El sábado 2 de abril por la mañana, Mor Santiago Eduardo llegó hasta la comunidad de Monrovia, en el Municipio de San Juan Ostuncalco, Quetzaltenango.

Esta comunidad acaba de terminar la construcción de su templo. Sin embargo con ocasión de la visita únicamente se celebró la Liturgia de Acción de Gracias por todos los hermanos que han colaborado para la construcción del templo. La mayoría de estos están trabajando en los Estados Unidos. La apertura y bendición del templo se tiene planificada para finales del mes de mayo.

Esta situación hizo que la Santa Misa se celebrara en la pequeña casa de oración que tienen los hermanos en el área contigüa al nuevo templo.

El Arzobispo recordó la gran misión que tienen los hermanos ya que, hasta el momentos ellos constituyen la única presencia estable y organizada de la Iglesia en el Departamento de Quetzaltenango.

El sábado 2, después del medio día, Mor Santiago Eduardo llegó hasta la comunidad de Cuyotenango, en el Departamente de Suchitepéquez.

En la celebración además de los hermanos de la comunidad, se contó con la presencia de algunos hermanos de las comunidades de Pajales dos y de San Isidro.

Se administraron los sacramentos de la iniciación cristiana a tres niños, hijos de una familia que recientemente se ha convertido. También hicieron la comunión solemne tres niñas.

Durante la homilía el arzobispo felicitó a los hermanos por su entusiasmo y compromiso y les exhortó a seguir trabajando incansablemente en el trabajo misionero.

Los representantes de Pajales dos informaron al Arzobispo que están haciendo las gestiones para adquirir un terreno en el que puedan construir un templo.

El dos, al caer el día, el Arzobispo llegó hasta la comunidad de Nahualate, del Municipio de Chicacao, Suchitepéquez.

Con la celebración de la Santa Misa dio inicio una vigilia de oración que hicieron los hermanos. Ellos habitualmente cada pocas semanas hacen este tipo de celebraciones y todos los lunes hacen oraciones y ayunos, para sintonizar intensamente con la vida en el Espíritu Santo y para fundamentar mejor su fe.

El Arzobispo felicitó a los hermanos por su compromiso. Animó especialmente al hermano Francisco Aguilar, líder de la comunidad, así como al misionero Julián Bal quien es el que, como representante de la Arquidiócesis ha estado acompañando a estas comunidades de la Costa Sur y Quetzaltenango.

Los hermanos tienen planes para ampliar su casa de oración, pues el tamaño actual no se da abasto para recibir a los numerosos hermanos que participan, especialmente cuando hay celebraciones de especial solemnidad y relieve.

El domingo tres por la mañana, Mor Santiago Eduardo presidió la celebración de la Divina Liturgia con los hermanos de la comunidad de Los Guates, del municipio de San Juan Sacatepéquez, Guatemala.

Los hermanos a pesar de sus limitaciones económicas y de su pobreza, lograron comprar un amplio terreno y ahora que lo terminaron de pagar, con ocasión de la fiesta del aniversario de la comunidad, hicieron las ceremonias de colocación de la primera piedra.

El Alcalde de San Juan Sacatepéquez participó devotamente en la celebración y al final de la misma, junto al Arzobispo, tuvieron a cargo la colocación de la primera piedra.

El Arzobispo en la homilía recordó la identidad particular de nuestra Iglesia y animó a los hermanos a seguir trabajando con fe para que sea cumplida la misión de anunciar el Evangelio a todas las personas y en todos los lugares, que nos ha sido confiada por el Señor.

El domingo 3 por la tarde, el Arzobispo llegó a hacer una visita a la Comunidad de Las Palmas, del municipio de San Juan Sacatepéquez, Guatemala.

Los hermanos compartieron con el Arzobispo la alegría que viven, pues han logrado superar una serie de dificultades que afrontaron el año pasado y ahora están viviendo en un período de armonía y tranquilidad que también les ha permitido ganar a varias familias que, recientemente se han incorporado a la Iglesia.

El Arzobispo exhortó a los hermanos a valorar en su profundidad la gracia que significa ser parte de la Iglesia Madre de todas las Iglesia, a la que pertenecieron los doce apóstoles.

Los hermanos, por su parte, compartieron con el Arzobispo cuáles son los métodos a través de los cuales están empeñados en el cumplimiento de la misión que tiene la Iglesia.

