El miércoles primero de noviembre, inició la visita pastoral del arzobispo a las parroquias de San Mateo Apóstol y de la Epifanía de Nucá.

La visita dio inicio en la comunidad de Patalcal, de la parte alta de San Mateo Ixtatán.

Los hermanos recibieron con gran entusiasmo al arzobispo y luego, durante la homilía, el arzobispo recordó a los hermanos que la llamada a la santidad es universal y que somos constituidos en santos cuando, con humildad acogemos el don del Espíritu Santo en nuestra vida y dejamos que nos transforme.

Exhortó a los hermanos a dejarse llenar por la gracia del Espíritu, a permitir que el Espíritu produzca abundantes frutos en cada uno y a comprometerse en dar testimonio del Evangelio a todos los que aún no han sido renovados en su vida.

El Padre Marcos, encargado pastoral de la parroquia de San Mateo Apóstol, acompañó al arzobispo en la visita.

El primero de noviembre, hacia el medio día, el arzobispo presidió la celebración de la liturgia con los hermanos de la comunidad de Ocanté, San Mateo Ixtatán.

Durante la homilía, el arzobispo hizo énfasis en que, por la sangre de Cristo, de la cual somos hechos partícipes constantemente a través de la Eucaristía, somos revestidos de Cristo y participamos de su vida y de su santidad.

Luego recordó que las bienaventuranzas nos indican cuáles son las actitudes que caracterizan a quien se ha dejado llenar del Espíritu Santo y, por lo mismo, ha renovado su vida.

Exhortó a los hermanos a seguir trabajando con entusiasmo en vivir la fe, la renovación en el Espíritu Santo y a dar testimonio constante del amor de Dios en medio de todos los que aún no se han renovado.

El miércoles 1 por la tarde, el arzobispo presidió la celebración de la Divina Liturgia en la sede a Radio Nueva Vida, voz de la parroquia de la Epifanía, de Nucá.

La Liturgia fue ofrecida en acción de gracias por todos los que colaboran con la Radio y también por todos los fieles difuntos, especialmente los familiares de los bienhechores y los bienhechores difuntos.

El arzobispo recordó que es fundamental tomar conciencia del ligamen estrecho que existe entre la Renovación Carismática y la santidad de vida. Pues la santidad de vida es el signo de que, efectivamente, se ha sido renovados en el Espíritu Santo.

Además insistió en que la santidad de vida lleva a dar abundancia de frutos en el Espíritu Santo y a renovar efectivamente la vida de cada cristiano, en todos los niveles.

Agradeció el arzobispo la invitación a estar participando con los hermanos de la Radio y exhortó a todos los servidores y seguidores de la radio a aprovechar la llamada de Dios y el don del Espíritu Santo para vivir en genuina santidad y para dar testimonio del Evangelio.

El jueves dos por la mañana, el arzobispo presidió la celebración en conmemoración de todos los difuntos, en la sede de la parroquia de la Epifanía de Nucá.

El padre Marcos, párroco local, concelebró con el arzobispo.

Durante la homilía el arzobispo recordó que la conmemoración de los difuntos está marcada por la certeza de la resurrección que, en Cristo, ha sido dada como don a todos los que creen.

Además recordó que la vida eterna comienza desde el presente, por el don del Espíritu Santo y que la misma experiencia se manifiesta en la forma de vivir de cada quien.

Después de la homilía se hizo la bendición de las candelas que, los hermanos llevarán al cementerio, como testimonio de la fe en la resurrección de los muertos.

El jueves 2 por la tarde, con una Liturgia en la sede de la parroquia de San Mateo Apóstol de San Mateo Ixtatán, concluyó la visita pastoral del arzobispo a la zona.

El arzobispo agradeció al padre Marcos, párroco local y a todos los servidores, el trabajo que realizan, así como la cordial bienvenida que le han brindado.

Durante la homilía recordó la realidad de la vida eterna, no solo como esperanza final del cristiano sino como parte integral de la vida cotidiana, pues, por el don del Espíritu Santo y la vida, sacramental, la vida eterna comienza desde ahora.

