El lunes primero de mayo, Mor Santiago Eduardo, presidió, en la Ciudad de Guatemala, la Divina Liturgia, para conmemorar el séptimo aniversario del fallecimiento de su madre, Doña Anna Oestmann de Aguirre.

En la Liturgia participaron específicamente sus hermanos y sobrinos.

Durante la homilía el arzobispo, a la luz de las lecturas bíblicas del día, hizo énfasis en que, al descubrir existencialmente a Cristo como el camino, la verdad y la vida, se alcanza la capacidad de pasar de una situación de soledad y aislamiento a la experiencia de comunión. Desde esta realidad, la comunión de los santos adquiere actualidad y el recordar a los que se encuentran en el más allá, se convierte en una genuina experiencia de encuentro.

Animó a los participantes a trabajar en dar vigor a la vida espiritual, para que cuanto se cree, se convierta efectivamente en una dimensión de vida.

El viernes 5 de mayo, Mor Santiago llegó por primera vez a Puerto Rico, para formalizar la apertura de una misión de la Arquidiócesis en ese territorio, que hace parte de la Arquidiócesis de Centro América.

Francis Silva, ha sido el elegido por el Señor, para establecer esa misión.

Desde hace varios años ha comenzado a trabajar en la creación de la misión y actualmente cuenta con unos 50 miembros, plenamente identificados con la Santa Iglesia.

Provisionalmente la misión que está destinada a llamarse Parroquia de la Santísima Trinidad, tiene su sede en un hermoso lugar de la Ciudad de Aguada,

Se considera que en este lugar fue en donde Cristóbal Colón desembarcó en uno de sus viajes y es desde aquí, desde donde partió la evangelización de Puerto Rico.

El sábado 6, con la participación de un buen número de líderes, el arzobispo, durante tres horas, impartió formación a los responsables de la Misión de Puerto Rico.

Para impartir la formación se utilizó el método de preguntas propuestas por los presentes y respuestas dadas por el arzobispo.

Las preguntas giraron en torno a la historia de la Iglesia, la identidad litúrgica de la Iglesia, aspectos de la Sagrada Escritura, las vestiduras litúrgicas y otros aspectos relacionados con la organización eclesial.

Los participantes se mostraron muy complacidos con la forma en la que fueron afrontadas las diferentes cuestiones, al considerar que ellos les ayudó a consolidar su fe y su identidad.

La comunidad de la Santísima Trinidad, cuenta con un coro, que se ha esforzado por ir respondiendo a las necesidades de la comunidad.

Comenzando el viernes 5 por la noche y siguiendo el sábado 6, al terminar la formación de líderes, el arzobispo se reunió con los miembros del coro, para ensayar diferentes cantos litúrgicos para las ceremonias que se celebrarían.

Entre los cantos que se aprendieron destacó el Padrenuestro en arameo. Con gran entusiasmo los integrantes se esforzaron por aprenderlo y lo lograron en manera muy positiva.

El sábado 5 por la tarde, con la participación de los miembros de la Comunidad de la Santísima Trinidad y otros invitados, el arzobispo presidió la celebración de la Divina Liturgia, en la que se confirió la ordenación de Lector a Ángel Nieves y de sub-diácono al coordinador de la misión, Francis Silva.

La liturgia transcurrió en una atmósfera de profunda espiritualidad. Se trataba de la primera vez que los fieles de la comunidad participaban en una ceremonia celebrada con el rito específico bendecido para la Arquidiócesis.

Durante la homilía el arzobispo subrayó cuál es la misión específica que el Señor confía a los miembros de la comunidad, al injertarlos como parte de la Iglesia Madre de todas las Iglesias y les animó a estar dispuesto a vivir con alegría el Evangelio y a dar testimonio profundo y eficaz de ser discípulos del Señor.

Los hermanos, al final de la liturgia expresaron su satisfacción por la liturgia, así como su profunda identificación y su compromiso a cumplir con fidelidad la misión que el Señor nos confía.

Las actividades de la primera jornada de visita pastoral a Aguada, Puerto Rico, concluyeron con un ágape fraterno en el que los que participaron en la celebración de la Divina Liturgia y las ordenaciones, compartieron fraternalmente.