La comunidad de Las Palmas cuenta con un templo que está terminado en la fase inicial y al que le falta únicamente terminar algunos aspectos ornamentales.

El sábado 09 por la tarde, Mor Santiago Eduardo se reunión con el Consejo de la Comunidad El Pescador, de la Parroquia de San Miguel Arcángel, Los Ángeles, California.

La razón de la reunión fue clarificar la forma de organización de la comunidad y su inclusión y participación dentro de las diferentes actividades de la Parroquia.

El Arzobispo subrayó que, de acuerdo con los Estatutos de la Arquidiócesis, cada comunidad que forma una parroquia, está llamada a organizarse de tal manera que pueda proveer a sus miembros todos los servicios propios de una parroquia, como son la formación para la recepción de los Sacramentos y la vida espiritual y de crecimiento de los miembros.

Sin embargo enfatizó que, aunque no es una obligación participar en las actividades comunes que se puedan emprender a nivel de parroquia, sí es indispensable que un delegado participe en las reuniones de Consejo Pastoral de la parroquia y que se mantenga siempre dispuestos a considerar las formas de participar más activamente en la vida de la parroquia, así como a buscar las formas de garantizar la vida y el crecimiento sacramental de todos los miembros de la comunidad.

Los hermanos se mostraron muy complacidos y agradecidos por la reunión y se comprometieron a intensificar su trabajo para el crecimiento de la comunidad y su mejor integración.

El 9, al caer el día, Mor Santiago Eduardo visitó la sede central de la Parroquia de San Miguel Arcángel en Los Ángeles, California, para presidir la celebración de la Santa Misa.

El Arzobispo felicitó a los hermanos por la hermosa forma en que se arregló el sencillo templo con ocasión de la fiesta de la Resurrección del Señor.

También agradeció al Padre Carlos Reyes todos los esfuerzos que hace para animar a la comunidad cristiana y el impulsó a seguir adelante emprendiendo abundantes iniciativas, que permitan el crecimiento de la comunidad.

Durante la homilía, subrayó que la fe en la resurrección tiene que implicar el dejar que el Señor aborde la barca de la vida personal, familiar y comunitaria, para permitir que, en medio de las tormentas que se afrontan cada día, sea Él quien orienta y quien nos dirige hasta el puerto de la fidelidad al Señor.

El domingo 10 por la manaña, el Arzobispo presidió la celebración de la Divina Liturgia para los servidores y líderes de la parroquia de San Miguel Arcángel.

Durante la homilía el Arzobispo hizo énfasis en la importancia de dejar que el Señor sea quien va dirigiendo la vida y las iniciativas personales, familiares y comunitarias, para lograr tener el éxito que el quiere para cada quien y para toda su santa, iglesia, como sucedió con la pesca milagrosa de los apóstoles.

Además hizo énfasis en que la misión que el Señor nos confía requiere de la entrega total, del reconocimiento radical de las propias limitaciones y de la confianza absoluta en el Señor, a ejemplo de la actitud que el Señor requirió al Apóstol Pedro, para ser signo de comunión y confirmar a los hermanos en la fe.

Los hermanos expresar su alegría por la participación litúrgica, así como su disponibilidad a participar con mayor entusiasmo en todos los aspectos referentes al cumplimiento de la misión que el Señor nos ha confiado.

Desde media mañana y hasta pasado el medio día del domingo, el arzobispo impartió formación a los servidores de la Parroquia de San Miguel Arcángel, Los Ángeles.

Se profundizó sobre varios temas de interés que apoyen la organización y el crecimiento de las comunidades y de la vida de cada uno de sus miembros.

Se explicó que el sentido de "pecador" no coincide con el concepto popular que se maneja sino implica el reconocer la total limitación y desvalimiento, para ser llenados con la fuerza del Espíritu Santo. Se subrayó que es indispensable que cada miembro de la comunidad y, particularmente los servidores, crezcan en esta conciencia, para dejarse llenar del Espíritu Santo y ejercer el ministerio con la actitud adecuada.

También se habló acerca de la urgencia y características de la pastoral infantil que, debe necesariamente implicar el encuentro de cada niño con el mismo Señor. Se habló de la responsabilidad que tienen padres, catequistas y ministros ordenador dentro de este proceso y se animó a asumir las iniciativas necesarias para cumplir esta misión.

