El miércoles 16 de agosto, en el seminario Santa María del Nuevo Exodo de San Lucas Sacatepéquez, los epesistas Alexander Mendoza y Julio César Carranza, hicieron la presentación del ensayo de eclesiología, para terminar la primera parte del período de preparación pastoral a la ordenación ministerial.

Durante cierto tiempo, hicieron la presentación de las conclusiones a las que llegaron y seguidamente respondieron a algunos planteamientos que les fueron propuestos.

El arzobispo al final hizo una evaluación del trabajo que se hizo y enfatizó en la importancia de profundizar en el sentido de la identidad teológica e histórica de nuestra Iglesia, así como de su riqueza espiritual, para poder realizar la proyección misionera de manera sostenida y eficaz.

En la Divina Liturgia solemne del 16 de agosto, en el seminario Santa María del Nuevo Éxodo de San Lucas Sacatepéquez, mor Santiago Eduardo ordenó como sub-diáconos a los seminaristas Alexander Mendoza y Julio César Carranza.

Ellos han estado ejerciendo la práctica pastoral en el área del sur de Alta Verapaz, cubriendo partes de los municipios de Cobán, San Pedro carcha, Senahú, La Tinta y otras áreas.

Durante la visita pastoral que hizo el arzobispo al área, los hermanos le hicieron la solicitud formal de que se procediera a la ordenación de los candidatos.

Durante la homilía el arzobispo hizo énfasis en que la relación personal con el Señor es lo que constituye la base de toda la vida ministerial, es el secreto de su fecundidad y la posibilidad de que se convierta en auténtico camino de realización.

El 17 por la tarde, el arzobispo visitó la comunidad de Chuitzanchaj, ubicada en el Municipio de Santa Cruz la Laguna, del departamento de Sololá.

Con ocasión de la visita se administraron los sacramentos de la iniciación cristiana a una niña.

Además se administró el sacramento de la reconciliación a quienes lo necesitaron y se celebró la Liturgia.

Durante la homilía el arzobispo animó a los hermanos a llevar una vida de fe comprometida y a tratar de hacer más eficaz el testimonio misionero.

Al caer del día 17, Mor Santiago Eduardo llegó hasta la comunidad de Pajomel, del Municipio de Santa Cruz la Laguna del departamento de Sololá.

Fue celebrada la misa y se administró el sacramento de la reconciliación.

Durante la homilía el arzobispo recordó a los hermanos que es fundamental vivir en la continua escucha de la Palabra que el Dios vivo dirige a cada creyente, para poder ser eficaz en la vida y el testimonio cristianos.

El viernes 18, con la participación de más de 80 delegados de las diferentes comunidades, se celebró el Decanato del Occidente de Huehuetenango en la sede parroquial de Cuilco.

Estuvo participando también el párroco local, Padre Ángel Cáseres.

Después de la formación, los hermanos informaron acerca de las diferentes iniciativas que se están realizando, tanto a nivel de sectores, comunidades y parroquia.

Para gloria de Dios, los hermanos están creciendo, tienen nuevos proyectos de testimonio y crecimiento misionero y se encuentran muy contentos de la forma en que están viviendo.

El arzobispo les animó a seguir adelante con actitud de compromiso y perseverancia.

El viernes 18 por la tarde, el aarzobispo visitó la comunidad de La Rinconada, del Municipio de Nueva Amatenango, del Estado de Chiapas. México.

Además de los fieles locales, participaron hermanos de algunas de las comunidades de Guatemala que hacen parte del sector uno de la parroquia de Cuilco.

Dentro de la celebración se administró la confirmación y el envío misionero a varios hermanos.

El arzobispo animó a los hermanos a intensificar el compromiso y la proyección misionera, para poder cumplir la misión que el Señor nos ha confiado con fidelidad.

El sábado 19, con una numerosa participación de delegados de las diferentes parroquias, centros pastorales, capellanías y comunidades, se celebró el decanato-asamblea en el Centro de Formación de Huehuetenango.

Participaron en la reunión los presbíteros Pedro Martínez, Yaider Jiménez, José Raúl López y José Manuel Castro, que atienden pastoralmente comunidades de esta zona del sur de Huehuetenango.

Después de la formación impartida por el arzobispo, los hermanos hicieron la presentación de la situación de las áreas que representan.

En general se nota bastante dinamismo, hay cierto crecimiento en la mayoría de los lugares y hay entusiasmo para seguir trabajando en el cumplimiento de la misión que el Señor nos ha confiado.

Después del medio día del sábado 19, el arzobispo se reunió con el consejo pastoral del Centro Pastoral de San Pedro Nectá de Huehuetenango.