Se pudo notar la cercanía y profunda identificación que tienen todos los miembros de la comunidad entre sí, así como la alegría que experimentan, por haber sido elegidos por el Señor para ser parte de la Iglesia Apostólica y haber recibido la misión de hacer presente la Iglesia, con las mismas características que el Señor le dio al inicio, a través del ministerio de los doce apóstoles y de las primeras comunidades cristianas.

El domingo 7 de mayo, por la mañana, en la sede provisional de la Misión de la Santísima Trinidad, de Aguada, Puerto Rico, el arzobispo presidió la celebración de la Divina Liturgia, para los servidores y líderes de la comunidad.

Participaron en la Liturgia el recién ordenado sub-diácono, Francis Silva, quien es el coordinador de la comunidad y le corresponderá actuar también como administrador de la misión en Puerto Rico.

El arzobispo, a la luz de las lecturas bíblicas, exhortó a los hermanos a comprometerse activamente en estar abiertos a vivir la experiencia de los apóstoles y los primeros cristianos, para que descubriendo a Cristo como el buen pastor y la puerta de ingreso al Reino, se pueda dar trestimonio eficaz del evangelio y cumplir la misión que el Señor nos ha confiado.

Los hermanos participaron con gran devoción y se pudo gozar con profundidad la espiritualidad de la Divina Liturgia de rito occidental que identifica a la Arquidiócesis de Centro América.

El domingo al medio, día se tuvo y breve convivio entre los servidores y de la comunidad y el arzobispo.

Se puede notar la profunda identificación que tienen los hermanos con la ortodoxia y el progresivo conocimiento que se va teniendo específicamente con la ortodoxia oriental y la siriana.

El arzobispo agradeció a todos los hermanos la dedicación que tienen y les animó a seguir aún con mayor empeño, siendo conscientes de que la misión que se ha recibido es grande y que se tiene el compromiso de cumplirlo con la misma radicalidad y eficacia con que lo hicieron los primeros cristianos.

El domingo 7 por la tarde, el arzobispo presidió la reunión en la que, después de dialogar sobre la prespectiva y el futuro de la comunidad de la Santísima Trinidad y de la misión en Puerto Rico, se procedió a elegir el Consejo Pastoral de la Parroquia en formación de la Santísima Trinidad.

El diácono Francis Silva fue nombrado por el arzobispo como administrador de la misión en Puerto Rico y de la parroquia en formación. El consejo pastoral tendrá como presidente a José, como Vice-presidente a Sixto, como secretario al lector Ángel Nieves. Además existe una Tesorera y Vocales de pastoral litúrgica, infantil, juvenil y misionera y de medios de comunicación.

Existe gran entusiasmo entre todos los miembros de la comunidad y se espera que, con la mínima organización que se ha hecho, se pueda trabajar con mayor firmeza en el crecimiento de la parroquia y de la misión en general.

La visita pastoral del arzobispo a Puerto Rico concluyó con el traslado de las Divinas Especies a una capilla que se ha establecido en la casa de los esposos José y Naida, que fue el mismo lugar en el que el arzobispo fue hospedado durante su estadía en Aguada, Puerto Rico.

En medio de cantos y oraciones, se hizo la traslación.

Ahora la capilla de oración y adoración, será como fuente de vida y de inspiración para todos los miembros de la misión y desde allí será trasladada la Divina Presencia para alimentar a los hermanos que se reúnan los domingo en la sede provisional de la parroquia.

Los hermanos se comprometieron a seguir profundizando en la vida de fe y a cumplir a cabalidad la misión que el Señor confió a los apóstoles y, a través de ellos, llega hasta nosotros.

Siro-Radio, la voz de la Parroquia de San Miguel Arcángel de Los Ángeles, California, ha inaugurado su nuevo estudio de transmisión hace pocos días.

Se trata de una radio que, aunque sólo transmite a través de la Internet, está logrando alcanzar a numerosos oyentes y también espectadores, a través de las plataformas de redes sociales.

El progreso en la radio se debe en gran parte al entusiasmo y dedicación de los hermanos Daniel y Alexis, que han dado en forma gratuita tiempo abundante y gran esfuerzo, entusiasmo e incluso aporte económico personal.