También se habló acerca de las características que debe revestir la pastoral juvenil y de los objetivos a alcanzar, lo cual contrasta drásticamente con una serie de aspectos muy comunes en la vida de las comunidades.

El ambiente de la formación fue muy participativo y ahora queda el reto de tratar de plasmar en la vida concreta las diferentes cuestiones que se abordaron.

El domingo 10 por la tarde, el Arzobispo presidió la celebración de la Santa Misa con los hermanos de la Comunidad de Adoradores de Cristo Rey, en el centro de Los Ángeles, California.

Los hermanos están terminando la ampliación del local en donde se encuentra la comunidad. Han alquilado el local contiguo a donde se encontraban y ahora están terminando la remodelación.

Además han emprendido un hermoso ministerio para los jóvenes, especialmente orientado a todos los hermanos solteros que se encuentran sin familia en Los Ángeles. Se trata de una iniciativa muy positiva y se determinó que para la próxima visita se hará una oración especial, se les impartirá la bendición y se les animará a comprometerse activamente en la vida de la comunidad.

También están desarrollando un hermoso ministerio con los niños, los cuales, progresivamente, están participando muy activamente en la vida de la comunidad.

El Arzobispo felicitó a los hermanos por todo el trabajo que están relaizando y les animó a seguir adelante con el mismo entusiasmo con el que lo han hecho hasta el momento.

El Padre Carlos Reyes, párroco local acompañó al Arzobispo en la celebración.

El doce de abril, Mor Santiago Eduardo, acompañado de la hermana Hatune Dogan, representante de la Fundación Hatune de Alemania, visitó la catedral de San Juan Bautista en San Juan Comalapa, Chimaltenango.

Dentro de la visita se realizó un encuentro con las Visitadoras de Enfermos. Éstas compatieron cuáles son las actividades que realizan, así como las necesidades que tienen, para poder cumplir a cabalidad su misión. Se trata de urgencia de una clínica así como de alimentos para compartir con los más necesitados.

También se tuvo un encuentro con la Confradía y una visita a la Iglesia Colonia, expresando la limitación radical que se tiene para poder concluir con la reconstrucción, así como la esperanza que se alberga que cuando el Patriarca venga, pueda hacer la consagración de ese templo.

El martes 12 por la tarde, el Arzobispo acompañado de la Hermana Hatune, realizó la primera visita de conocimiento a la comunidad de San José Xepatán, Patzún.

Los hermanos, animados por el Padre Byron Coyote expresaron las profundas necesidades que afrontan, al no contar con un templo y experimentar un constante crecimiento.

Se animó a los hermanos a conseguir los fondos para adquirir un predio en donde se pueda construir la Iglesia y a comprometerse a aportar la mano de obra, así como a presentar un proyecto para tocar puertas en otros lugares.

El miércoles 13, Mor Santiago Eduardo llegó hasta el centro María Auxiliadora, en la Ciénega, San Raymundo, acompñado por la Hermana Hatune Dogan, para presentar los proyectos que se tienen en este lugar.

Se cuenta con una casa grande que, con la ayuda de Dios en el futuro será la sede de la Cancillería de la Arquidiócesis de Centro América.

También se cuenta con dos edificios destinados para poder iniciar sendas congregaciones una femenina y otra masculina, orientadas a la oración y al testimonio misionero.

Además se están dando los pasos para la construcción del Seminario Siro-Ortodoxo, en el que estará dedicada una parte como lugar para enterrar a los obispos y presbíteros de la Arquidiócesis.

La hermana Hatune expresó su profundo deseo de apoyar especialmente el proyecto de la Congregación femenina que, según su sugerencia podría llamarse Siervas de Cristo.

El miércoles 13 por la tarde se visitó la comunidad de Los Guates, ubicada en San Juan Sacatepéquez, Guatemala.

Los hermanos recibieron al Arzobispo y a la hermana Hatune con gran alegría.

Luego presentaron el proyecto que tienen de construcción del Templo Parroquial en el terreno que recientemente han terminado de pagar y en el que pocos días antes, el Arzobispo colocó la primera piedra.

Finalmente se hizo una visita al terreno en donde se construirá el templo.

La hermana Hatune ofreció a los hermanos tocar puertas, para encontrar algún camino de apoyo al proyecto que tienen los hermanos.

El jueves 14, por la mañana, el Arzobispo presidió la celebración de la Divina Liturgia y luego la bendición de la primera piedra en el predio en que se construirá el templo parroquial de la Parroquia de Jesús, Buen Pastor, Cojaj, San Pedro Carchá, Alta Verapaz.

