermano de Santiago. Al llegar a la casa del jefe de la sinagoga y ver el alboroto y la gente que lloraba y gritaba, entró y les dijo: —¿Por qué hacen tanto ruido y lloran de esa manera? La niña no está muerta, sino dormida.
La gente se rió de Jesús, pero él los hizo salir a todos, y tomando al padre, a la madre y a los que lo acompañaban, entró a donde estaba la niña. La tomó de la mano y le dijo: —Talitá, cum (que significa: “Muchacha, a ti te digo, levántate.”)
Al momento, la muchacha, que tenía doce años, se levantó y echó a andar. Y la gente se quedó muy admirada. Pero Jesús ordenó severamente que no se lo contaran a nadie, y luego mandó que dieran de comer a la niña. Palabra del Señor. Gloria a ti Señor Jesús.

13. Oración de los Fieles:
+ Pidamos, hermanos, al Señor que escuche nuestras oraciones, para que podamos alegrarnos al recibir su ayuda, respondiendo: Escúchanos, Señor.
- Por los ministros de la Iglesia que han consagrado su vida al Señor y por todos los pueblos que adoran al Dios verdadero, roguemos a Cristo, el Señor. R.
- Para que el tiempo sea bueno y todos podamos gozar de una naturaleza limpia, roguemos al Dios que con sabiduría gobierna al mundo. R.
- Por los que son víctimas de la debilidad humana, del espíritu de odio o de envidia o de los otros vicios del mundo, roguemos al Redentor misericordioso. R.
- Para que pongamos toda nuestra existencia en las manos del Señor y oremos con confianza al autor y guardián de todo lo que somos y tenemos. R.
+ Dios nuestro, que en tu Hijo, nos has enriquecido con tus bienes, escucha nuestras oraciones y haz que anunciemos el Evangelio. Por Jesucristo.

Oración sobre las Ofrendas
Concédenos, Señor, celebrar dignamente esta Eucaristía por medio de la cual tú te dignas hacernos participes de los frutos de la redención. Por Jesucristo.

21. Oración después de la Comunión
Que el Cuerpo y la Sangre de tu Hijo, que hemos ofrecido en sacrificio y recibido en comunión, sean para nosotros principio de vida nueva, a fin de que, unidos a ti por el amor, demos frutos que permanezcan para siempre. Por Jesucristo.


PERIPLOS DEL OBISPO
Regresar

29 JUNIO – LUNES – SANTOS PEDRO Y PABLO, APÓSTOLES

Hch 12,1-11 / Sal 33 / 2 Tim 4,6-8.17-18 / Mt 16,13-19 – ROJO

Simón, hijo de Jonás y hermano de Andrés, fue el primero entre los discípulos que confesó a Cristo como Hijo de Dios vivo, siendo por ello llamado Pedro. Instituye y rige, hasta su muerte (37-67) la Iglesia de Antioquía. Pablo, apóstol de los gentiles, predicó el Evangelio, a judíos y griegos. Los dos sufrieron el martirio en Roma, en tiempo del emperador Nerón. Pedro, como narra la tradición, fue crucificado cabeza abajo. Pablo fue degollado.
5. Oración Colecta
Dios nuestro, que nos llenas de alegría con la solemnidad de los santos apóstoles Pedro y Pablo, haz que tu Iglesia se mantenga siempre fiel a las enseñanzas de estos Apóstoles, de quienes recibió el primer anuncio de la fe. Por nuestro Señor Jesucristo.

6. Primera Lectura: Hch 12, 1-11
Lectura del libro de los Hechos de los Apóstoles
Por aquel tiempo, el rey Herodes comenzó a perseguir a algunos de la iglesia. Ordenó matar a filo de espada a Santiago, el hermano de Juan; y como vio que esto había agradado a los judíos, hizo arrestar también a Pedro. Esto sucedió en los días de la fiesta en que se come el pan sin levadura. Después de arrestarlo, Herodes metió a Pedro en la cárcel, donde estaba vigilado por cuatro grupos de soldados, de cuatro soldados por grupo. Pensaba presentarlo ante el pueblo después de la Pascua. Así que Pedro estaba en la cárcel, bien vigilado, pero los de la iglesia seguían orando a Dios por él con mucho fervor. La misma noche anterior al día en que Herodes lo iba a presentar ante el pueblo, Pedro estaba durmiendo entre dos soldados, sujeto con dos cadenas, mientras otros soldados estaban en la puerta vigilando la cárcel. De pronto se presentó un ángel del Señor, y la cárcel se llenó de luz. El ángel tocó a Pedro en el costado, lo despertó, y le dijo: “¡Levántate en seguida!” Al instante, las cadenas cayeron de las manos de Pedro, y el ángel le dijo: “Vístete y ponte las sandalias.” Así lo hizo Pedro, y el ángel añadió: “Ponte tu capa y sígueme.”
Pedro salió tras el ángel, sin saber si era realidad o no lo que el ángel hacía. Más bien le parecía que estaba viendo una visión. Pero pasaron la primera guardia, luego la segunda, y cuando llegaron a la puerta de hierro que daba a la calle, la puerta se abrió por sí sola. Salieron, y después de haber caminado una calle, el ángel lo dejó solo.
Pedro comprendió entonces, y dijo: “Ahora veo que verdaderamente el Señor ha enviado a su ángel para librarme de Herodes y de todo lo que los judíos querían hacerme.” Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.