Con ocasión de la visita del arzobispo a Los Ángeles, se le invitó para que participara en la transmisión y se le pidió que, en adelante, cada vez que visite la parroquia, desarrolle un programa.

El tema sobre el que se dialogó en esta ocasión, fue el origen, identidad y características de la Renovación Carismática en el Espíritu Santo, como es vivida en la Arquidiócesis de Centro América de la Santa Iglesia.

El arzobispo hizo énfasis en que se trata de asumir y vivir con todas sus características la fe apostólica que, indudablemente se caracterizó por la Renovación que el Espíritu Santo produjo en el corazón de cada fiel y por la abundancia de dones del Espíritu Santo. Tres son las características: Una fe viva, una vida sacramental activa y un amor inquebrantable.

El sábado por la tarde, el arzobispo presidió la celebración de la liturgia con los hermanos de la comunidad Nueva Vida, de la parroquia de San Miguel Arcángel.

Durante la homilía el arzobispo hizo énfasis en la importancia de dejarse transformar por la acción y la presencia viva del Espíritu Santo, para que se puedan realizar todas las acciones que el Señor quiere y se cumpla la misión que el Señor ha encomendado a cada miembro y a toda la comunidad.

Los hermanos se encuentran muy animados, dispuestos a perseverar y a tratar de trabajar incansablemente para encontrar un local permanente para la comunidad, que podría también convertirse en la sede de la parroquia.

El 13 por la noche, Mor Santiago Eduardo visitó la comunidad de Adoradores de Cristo Rey, ubicada en la Sexta Calle, a un costado del Parque Mac Arthur, en el pleno centro de Los Ángeles.

La comunidad recibió con gran entusiasmo la presencia del arzobispo, por reconocer que el centro de la vida de la comunidad es precisamente la celebración de la santa misa.

Durante la homilía el arzobispo animó a los hermanos a tratar de dejarse transformar por la acción del Espíritu Santo, para estar capacitados a cumplir la misión que el Señor encomendó a los apóstoles y que ahora, es la misión que Él mismo nos confía a cada uno de los creyentes.

En los Estados Unidos, el día de la madre se celebra el segundo domingo de mayor.

Con tal ocasión, la Divina Liturgia para servidores de las comunidades de la Parroquia de San Miguel Arcángel, se celebró precisamente para orar por las madres presentes, las difuntas y las que se encontraban lejos.

La celebración, al igual que las demás actividades que se realizaron tuvieron lugar en la sede de la comunidad de Adoradores de Cristo Rey que, desde el mes de abril, se ha convertido en la sede provisional de la parroquia de San Miguel Arcángel.

Durante la homilía el arzobispo recordó que por la fe y el don del Espíritu Santo, cada quien ha sido constituida en piedra viva del Señor y todos, en pueblo sacerdotal, por lo que es indispensable que se viva con mayor intensidad la vida en el Espíritu Santo y la misión que esa realidad conlleva.

Después de la homilía, se oró por todas las madres y se les bendijo en forma especial.

La formación para servidores de la parroquia de San Miguel Arcángel, se celebró el domingo 14 al final de la mañana en la sede provisional de la Parroquia de San Miguel Arcángel.

La temática desarrollada por el arzobispo giró en torno a las características de la Iglesia primitiva, como deben ser vividas y asumidas en la actualidad, por cada una de nuestras comunidades.

El arzobispo animó a los hermanos a hacerse planteamientos serios, para lograr que se dé una renovación auténtica en cada una de las comunidades, se cumpla la misión específica que se ha recibido y se tenga el crecimiento que se espera.

Los hermanos expresaron su alegría y gratitud por la formación que se les impartió.

El domingo a medio día, el arzobispo presidió la celebración del Consejo Pastoral de la Parroquia de San Miguel Arcángel.

Los delegados de la comunidad de Nuestra Señora de Guadalupe, Riverside, invitaron a los demás a participar en la vigilia de Pnetecostés que han preparado. Los de la Comunidad Adoradores de Cristo Rey compartieron que hay nuevos miembros que se han adherido a la comunidad, a los cuales se les dio la bienvenida. Los de la comunidad Nueva Vida, compartieron los proyectos de crecimiento que tienen y su decisión de mantenerse firmes en la fe.