Se celebró también un encuentro entre el Consejo Parroquial y la hermana Hatune, en el que los hermanos le presentaron el proyecto de construcción del templo que tienen y le suplicaron que presentara su proyecto ante instituciones que les puedan tender la mano.

La Hermana ofreció tratar de ser como un puente entre ellos y la Fundación Hatune, para buscar la forma de apoyarles de alguna manera.

El jueves 14, después del medio día, el Arzobispo, acompañado de la Hermana Hatune y de los Padre Ángel Cáseres y Fredy González, visitaron el Centro Pastoral de Chitania, San Pedro Carchá, Alta Verapaz.

Los hermanos hicieron un breve historial del trayecto que han seguido hasta llegar al punto de construcción que tiene el templo actualmente y suplicaron a la Hermana Hatune, apoyarles en la terminación del proyecto.

La hermana ofreció que si ellos presentaban un proyecto con los requerimientos establecidos, ella estaría dispuesta a tocar puertas para buscar ayuda.

Al caer del día 14, el Arzonispo visitó la comunidad de Benpec, Tactic, Alta Verapaz, acompañado de la hermana Hatune y de los Padres Ángel y Fredy.

En esa ocasión se hizo la bendición de la primera piedra del futuro templo que los hermanos aceptaron, a sugerencia de la Hermana Hatune, esté dedicado a Santiago Baradeo.

Los hermanos también hicieron la presentación del proyecto de construcción que tienen y pidieron a la hermana que en nombre de ellos toque puertas, en busca de ayuda.

El 15 por la mañana, después de visitar la Parroquia de la Santísima Trinidad de Uspantán, El Quiché, en donde el Padre Óscar Guardado invitó a desayunar a los comensales, el arzobispo, acompañado de la Hermana Hatune, visitaron el Centro Pastoral de Santa María Cunén, El Quiché.

Numerosos niños y hermanos, animados por el Padre Bernabé Nieto habían preparado una recepción muy entusiasta.

Después en el terraplén en el que será construido el templo parroquial, numerosos hermanos provenientes de diferentes comunidades, bajo la guía del consejo pastoral, hicieron la presentación del proyecto de construcción del templo parroquial que tienen.

Solicitaron a la Hermana Hatune que presente en nombre ellos el proyecto en diferentes instituciones, para poder llegar a realizar sus ilusiones.

La hermana aceptó la petición de los hermanos, indicándoles que, sin embargo, es indispensable que hagan una presentación formal del proyecto que ha elaborado.

El 15 por la tarde Mor Santiago Eduardo llegó hasta la comundiad de Pajomel, Santa Cruz la Laguna, Sololá, para presidir la celebración de la Santa Misa.

La participación de hermanos fue nutrida y todos manifestaron su alegría.

La Hermana Hatune cantó varios cantos en arameo durante la liturgia, lo cual agradó mucho a los hermanos.

El arzobispo animó a los hermanos a intensificar su compromiso misionero y a trabajar con mayor dedicación en el crecimiento de la Iglesia viva.

Al caer del día 15, El Arzobispo llegó hasta la comunidad de Chuitzanchaj, para presidir la celebración de la Santa Misa.

La misma fue dedicada especialmente a dar gracias a Dios por el nuevo tabernáculo que el grupo de mujeres de la comunidad compró y donó a la Iglesia. Se trata de un trabajo hermoso y fino como puede apreciarse en las fotos.

Durante la homilía el Arzobispo animó a los hermanos a que, en el espíritu de la Pascua se comprometan con todas las fuerzas en el trabajo misionero.

Al final de la celebración, se hizo una oración sobre las hermanas que trabajaron para la adquisición del nuevo Tabernáculo.

El ´sabado 16 por la mañana, Mor Santiago Eduardo presidió la celebración de la Divina Liturgia en la comunida de Xenaxicul, Aguacatán, huehuetenango, para celebrar el 23 anuversario de la comunidad.

Dentro del marco de la celebración se administraron los sacramentos de la iniciación cristiana a 7 niños.

El Arzobispo felicitó a los hermanos y les animó a comprometerse más activamente en el trabajo misionero a nivel de todo el Municipio para que la presencia de la Iglesia se estabilice.