También animó a los hermanos a profundizar en la fe, para que la vida eterna que llevamos dentro, se manifieste en las actitudes y el compromiso personal.

Tanto el padre Marcos como el pueblo de Dios, agradecieron al arzobispo la visita.

Dentro de la celebración, también se hizo el anuncio de que, a partir del año entrante, se ha establecido del nuevo Decanato del Norte de Huehuetenango, para facilitar la participación y la formación de los hermanos de las parroquias de San Mateo y la Epifanía y que, el mismo, se celebrará en la sede de la parroquia de San Mateo.

El viernes tres de noviembre, Mor Santiago Eduardo presidió el decanato del centro de Huehuetenango, celebrado en el salón de la parroquia de Santa Eulalia, Huehuetenango.

Se contó con buena participación de líderes de las cuatro parroquias de este decanato, así como de los presbíteros y de los epesistas que trabajarán en la parroquia de Los Arcángeles.

El arzobispo impartió la formación y los hermanos, al final, expresaron su gratitud por la formación, pues dijeron, eso les ayuda mucho a consolidar la fe y a saber responder a diferentes cuestionamientos que se les hacen.

En general se pudo notar que, en la mayoría de las comunidades se ha dado un cierto crecimiento y hay dos o tres comunidades nuevas en las diferentes parroquias.

El viernes tres, después del medio día, el arzobispo visitó la comunidad de Jesús Buen Pastor de Ixtenam, Santa Eulalia.

Se trató de la primera visita a la comunidad y, en la misma, estuvo acompañado por el Padre Fredy Mux, párroco local.

Los hermanos expresaron su alegría por su visita e hicieron ver los logros que han tenido, con apenas un año de existencia: Cuentan con la parte fundamental del templo y con un ministerio, así como con una buena organización.

El arzobispo les animó a seguir adelante y a tratar de completar la organización y consolidación de sus servicios y ministerios, para poder ofrecer todo lo que se supone, debe ofrecer una comunidad.

El viernes 3, al caer el día, Mor Santiago Eduardo llegó hasta la comunidad de Lajchulaj, de la Parroquia de los Arcángeles y del municipio de San Rafael la Independencia.

Los hermanos habían preparado la celebración de confirmaciones.

Esta comunidad que, apenas en enero cumplirá un año de existencia, se ha visto bendecida con el ingreso de numerosas familias y está trabajando con gran entusiasmo.

El arzobispo felicitó a los hermanos y les animó a seguir adelante con el mismo entusiasmo que les ha caracterizado hasta el momento.

El sábado cuatro de noviembre, se celebró, en el Centro de Formación de Jumaj, zona 6 de la ciudad de Huehuetenango, la Asamblea Decanato del sur de Huehuetenango.

Asistió la mayoría de representantes de las diferentes parroquias, centros pastorales y capellanías, así como los padres Pedro, Yaider y José Raúl.

El arzobispo impartió la formación bíblica acerca del bautismo y luego respondió a las diferentes preguntas que plantearon los hermanos.

Por el informe que dieron los representantes de los diferentes centros, pudo constatarse que se ha estado experimentando un sostenido crecimiento y gran alegría e identificación en todas partes.

El sábado, después del medio día, en el Centro de Formación de Jumaj, el arzobispo celebró la iniciación cristiana de dos hermanas y un matrimonio, en medio de un ambiente de profunda sencillez.

Durante la homilía el arzobispo hizo énfasis en que al ser iniciado en la vida cristiana, se recibe el don del Espíritu Santo que nos hace hijos de Dios y, también testigos vivos del evangelio.

Respecto al matrimonio hizo énfasis en que se trata de vivir el amor acorde con el don del Espíritu Santo, es decir, como un don de sí mismo y un punto de apoyo para que cada uno de los cónyugues pueda alcanzar la realización en un ambiente de respeto y de libertad.

El sábado por la noche, el arzobispo llegó hasta la comunidad de El Rodeo de Malacatancito, para la celebración de la Divina Liturgia, con los hermanos que forman la comunidad.