7. Salmo Responsorial: Del salmo 33
R. El Señor me libró de todas mis ansias.
Bendeciré al Señor a todas horas; mis labios siempre lo alabarán. Yo me siento orgulloso del Señor; ¡óiganlo y alégrense, hombres humildes! R.
Alabemos juntos y a una voz la grandeza del nombre del Señor. Recurrí al Señor, y él me contestó, y me libró de todos mis temores. R.
Los que miran al Señor quedan radiantes de alegría y jamás se verán defraudados. Este pobre gritó, y el Señor lo oyó y lo libró de todas sus angustias. R.
El ángel del Señor protege y salva a los que honran al Señor. Prueben, y vean que el Señor es bueno. ¡Feliz el hombre que en él confía! R.

8. Segunda Lectura: 2 Tim 4, 6-8.17-18
Lectura de la segunda carta del Apóstol Pablo a Timoteo
Hermanos: Yo ya estoy para ser ofrecido en sacrificio; ya se acerca la hora de mi muerte. He peleado la buena batalla, he llegado al término de la carrera, me he mantenido fiel. Ahora me espera la corona merecida que el Señor, el Juez justo, me dará en aquel día. Y no me la dará solamente a mí, sino también a todos los que con amor esperan su venida gloriosa. Pues el Señor sí me ayudó y me dio fuerzas, de modo que pude llevar a cabo la predicación del mensaje de salvación y hacer que lo oyeran todos los paganos. Así el Señor me libró de la boca del león, y me librará de todo mal, y me salvará llevándome a su reino celestial. ¡Gloria a él para siempre! Amén. Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.

9. Aleluya.

10. Evangelio: Mt 16, 13-19
+ Lectura del santo Evangelio según san Mateo
Cuando Jesús llegó a la región de Cesarea de Filipo, preguntó a sus discípulos: — ¿Quién dice la gente que es el Hijo del hombre?
Ellos contestaron: —Algunos dicen que Juan el Bautista; otros dicen que Elías, y otros dicen que Jeremías o algún otro profeta.
—Y ustedes, ¿quién dicen que soy? —les preguntó.
Simón Pedro le respondió: —Tú eres el Mesías, el Hijo del Dios viviente.
Entonces Jesús le dijo: —Dichoso tú, Simón, hijo de Jonás, porque esto no lo conociste por medios humanos, sino porque te lo reveló mi Padre que está en el cielo. Y yo te digo que tú eres Pedro, y sobre esta piedra voy a construir mi iglesia; y ni siquiera el poder de la muerte podrá vencerla. Te daré las llaves del reino de los cielos; lo que tú ates aquí en la tierra, también quedará atado en el cielo, y lo que tú desates aquí en la tierra, también quedará desatado en el cielo. Palabra del Señor. Gloria a ti Señor Jesús.

13. Oración de los Fieles
+ Al celebrar a los apóstoles Pedro y Pablo, imploremos la misericordia divina para la Iglesia y pidamos por el mundo entero, diciendo: Escúchanos, Señor.
Para que el obispo de Roma ejerza su ministerio con la sabiduría del Espíritu y con la firmeza de la fe apostólica, roguemos al Señor. R.
Para que Dios, que envió a san Pablo a los paganos, envíe hoy misioneros que proclamen el Evangelio a quienes lo desconocen, roguemos al Señor. R.
Por los ministros de la Iglesia que han consagrado su vida al Señor y por todos los pueblos que adoran al Dios verdadero, roguemos a Cristo, el Señor. R.
Para que quienes nos encontramos hoy reunidos aquí, perseveremos en la doctrina apostólica y anunciemos a Cristo al mundo, roguemos al Señor. R.
+ Protege, Señor, a tu pueblo y, por la intercesión de los apóstoles Pedro y Pablo, concédele los bienes que te ha pedido. Por Jesucristo, nuestro Señor.