Los hermanos manifestaron su alegría y gratitud por el trabajo que se está realizando con ellos y por la vida de la comunidad y de todos sus miembros.

El sábado por la tarde Mor Santiago Eduardo llegó hasta la comunidad de Tziminas, en la cima de los Cuchumatanes, del Municipio de San Sebastián Huehuetenango.

Los hermanos estaban celebrando el 31 aniversario de la comunidad.

Se administraron los sacramentos de la iniciación cristiana a 6 niños.

Durante la homilía el Arzobispo animó a los hermanos a mostrar su vida en el espíritu a través del amor y unidad que tiene que caracterizar la vida de la comunidad, así como a través de su compromiso misionero.

Los hermanos presentes, algunos de los cuales provenían de otras comunidades vecinas, expresaron su prontitud y disponibilidad a acoger la invitación del arzobispo.

El domingo 17 por la mañana, en el templo de la comunidad de Chicol, Santa Bárbara, se llevó a cabo la formación para servidores del Centro Pastoral de Santa Bárbara.

Los hermanos participaron en buen número.

El Arzobispo habló acerca de la urgencia de comprometerse más activamente en el trabajo misionero, para superar el cierto estancamiento que viven algunas comunidades.

Los hermanos expresaron su disponibilidad a trabajar así como compartieron algunas de las actividades que están realizando para impulsar la misión.

El 17 por la tarde, Mor Santiago Eduardo presidió la celebración del cuarto aniversario de la comunidad de Tojchiquel, del Municipio de Santa Bárbara, Huehuetenango.

Dentro de la celebración se administraron los sacramentos de la iniciación cristiana a siete niños, algunos de los cuales pertenecientes a familias que recientemente se han integrado a la iglesia.

El Arzobispo animó a los hermanos a hacer esfuerzos para poder construir un templo estable, a lo cual los hermanos respondieron expresando la decisión que tienen de concretizar esa esperanza.

El Lunes 18 por la mañana, el Arzobispo, acompañado de la hermana Hatune y del Padre José Alfredo Hernández, párroco local, llegó hasta la comunidad de K'anquintik', Nentón, Huehuetenango.

Después de haber sido recibidos, se celebró un encuentro entre los visitantes y los miembros de la comunidad que compartieron la urgente necesidad que tienen de construir una casa de oración, pues fueron despojados de la que tenían, por la fe que profesan.

Los hermanos asumieron el compromiso de buscar un terreno para la construcción y de aportar la mano de obra así como algunos materiales, pero pidieron que trate de buscar la forma de apoyarlos.

Después de la reunión, el Arzobispo presidió la celebración de la Divina Liturgia, en la que participaron devotamente los hermanos que forman la comunidad.

Ante la petición de los dirigentes de la comunidad de Subajasún, Nentón, Huehuetenango, fuera del programa que se tenía preparado, el Arzobispo, acompañado por la Hermana Hatune, visitaron la comunidad de Subajasún, para conocer el terreno en el que están iniciando la construcción de su templo.

Los hermanos a pesar de la evidente extrema pobreza en la que viven, donaron un lote de terreno y han sido capaces de juntar algo de material para iniciar la construcción.

Con ocasión de la visita, se hizo la bendición del material y de los primeros trabajos que se están realizando.

El panorama del compromiso de los hermanos, junto a su extrema pobreza, realmente son conmovedores, pues demuestran la profundidad de su fe.

El lunes 18 por la tarde, Mor Santiago Eduardo,a compañado de la hermana Hatune, visitaron a los hermanos de la comunidad de Chanquejelbé de Nentón, Huehuetenango.

Los hermanos de esta comunidad, también perdieron el templo en el que la comunidad se reunía, al querer ser forzados a congregarse en la Iglesia Católica Romana. Prefirieron perder el lugar de reuniones, con tal de conversar la fe a la que el Señor les ha llevado y que les asegura ser la fe Católica Apostólica Primitiva, acorde al testimonio del Espíritu Santo y de cuanto los Apóstoles profesaron y enseñaron.

Ellos tienen ahora el proyecto de realizar la construcción de un templo en un predio que esperan poder adquirir pronto y solicitaron que se les apoye de alguna manera para poder realizar el proyecto que tienen que, de acuerdo a su testimonio, corresponde a los que el Señor les ha inspirado y revelado.

Desde que la comunidad perdió el lugar de reunión, no solo no se ha perdido ninguno de los miembros, excepto quienes les expulsaron, sino han ingresaro dos familias, lo que significa unos 20 miembros nuevos.