Dentro del marco de la celebración, se administraron los sacramentos de la iniciación cristiana a dos niños.

El arzobispo recordó a los hermanos que el fundamento de toda la vida cristiana es el amor, fruto no de un sentimiento humano sino del don del Espíritu Santo.

También animó a los hermanos a que el amor operante lleve a manifestarse en un compromiso misionero constante e inagotable, para que todos puedan participar del mismo amor que ha sido derramado en el corazón de los creyentes.

El domingo 5, el arzobispo llegó hasta Nebaj, para presidir la celebración del decanato del sur del área Ixil.

En este decanato participan los representantes de las comunidades de San Juan Cotzal y de Nebaj.

Participó un buen número de delegados de las diferentes comunidades.

El arzobispo impartió la formación y luego los hermanos plantearon diferentes preguntas y pidieron que dieran criterios para aplicar eficazmente las enseñanzas.

Durante la presentación, los hermanos señalaron los progresos que se han hecho que, aunque son modestos, si dejan ver el compromiso y entusiasmo con el que los hermanos están trabajando.

El domingo cinco, después del medio día, el arzobispo, acompañado del Padre Paulino, Encargado pastoral de Nebaj, hizo la visita de la comunida de la Laguna Tzalbal, también conocida como La Antena.

Esta comunidad ha crecido muy aceleradamente en número y también en organización, hasta el punto que los hermanos llenan totalmente el templo.

Con ocasión de la visita del arzobispo, se administraron los sacramentos de la iniciación cristiana a dos niños y la confirmación y el envío misionero a un buen número de hermanos.

El arzobispo animó a los hermanos a seguir trabajando con el mismo entusiasmo que los ha caracterizado y a tratar de seguir anunciando el evangelio a quienes aún no han renovados sus vidas.

El domingo, al caer el día, el arzobispo llegó hasta la comunidad de Salquilito, en el centro de Nebaj.

Esta comunidad es la más numerosa de las comunidades de Nebaj. Los hermanos llenaban el templo completamente.

Se administraron los sacramentos de la iniciación cristiana a un niño y la confirmación y el envío misionero a un grupo numeroso de hermanos.

El arzobispo animó a los hermanos a centrar su vida y su fe en torno a la Palabra de Dios, que se actualiza en la vida de los cristianos, particularmente a través de la vida sacramental y, sobre todo, de la eucaristía.

Se animó a los hermanos a organizarse también en las diferentes pastorales, para garantizar el futuro de la comunidad y cumplir la misión que el Señor nos ha confiado de animar a vivir la vida en el Espíritu a cada fiel.

El lunes 6, Mor Santiago Eduardo, acompañado por el Padre Paulino Bizarro, llegó hasta la sede parroquial provisional de Chel, Chajul, para la celebración del decanato del Norte de Chajul.

Los hermanos asistieron en gran número y con mucho entusiasmo.

El arzobispo les expuso la formación en forma detallada y, luego, los hermanos tuvieron la oportunidad de presentar sus cuestiones y preguntas.

En el informe se pudo notar de que, algunas comunidades han retomado el entusiasmo y se están reorganizando con mayor dinamismo.

El crecimiento es lento y el arzobispo les animó a tratar de comprometerse con mayor entusiasmo en el testimonio misionero, tanto con la vida como con otras iniciativas.

Al final de la mañana del día 6, se celebró la Divina Liturgia con líderes y algunos feligreses de la comunidad de Chel, Chajul, en el templo provisional.

Durante la homilía el arzobispo recordó que la libertad del cristiano encuentra su fundamento en el don del Espíritu y en el dejar que sea éste quien va guiando cada una de las acciones que se realizan.

También exhortó a los hermanos a tratar de emprender iniciativas que les lleven a tener una mejor organización, una proyección más detallada hacia los niños y los jóvenes y también un testimonio misionero más eficaz.