Oración sobre las Ofrendas
Acepta, Señor, los dones que te presentamos y, por intercesión de san Pedro y san Pablo, concédenos celebrar este sacrificio íntimamente unidos a ti en la fe y en el amor. Por Jesucristo, nuestro Señor.

21. Oración después de la Comunión
Tú que nos has alimentado con esta Eucaristía, haz, Señor, que la participación perseverante en el memorial de la muerte y resurrección de tu Hijo, y la fidelidad a la doctrina de los Apóstoles nos conserven unidos en tu amor. Por Jesucristo.


PERIPLOS DEL OBISPO
Regresar

30 JUNIO – MARTES – REY ABGAR Y MÁRTIRES DE LA IGLESIA SIRIA

Ap 12:10-12 / Sal 34 / Luc 9:23-26 – ROJO

El cristianismo se estableció en Edesa, en tiempo de los Apóstoles según la Doctrina de Addai, y de la Historia Eclesiástica de Eusebio. Eusebio dice que visitó los archivos de Edesa y examinó la correspondencia entre el rey de la ciudad, Abgar Ukomo y el mismo Jesús. La Iglesia Madre celebra esta fiestaa el miércoles en la mitad de la Cuaresma. La historia cuenta que uno de los setenta y dos discípulos fue enviado al rey Abgar, con un lienzo con el rostro de Jesús y que él se sanó y se convirtió al cristianismo. Abgar, habría sido el primer rey cristiano, y Edesa, el primer reino cristiano. El mismo día se recuerda a todos los mártires de la Santa Iglesia Siria.

5. Oración Colecta
Te pedimos, Señor, que nos concedas imitar la constancia en la fe del santo rey Abgar y de todos los mártires de la Santa Iglesia Siro-Ortodoxa, cuyo martirio recordamos cada año llenos de veneración. Por nuestro Señor Jesucristo.

6. Primera Lectura: Ap 12:10-12
Lectura del libro del Apocalipsis del Apóstol Juan
Oí una fuerte voz en el cielo, que decía: “Ya llegó la salvación, el poder y el reino de nuestro Dios, y la autoridad de su Mesías; porque ha sido expulsado el acusador de nuestros hermanos, el que día y noche los acusaba delante de nuestro Dios. Nuestros hermanos lo han vencido con la sangre derramada del Cordero y con el mensaje que ellos proclamaron; no tuvieron miedo de perder la vida, sino que estuvieron dispuestos a morir. ¡Alégrense, pues, cielos, y ustedes que viven en ellos! Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
7. Salmo Responsorial: Del Salmo 34
R. El ángel del Señor protege y salva a los que honran al Señor.
Yo me siento orgulloso del Señor; ¡óiganlo y alégrense, hombres humildes! Alabemos juntos y a una voz la grandeza del nombre del Señor. R.
Recurrí al Señor, y él me contestó, y me libró de todos mis temores. Los que miran al Señor quedan radiantes de alegría y jamás se verán defraudados. R.
Prueben, y vean que el Señor es bueno. ¡Feliz el hombre que en él confía! Honren al Señor, los consagrados a él, pues nada faltará a los que lo honran. R.

9. Aleluya.

10. Evangelio: Luc 9:23-26
† Lectura del Evangelio según san Lucas
Jesús les dijo a todos:—Si alguno quiere ser discípulo mío, olvídese de sí mismo, cargue con su cruz cada día y sígame. Porque el que quiera salvar su vida, la perderá; pero el que pierda la vida por causa mía, la salvará ¿De qué le sirve al hombre ganar el mundo entero, si se pierde o se destruye a sí mismo? Pues si alguno se avergüenza de mí y de mi mensaje, también el Hijo del hombre se avergonzará de él cuando venga con su gloria y con la gloria de su Padre y de los santos ángeles. Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.

Oración sobre las Ofrendas
Recibe, Padre santo, las ofrendas que te presentamos en honor de san Abgar y de todos los mártires de la Santa Iglesia Siro-Ortodoxa y concédenos permanecer firmes en la confesión de tu nombre. Por Jesucristo, nuestro Señor.

21. Oración después de la Comunión
Señor, ya que nos has alimentado con el Cuerpo de Cristo, por la intercesión de san Abgar y de los mártires de la Santa Iglesia Siro-Ortodoxa, concédenos la gracia de seguirte con fidelidad en la Iglesia, para la salvación de todos. Por Jesucristo.


Regresar