Los representantes de Siro-radio y de radio Cristo Rey, compartieron también los proyectos que tienen y la proyección misionera que han dado a sus transmisiones.

El arzobispo animó a los hermanos a profundizar en la ministerialización de las comunidades, estableciendo programas de formación para candidatos que, eventualmente puedan ser ordenados Lectores y Sub-diáconos.

La reunión, al igual que todas las demás actividades se desarrollaron en un espíritu de alegría y profunda participación.

El domingo 14 por la tarde, el arzobispo llegó hasta la comunidad de Nuestra Señora de Guadalupe, Riverside, California.

Como se ha acordado, lo primero que se tuvo fue una reunión de evaluación, proyección y para responder a los cuestionamientos que hubieren podido surgir.

De la reunión se pudo concluir que la comunidad ha trabajado bien, está creciendo y por eso, varias familias se han acercado a la comunidad y algunas han optado por pertenecer a la comunidad en forma estable.

Los hermanos plantearon la cuestión de los criterios para la preparación y celebración de los diferentes sacramentos, así como la emisión de las debidas constancias de los sacramentos recibidos.

El arzobispo puso también a consideración de los hermanos la posibilidad de establecer mecanismos de formación para miembros de las comunidades que se quieran formar para ser, eventualmente, ordenados como lectores y sub-diáconos.

La reunión transcurrió en un ambiente de mucha fraternidad y los hermanos pusieron de manifiesto el interés que tienen en el éxito y crecimiento de la comunidad.

El domingo 14 por la noche, Mor Santiago Eduardo presidió la celebración de la Divina Liturgia con los hermanos de la comunidad de Nuestra Señora de Guadalupe, ubicada en Riverside, California.

Durante la homilía el arzobispo hizo énfasis en la profunda dignidad que el Señor nos ha dado al derramar en la vida del creyente la efusión del Espíritu Santo, para hacernos capaces de realizar obras tan grandes como el mismo Señor realizó.

También exhortó a los hermanos a tratar de poner en práctica las diferentes enseñanzas que se reciben y a dar testimonio constantemente y en todos los lugares, de la misión que el Señor nos ha confiado.

Después de la homilía se hizo una oración especial por todas las madres, las presentes y las ausentes, las vivas y las difuntas.

Los hermanos agradecieron abiertamente el apoyo del arzobispo y expresaron la total disponibilidad para trabajar de manera que la misión de la Iglesia pueda cumplirse plenamente.

El viernes 19, Mor Santiago Eduardo llegó hasta la comunidad de Chuitzanchaj, Santa Cruz la Laguna, Sololá, para presidir la celebración de la Divina Liturgia.

Antes de la celebración tuvo un breve diálogo con los dirigentes, para explicar por qué se administra la comunión a los niños y para buscar que la forma en la que se les dé la comunión y se les prepare, garantice que se respeta el Divino Sacramento y que se convierta en una verdadera experiencia de edificación para los miembros de la comunidad y para las demás personas.

Durante la homilía hizo énfasis en la libertad que el Señor da a quienes creen en Él, explicando que el fundamento para poder participar de esta libertad es precisamente el estar injertados en Cristo, participando de toda su vida.

El viernes 19, por la tarde, el arzobispo visitó la comunidad de Pajomel, Santa Cruz la Laguna, Sololá.

Durante la celebración se administraron los tres sacramentos de la iniciación cristiana a dos niños, hijos de familias miembros de la comunidad.

El arzobispo animó a los hermanos a participar de la misma libertad que tuvieron los primeros cristianos, indicando que el camino para alcanzar esto es dejar que el Espíritu Santo renueve la vida de cada persona.

Además exhortó a los hermanos a seguir comprometidos en la proyección misionero, como característica fundamental y distintiva de que, efectivamente se ha recibido el Espíritu Santo y de que se está identificados con la Iglesia primitiva, a la cual pertenecieron los apóstoles.

El sábado 20 por la mañana, el arzobispo visitó la comunidad lejana de Pajales, del Municipios de San Antonio Huista, Huehuetenango.