Estuvieron presentes, además de los miembros del consejo, el Padre yaider Jiménez, encargado pastoral del Centro y quien había solicitado al arzobispo la reunión.

Se habló de asuntos organizativos y pastorales y, como conclusión se llegó a ciertos acuerdos pastorales, para garantizar el mejor funcionamiento y el crecimiento del centro pastoral.

El 19 por la noche, como inicio de una vigilia, el arzobispo visitó a la comunidad de El Rodeo, de Malacatancito, del departamento de Huehuetenango.

Dentro del marco de la visita se administraron los sacramentos de la iniciación cristiana, la penitencia y se celebró la Divina Liturgia, para los participantes.

En general, los hermanos expresaron su alegría y satisfacción por el crecimiento que la comunidad ha estado experimentando recientemente.

Tienen el proyecto de construir un templo más estable, para poder acoger a los hermanos y vivir una experiencia eclesial más positiva.

El arzobispo animó a los hermanos a seguir intensamente en su compromiso de fe.

El domingo 20, por la mañana, el arzobispo llegó hasta la comunidad central de Todos Santos Cuchumatanes, del departamento de Huehuetenango.

Esta comunidad que había experimentado diferentes problemas, se encuentra actualmente en una fase de reorganización y de crecimiento.

Se administraron los sacramentos de la iniciación cristiana a dos niñas y cuatro hermanas hicieron la primera reconciliación y la comunión solemne.

El arzobispo exhortó a los hermanos a comprometerse a seguir adelante en el proceso de organización de la comunidd y en el testimonio misionero.

El domingo 20, después del medio día, el arzobispo llegó hasta la comunidad de la Vega de Colotenango, en donde se habían reunido delegados del Centro Pastoral san Ignacio de Antioquía.

Se contó con la numerosa participación de varias de las comunidades que componen el centro pastoral.

Después de la formación impartida por el arzobispo, los delegados de las comunidades rindieron el informe de actrividades.

En algunas comunidades se ha dado un cierto crecimiento. Sin embargo una comunidad está sufriendo algunos desafíos, ante lo cual el arzobispo les animó a trabajar con calma y a tratar de buscar soluciones que garanticen la estabilidad y el progresivo crecimiento de la comunidad.

El 20 por la tarde, el arzobispo presidió la celebración de la Divina Liturgia para los delegados de las comunidades que forman el Centro Pastoral San Ignacio de Antioquía.

Concelebró en la Liturgia el Padre José Raúl López, encargado pastoral del centro.

Durante la homilía el arzobispo exhortó a los hermanos a profundizar en la fe, pues es lo que permite a Dios actuar en la vida de las personas y de las comunidades y lo que hace que las promesas de Dios se cumplan y se experimente la fecundidad pastoral y misionera.

El domingo 20, después de la celebración de la misa, el arzobispo se reunió con miembros del consejo pastoral del Centro San Ignacio de Antioquía.

Se trató, ante todo, el tema de las diferencias que se han desarrollado en una de las comunidades del Centro, ante lo cual se llegó a la conclusión de que es urgente que se defina realmente quiénes son los que se identifican con la fe y la vida de la Iglesia, para poder trabajar con mayor intensidad y dinamismo con ellos.

Por otra parte, se dialogó sobre la creación de la Parroquia de san Ignacio de Antioquía, para lo cual se fijó como fecha, la próxima visita que el arzobispo hará a la zona, en el mes de Noviembre.

El sábado 26 por la mañana, el arzobispo llegó hasta la comunidad de Quiajolá, en donde se había reunido un numeroso grupo de servidores de las diferentes comunidades del Centro Pastoral de San Sebastián Huehuetenanto.

La reunión dio inicio con el diálogo sobre diferentes temas relacionados con la tenencia legal de los terrenos en que se encuentran los diferentes templos.

Después el arzobispo impartió la formación preparada, habiéndose hecho diferentes preguntas aclaratorias, así como aportes y exhortaciones para la vida de los servidores.

Finalmente los representantes de las diferentes comunidades rindieron el informe de la marcha de las comunidades.

En general, se puede notar el compromiso y entusiasmo con el que se está trabajando. Aunque sea lentamente se puede notar un crecimiento sostenido y los hermanos están tratando de consolidar la organización de las comunidades, así como los diferentes templos.

Después del medio día, el arzobispo presidió la celebración de la misa, para los hermanos de la comunidad de Quiajolá, de San Sebastián Huehuetenango.

Se administró la reconciliación a los hermanos que lo consideraron necesario.