Una de las comunidades más carentes de recursos materiales que existe, es la de Covadonga, en el Municipio de Chajul,

El arzobispo les visitó por segunda vez y celebró con ellos la Divina Liturgia, en medio de la sencillez y fe profunda y sentida que tienen los hermanos.

Durante la homilía, los hermanos fueron animados a fortalecer su compromiso de vida y a tratar de encontrar la presencia de Dios en cada momento y dar testimonio de ella a todos.

El lunes 6, al caer el día, el arzobispo llegó hasta la comunidad de la Estrella Polar, del Municipio de Chajul.

Los hermanos, durante el último año, han experimentado una serie de problemas de organización, lo que les ha impedido tener estabilidad e incluso más de alguna familia se ha enfriado en su participación eclesial.

Sin embargo, los hermanos han logrado comprar un lote de terreno en donde tienen su templo provisional y esperan, con la ayuda de Dios, poder iniciar al comienzo del año entrante, la construcción más estable.

El arzobispo animó a los hermanos a impulsar la organización pastoral y el testimonio misionero.

El martes 7, el arzobispo llegó hasta la sede de la parroquia de la Santísima Trinidad de Uspantán, en donde se celebró el decanato del oriente de El Quiché.

Asistieron participantes de la parroquia local, así como de la de Chamá Grande, Cobán y de los Centros Pastorales de Chicamán y de la Zona Reyna.

El arzobispo impartió la formación y luego respondió a las preguntas que le hicieron.

En el informe los hermanos subrayaron el crecimiento que han tenido, así como los diferentes proyectos que tienen en proceso de realización.

El arzobispo inisistió en la urgencia de que se organice una pastoral infantil y una juvenil, con la debida estructuración que se ha propuesto, para que se garantice el crecimiento y el futuro de la iglesia.

Todos manifestaron su alegría por el proceso que se está siguiendo.

Participaron los padres Óscar, párroco local y Julio, encargado del Centro de Chicamán y de uno de los dos centros de la Zona Reyna.

El site, después del medio día, el arzobispo hizo la primera visita a la recién incorporada comunidad de Poblaj, de la parroquia de Uspantán.

Los hermanos recibieron al arzobispo con gran alegría.

Actualmente han construido el primer piso de un edificio que servirá como salón pastoral y tienen aún pendiente de construir el segundo piso, que está al nivel de la calle, en donde será el templo.

Todos se encuentran muy entusiasmados en su organización y tienen el propósito de perseverar y de impulsar la misión, según expresaron.

El martes 7 por la tarde, el arzobispo visitó el centro pastoral de Chicamán, ubicado en la comunidad de Las Anonas. Estuvo concelebrando el padre Julio, encargado pastoral del centro.

La celebración se llevó a cabo en una galera provisional, pues en la parte posterior, los hermanos están terminando la reconstrucción y ampliación del templo, el cual esperan tenerlo en uso, aunque sea con la parte fundamental, para diciembre.

Se nota que se ha tenido un crecimiento en la comunidad, así como también en la organización de la misma.

El arzobispo les animó a intensificar su proyección pastoral, para que, en un futuro próximo, puedan ser constituidos en parroquia y tener una presencia más autónoma y estable.

El martes 6, por la noche, Mor Santiago Eduardo llegó hasta la comunidad de Pericón-Tierra Blanca, de la parroquia de Uspantán, en donde le recibió el Padre Óscar, párroco local.

Se celebró la Liturgia con algunos de los servidores y líderes de la comunidad.

Los hermanos agradecieron la visita y presentaron al arzobispo algunos de los logros y dificultades que han tenido.

El arzobispo, durante la homilía, les exhortó a profundizar en la vida en el Espíritu Santo, para vivir realmente en la libertad de los hijos de Dios y participar del gozo y la libertad que el Señor quiere comunicar a cada creyente.

También animó a los hermanos a intensificar el testimonio de vida y la proyección misionera.

El miércoles 8, el arzobispo llegó hasta el centro pastoral de Cunén, en donde se celebró el decanato con la presencia de hermanos servidores de ese municipio, de Sacapulas y del área kiché de San Juan Cotzal.