Los hermanos habían preparado a dos niñas que, además de hacer la primera reconciliación, hicieron la comunión solemne.

El arzobispo felicitó a los hermanos por lo avanzados que llevan los trabajos de construcción del templo de la comunidad, ubicado en la vecindad de donde se celebró la Liturgia.

Los hermanos agradecieron la visita y dijeron esperar que el arzobispo les vuelva a visitar con ocasión de la inauguración del templo de la comunidad que están construyendo.

El sábado 20 hacia el medio día, el arzobispo visitó la comunidad de La Nueva Esperanza, del Municipio de La Democracia, de Huehuetenango.

Con ocasión de la visita una hermana recibió la confirmación y el envío misionero.

Además algunos hermanos de una nueva comunidad, que se han integrado recientemente a la Iglesia, del Municipio de San Antonio Huista, llegaron también para saludar al arzobispo y participar en la celebración.

El arzobispo animó a los hermanos a tratar de dar testimonio del evangelio, con la misma fuerza y actitud con la que los hicieron los primeros cristianos.

Los hermanos, por su parte, agradecieron la visita y se comprometieron a intensificar su proyección misionera.

El sábado por la tarde Mor Santiago Eduardo, llegó hasta la comunidad de La Esperanza, del Municipio de la Unión Cantinil, de Huehuetenango.

Tres señoritas recibieron la confirmación y el envío misionero. El arzobispo hizo énfasis tanto a las hermanas que fueron enviadas como misioneras como a toda la congregación, que lo que hace que los cristianos no seamos del mundo, es el haber recibido el Espíritu Santo, que nos hace presencia del Reino de Dios y, el vivir de acuerdo con la presencia del Espíritu.

El arzobispo también exhortó a los hermanos a intensificar sus esfuerzos, para hacer la construcción de la casa de oración de la comunidad.

Los hermanos manifestaron su alegría por la visita y se mostraron dispuestos a acoger con entusiasmo la invitación que les hiciera el arzobispo.

El viernes 26, el arzobispo visitó la comunidad de Monrovia, San Juan Ostuncalco, Quetzaltenango.

Fueron administrados, durante la celebración de la Divina Liturgia, los sacramentos de la iniciación cristiana (bautismo, crismación y primera comunión) a numerosos niños.

También se fijó que el 29 de junio visitará la comunidad nuevamente, para celebrar el matrimonio de cinco parejas que se están preparando para tal evento.

Mor Santiago Eduardo impartió la formación para servidores y líderes de las comunidades del Centro Pastoral de San Sebastián Huehuetenango en el templo de la comunidad de Quiajolá.

Lo primero que se hizo fue la calendarización de la siguiente formación, así como de las visitas que hará el arzobispo a las comunidades, los días 26 y 27 de agosto.

Dentro de la formación el arzobispo animó a los hermanos a hacer un serio examen de conciencia de la forma en que se está viviendo en las comunidades y a tratar de corregir los aspectos que no reflejan la identidad ni el sentido de vida y de organización de la Iglesia Apostólica, para poder tener la vitalidad y el crecimiento que se espera.

Finalmente, se dialogó sobre los métodos para implementar en las comunidades la pastoral juvenil e infantil y, de esa forma, garantizar el futuro de las comunidades.

El sábado por la tarde el arzobispo llegó hasta la comunidad de Txejoj, de San Sebastián Huehuetenango, en donde celebró la Divina Liturgia para los hermanos.

Con ocasión de la visita del arzobispo, se administraron los sacramentos de la iniciación cristiana a dos niños. Además se celebró un matrimonio y dos niños hicieron la primera reconciliación y la comunión solemne.

Durante la homilía el arzobispo animó a los hermanos a organizarse de una forma más dinámica, para poder dar testimonio del Evangelio a todas las personas y en todas partes.

Felicitó a los hermanos por el esfuerzo que hacen por responder con fidelidad a la misión que el Señor nos ha confiado y les animó a intensificar su compromiso.

Al caer del día 27, Mor Santiago Eduardo tuvo un encuentro con unos jóvenes y niños de la comunidad de Sipal, San Sebastián Huehuetenango.