Durante la homilía el arzobispo explicó que es necesario estar dispuestos a dejar atrás de sí todo lo que se tiene, para poder experimentar la presencia de Dios y vivir el dinamismo de la alianza.

Los hermanos agradecieron la celebración y expresaron la disponibilidad a vivir de acuerdo a la Palabra de Dios.

El sábado por la tarde, el arzobispo llegó hasta la comunidad de Txejoj, en la parte alta de los Cuchumatanes, de San Sebastián Huehuetenango.

Los hermanos habían preparado la celebración de dos bautismos, con todos los ritos que implica la iniciación cristiana completa, es decir, la crismación y la primera comunión.

Además cuatro niños hicieron su primera reconciliación y la comunión solemne.

El arzobispo felicitó a los hermanos por la organización que tienen y por el dinamismo con el que trabajan y están tratando de dar testimonio del Evangelio.

Al caer del día 26, el arzobispo visitó la comunidad de Mapá, de San Sebastián Huehuetenango.

Apenas llegó el arzobispo, los hermanos le mostraron los avances en la construcción del templo y le solicitaron la celebración de una breve reunión con los miembros del Consejo Pastoral de la comunidad.

Después de explicar el proceso que se ha seguido para la construcción del templo, presentaron al arzobispo la necesidad que tienen de ayuda aún, para terminar la construcción.

El arzobispo les felicitó por los avances que han hecho y les animó a seguir trabajando con entusiasmo, no solamente en la construcción del templo sino, sobre, todo, en la evangelización de los hermanos que aún no han renovado su vida.

El sábado 26 por la noche, el arzobispo presidió la celebración de la Liturgia con los hermanos de la comunidad de Mapá, de San Sebastián Huehuetenango.

Dentro de la celebración se administraron los sacramentos de la iniciación cristiana a una anciana y a una niña.

Además, un grupo de niñas hizo su primera reconciliación y la comunión solemne.

El arzobispo animó a los hermanos a esforzarse por seguir trabajando en la evangelización y, junto a la felicitación por el avance en la construcción del templo, les animó a redoblar su esfuerzo porque todos puedan ser renovados en su vida, por la acción del Espíritu Santo.

El domingo por la mañana, después de haber caminado por largo tiempo, el arzobispo llegó hasta la comunidad de Camjá Bajo de Santa Bárbara Huehuetenango, el cual, sin embargo, pastoralmente hace parte de San Sebastián.

Los hermanos mostraron al arzobispo los avances que ha tenido en la construcción del templo sólido que están construyendo. El mismo será de dos cientos metros cuadrados, aparte de otras edificaciones que se levantarán.

Durante la homilía Mor Santiago Eduardo explicó a los hermanos cuál es el tipo de fe sobre el que está fundada la iglesia y animó a los hermanos a dejarse continuadamente renovar por la acción del Espíritu Santo.

Además les animó a seguir incansablemente trabajando por la renovación de todos los que aún no han logrado dejar que el Señor renueve sus vidas.

La actividad pastoral del Arzobispo en el área de San Sebastián Huehuetenango concluyó con la visita a la comunidad de Pueblo Viejo, la cual se ubica en el lugar en el que, antiguamente, se cosntruyó el mismo pueblo.

Dentro del marco de la celebración se administraron los sacramentos de la iniciación cristiana a cuatro niños. Tres hermanos fueron confirmados y recibieron el envío misionero. Finalmente una pareja contrajo matrimonio.

El arzobispo felicitó a los hermanos por haber organizado la comunidad, la cual es la primera vez que él visitaba y les animó a tratar de conseguir un lugar fijo, en el que puedan ubicarse.

Los hermanos asumieron el compromiso de perseverar en la fe y de tratar de que pronto puedan tener un lugar destinado específicamente para el culto.

El miércoles 30, en el seminario Santa María del Nuevo Éxodo, los alumnos del décimo segundo semestre, hicieron una presentación para compartir sus resultados y reflexiones con los demás seminaristas.

El tema acerca del cual disertaron fue: La especificidad de la identidad bíblica, histólica, teológica, litúrgica y espiritual de la Iglesia Católica Apostólica Siro-Ortodoxa de Antioquía y lo que tiene que ofrecer a las demás iglesias y, especialmente fieles, de las diferentes tradiciones apostólicas católicas y cristianas.

A pesar de la brevedad del tiempo, se presentaron elementos muy interesantes y, además se trató de estimular a que el nivel de interés académico y la relación entre los estudios y la actividad pastoral se vaya incrementando entre todos los seminaristas y, en general en toda la Arquidiócesis.