El arzobispo impartió la formación y al final, los hermanos plantearon una serie de cuestiones referentes a la vida cristiana y a la vida en el Espíritu Santo.

Se contó con un número muy elevado de participantes y se pudo notar que se está progresando bastante en la organización y el compromiso, teniendo un moderado crecimiento.

El padre Bernabé, encargado pastoral, participó e hizo un breve informe de la marcha del centro pastoral.

El arzobispo animó a los hermanos a seguir trabajando con entusiasmo y a tratar de dar testimonio misionero así como a profundizar en la organización y la proyección pastoral.

El miércoles, hacia el medio día, el arzobispo visitó la comunidad de Cecilia, del Centro Pastoral de Cunén.

Los hermanos recibieron con gran alegría al arzobispo.

Respecto a la último visita que hizo el arzobispo, se puede notar que hay una consolidación y un cierto crecimiento en la comunidad, así como una mayor organización.

El arzobispo animó a los hermanos a continuar con los pasos que han emprendido, para poder llegar realmente a cumplir la misión que el Señor nos ha confiado.

El miércoles por la tarde, el arzobispo llegó hasta la comunidad de Puente Chuatuj, del Municipio de Sacapulas. Además de los hermanos de la comunidad local, hubo presencia de hermanos de Tierra Caliente y de Suasité.

Con ocasión de la visita, se celebró el matrimonio de un hermano anciano, que quedó viudo hace algunos años y que es como el patriarca de la comunidad.

El arzobispo animó a los hermanos a vivir en el verdadero amor, fruto del don del Espíritu Santo y les invitó también a que traten de tener mayor proyección misionera, para que la presencia de la iglesia se consolide en ese municipio.

El jueves 9 por la mañana, el arzobispo llegó hasta la parroquia Inspiración del Espíritu Santo de Cuilco, en donde se celebró el decanato del sur-occidente de Huehuetenango.

Se contó con una numerosa presencia de líderes y servidores, así como la del padre Ángel, párroco local.

Después de la formación que impartió el arzobispo, los hermanos, con gran entusiasmo, compartieron los logros que se están teniendo en el área.

Hay nuevas comunidades, nuevas familias se han incorporado a la mayoría de las comunidades y, sobre todo, se respira entusiasmo, armonía y profunda identificación con la Iglesia.

A medio día del 9, el arzobispo presidió la Divina Liturgia con los servidores y algunos fieles de la parroquia de Cuilco.

Durante la celebración, se administró la confirmación y el envío misionero a un grupo de hermanos y dos hermanos fueron instituidos como ministros para la distribución de la comunión.

Durante la homilía el arzobispo señaló cuáles son los aspectos fundamentales en los que se basa la libertad cristiana y animó a los hermanos a que esa experiencia les lleve a dar testimonio del evangelio, para que cuantos se encuentren aún lejos, logren encontrarse con el Señor y experimentar la alegría del evangelio.

El jueves 9 al caer la tarde, el arzobispo llegó hasta la comunidad de Pajomel, del municipio de Santa Cruz la Laguna de Sololá.

Los hermanos se encontraban particularmente contentos, pues desde la última visita, dos familias se han convertido e incorporado a la comunidad.

El arzobispo animó a los hermanos a intensificar su trabajo misionero, para cumplir la voluntad del Señor de buscar a la oveja perdida y no descansar hasta que se le encuentre.

Los hermanos expresaron su disponibilidad a tratar de organizarse mejor, para lograr cumplir la misión que el Señor nos ha confiado, de trabajar que todos lleguemos a ser un solo rebaño, bajo la guía de Cristo, que es el único pastor.

El jueves nueve, por la noche, el arzobispo llegó a la comunidad de Chuitzanchaj, para visitar a los hermanos y celebrar la Divina Liturgia.

Los hermanos participaron con gran fervor y provecho.

El arzobispo animó a los hermanos a seguir tratando de dar testimonio del evangelio y de trabajar incansablemente por buscar a los hermanos que aún no han renovado su vida.