Ante todo, les presentó el proyecto que tiene la Arquidiócesis de Pastoral juvenil e infantil y les animó a involucrarse activamente dentro del mismo.

Los hermanos aceptaron gustosos la invitación. Ahora corresponderá que los seminaristas que apoyan pastoralmente a este Centro Pastoral, hagan las diligencias pertinentes para apoyar también la organización de la pastoral juvenil e infantil, de acuerdo al proyecto que tiene la Arquidiócesis.

También se ensayaron los cantos litúrgicos que se emplearían en la celebración de la Divina Liturgia que se celebraría después del encuentro.

Tanto los jóvenes y niños como sus animadores expresaron su alegría por el encuentro y se comprometieron a trabajar más coordinadamente para que el proyecto de pastoral juvenil e infantil se consolide y desarrolle en la comunidad.

La actividad pastoral del arzobispo concluyó con la celebración de la Santa Misa para los jóvenes, niños y algunos adultos de la comunidad de Sipal, San Sebastián Huehuetenango.

Los jóvenes y niños participaron muy activamente en la celebración y también cantaron con devoción y entusiasmo los diferentes cantos de la liturgia.

El arzobispo animó a los presentes a involucrarse activamente en la vida de la comunidad y en el testimonio del Evangelio a los que aún no han renovado su vida, a semejanza de lo sucedido en la Iglesia Apostólica.

Los participantes expresaron su disponibilidad a comprometerse con entusiasmo y a tratar no solamente de vivir con compromiso el Evangelio sino también a dar testimonio de él.

El domingo 28 por la mañana, el arzobispo llegó hasta la cima de los Cuchumatanes, del lado de San Sebastián Huehuetenango, para visitar la comunidad de Tziminas Central.

En ese día, además de la Ascensión del Señor, los hermanos celebraban un aniversario más de su comunidad.

Con ocasión de la visita, se administraron los sacramentos de la iniciación cristiana a un grupo de niños, hijos de hermanos de la comunidad.

Durante la homilía el arzobispo animó a los hermanos a tratar de vivir la auténtica renovación en el Espíritu Santo, tratando de dar testimonio de la vida cristiana en el amor y en llevar el Evangelio a quienes aún no han renovado su vida.

El domingo, hacia el final de la mañana, el arzobispo visitó la comunidad de Txequiquix, también en las partes altar de los Cuichumatanes de San Sebastián Huehuetenango.

En esa ocasión, además de celebrar la divina liturgia, se administraron los sacramentos de la Iniciación Cristiana a cinco niños. Tres de ellos eran miembros de una familia que recientemente se ha convertido e incorporado a la Iglesia.

El arzobispo animó a los hermanos a hacer un esfuerzo para organizarse mejor y para dar testimonio misionero en forma más sistemática, de manera que puedan experimentar un crecimiento más sostenido.

Además les animó a trabajar para tratar de contar con un templo estable, dado que ya tienen el predio en que lo construirán y también tienen gran entusiasmo de perseverar en la vida de la Iglesia.

La visita pastoral del arzobispo al Centro Pastoral de San Sebastián Huehuetenango culminó con la visita a la comunidad de Sujal, ubicada en la parte posterior del cementerio de San Sebastián Huehuetenango.

Los hermanos han logrado actualmente contar con un predio para la construcción de su templo, sin embargo aún no lo han construido, por lo que la liturgia se celebra en una galera provisional que se encuentra en la casa del Hermano Julián Sales. En ocasiones como la presente en que llovió con extremada fuerza, esta situación dificulta la celebración litúrgica.

En esta ocasión se administraron los sacramentos de la iniciación cristiana a seis niños. Varios de los padres de los niños son convertidos recientemente.

El arzobispo animó a los hermanos a intensificar su compromiso en la vivencia de la presencia del Señor Resucitado en medio de la vida de cada fiel y de la comunidad. Igualmente les animó a tratar de ser más consistentes y eficaces en la manera en la que dan el testimonio misionero.

Los hermanos manifestaron su alegría por la visita y su disponibilidad a perseverar cada día con mayor entusiasmo y con más compromiso y testimonio misioneros.