El jueves 21, Mor Santiago Eduardo visitó a los hermanos de la comunidad Unción del Espíritu Santo, de Santiago Atitlán, Sololá.

Dentro del marco de la celebración de la Santa Misa, el Arzobispo animó a los hermanos a asumir con seriedad el compromiso de la evangelización.

Los hermanos, a pesar del clima y de ser día entre semana, acuedieron en buen número a la celebración y muchos de los participantes recibieron el Sacramento de la Penitencia y luego participaron en la comunión.

El Arzobispo también visitó la hermosa área verde que tienen los hermanos en la parte posterior de donde se encuentra el templo.

El 21 por la noche, Mor Santiago Eduardo, llegó hasta la comunidad de Nuevo Pentecostés, de Santiago Atitlán, Sololá.

Los hermanos participaron en buen número y agradecieron la visita.

Durante la homilía el Arzobispo enfatizó la importancia de vivir el misterio de la Resurrección del Señor como una realidad personal que, a través de la vida sacramental, se hace eficaz en la vida del creyente.

El viernes 22 por la mañana, se celebró el Decanato del Occidente de Huehuetenango, en la sede de la Parroquia Inspiración del Espíritu Santo de Cuilco, Huehuetenango.

Fue notable la numerosa participación de hermanos en la reunión.

Tanto los hermanos como el párroco, padre Pedro Martínez, informaron acerca de las diferentes actividades que se realizan en el contexto del Año del Impulso Misionero.

Se nota el gran entusiasmo con el que los hermanos se están involucrando en este proceso. Se espera que fortalezca el proceso de conversiones que ha tenido la Arquidiócesis desde sus comienzos.

El viernes 22, el Arzobispo acompañado por el Padre Pedro Martínez, llegó hasta la comunidad de La Rinconada, en el Municipio de Amatenango de chiapas, México.

Los hermanos estaban celebrando un aniversario más de la comunidad. El arzobispo les felicitó por tan ocasión y además porque gracias al apoyo y documentación que ellos enviaron, se ha logrado que en la República de México, nuestra Iglesia sea reconocida como Asociación Religiosa.

Dentro del marco de la celebración, 4 niños recibieron los sacramentos de la iniciación cristiana y otro grupo de hermanos fueron confirmados y recibieron el envío misionero.

El Arzobispo animó a los hermanos a seguir trabajando aún con mayor entusiasmo en la Evangelización de quienes aún no han renovado su vida.

El sábado 23 por la mañana, se celebró la Asamblea Decanato del Sur de Huehuetenango, en el Centro de Formación Ministerial, de Jumaj, Huehuetenango.

Los hermanos participaron en gran número, aunque muchos no pudieron llegar, pues en esta época, muchas comunidades celebran los aniversarios.

El arzobispo dio los lineamientos por los que se debe trabajar dentro del contexto de impulso misionero que hemos emprendido. Los hermanos manifestaron su agrado por la formación y, de diferentes maneras, expresaron su prontitud a comprometerse en el trabajo misionero en sus comunidades, así como a la fundación de nuevas comunidades.

El 23, después del medio día, el arzobispo presidió la divina liturgia de acción de gracias, con los hermanos que se reúnen en el Centro de Formación Ministeria de Jumaj.

Los hermanos, en su gran mayoría provenientes de Santa Eulalia, han formado una bonita comunidad, dedicada especialmente a la oración y al testimonio.

El arzobispo animó a los hermanos a perseverar en su entrega y les instó a intensificar el testimonio misionero, pues la ciudad de Huehuetenango no cuenta con una presencia significativa de nuestra Iglesia.

El 23 por la tarde, el Arzobispo visitó la comunidad de El Rodeo, Malacatancito.

Los hermanos expresaron su alegría porque, a pesar de los desafíos y complicaciones, han experimentado un verdadero crecimiento en diferentes lugares.

Actualmente la comunidad tiene el proyecto de la construcción de un templo estable.

El arzobispo animó a los hermanos a seguir profundizando en la fe y en la identidad de la Iglesia y a trabajar con intensidad también en el testimonio misionero.

El 24 por la mañana, el arzobispo visitó la comunidad central de Todos Santos Cuchumatanes.

Con ocasión de la visita se administraron los sacramentos de la iniciación cristiana a dos niños.

Durante la homilía el Arzobispo animó a los hermanos a intensificar la experiencia de presencia y comunión con el Señor resucitado, para poder vivir más profundamente la fe y dar testimonio misionero.

Al final el Arzobispo dialogó por algún tiempo con los hermanos, acerca del futuro de la comunidad que puede o integrarse dentro de la Parroquia de Chiantla o puede intensificar su organización, comprometerse en la construcción de un templo estable y en la creación de nuevas comunidades, para convertirse eventualmente en Centro Pastoral y luego en Parroquia.

Ha cia el medio día del domingo 24. Mor Santiago Eduardo presidió la celebración de la Divina Liturgia en la comunidad de El Arenal, San Gaspar Ixchil, Huehuetenango.

Con ocasión de la visita, además de celebrar la Divina Liturgia, fue conferida la confirmación y el envío misionero a un grupo de hermanos que previamente habían sido debidamente preparados.

El arzobispo exhortó a los hermanos a profundizar, a través de la vida sacramental, en la experiencia del Señor resucitado en sus vidas, para poder comprometerse eficazmente en el trabajo misionero.

Después del medio día, el arzobispo tuvo una reunión de formación con los hermanos miembros del Consejo Pastoral del Centro Pastoral de San Ignacio de Antioquía.

Dentro de la reunión se clarificaron punto acerca de futuro del Centro, como está la cuestión de los folios de Registro sacramental, de la unificación de los registros y del esfuerzo para que, a adherirse más comunidades, se pueda elevar el Centro Pastoral a Parroquia.

Los hermanos participaron activamente y, al parecer, quedaron satisfechos con las conclusiones y compromisos a los que se llegó como conclusión de la formación y del dálogo.

El lunes 25 por la mañana, se celebró, en el Centro de Formación Ministerial de Jumaj, Huehuetenango, la reunión del presbiterio de la Vicaría de Huehuetenango.

Se contó con la presencia de los 13 presbíteros que están ejerciendo el ministerio en esta Vicaría.

Se comenzó haciendo una evaluación de la marcha de iniciativas del Año del Impulso Misionero.

En general se nota que hay entusiasmo y participación. El Arzobispo animó a seguir con el mismo entusiasmo, para cumplir la misión que el Señor nos ha confiado, a cabalidad.

Se habló también de la importancia de contratar un seguro médico para asistir a los Presbíteros de la Arquidiócesis de Centro América. 11 de los presbíteros manifestaron su decisión de incorporarse al proyecto.

El Arzobispo también impartió formación sobre diferentes temas litúrgicos y sobre uno de los elementos específicos y característicos de nuestra Iglesia, como es la experiencia de la cercanía de la presencia del Señor en medio de nosotros, que, para los apóstoles fue física, pero desde la resurrección se ha perpetuado a través de la presencia sacramental.

La reunión de la vicaría de Huehuetenango culminó con la celebración de la Divina Litrúrgia, presidida por el Arzobispo.

El Arzobispo recordó a los persbíteros que la esencia de nuestra Iglesia la constituye la experiencia de la presencia real y viva de Jesucristo en medio de todos, como sucedió con los Apóstoles, por medio del sacramento de la comunión con el Cuerpo y la Sangre del Señor resucitado.

Se administró a inicio de la celebración, el sacramento de la Penitencia. para todos los sacerdote y se renovó el compromiso de trabajar incansablemente para el cumplimiento de la misión que el Señor nos ha confiado.

El martes 26, en San Bartolomé Milpas Altas, se celebró la reunión de la Vicaría del Centro de Guatemala.

Se evaluó la marcha del año del impulso misionero, el cual en todas partes se está realizando con empeño y con entusiasmo.

También se habló acerca del seguro médico.

Se planificó también que los días 11 y 12 de Noviembre, se tendrá la Asamblea de Vicaría, para lo cual cada uno de los presbíteros se comprometió a organizar la participación de delegados de su área de trabajo, así como a tratar de determinar cuál será la temática que se aborde.

La próxima reunión se celebrará el 24 de mayo.

Aunque nosotros estamos ya celebrando la quinta semana de pascua, la Iglesia del Medio Oriente y Europa, que se rige por el Calendario Juliano, apenas esta semana está celebrando la Semana Santa.

Con ocasión de tal acontecimiento, Su Santidad el Patriarca ha enviado un mensaje de bendición a la Arquidiócesis, que compartimos enseguida.