El viernes 3 de diciembre, por la tarde, llegó el arzobispo hasta la sede de la comunidad de Belén, de la parroquia de Santa Eulalia, Santa Eulalia, Huehuetenango.

La razón principal de la invitación del arzobispo fue el que hiciera la bendición del nuevo techo que ha colocado la comunidad. Se trata de una estructura funcional, con características de protección tanto del sonido como del clima. El arzobispo felicitó a los hermanos por este logro.

Después de la bendición de la estructura del techo, el arzobispo presidió la celebración de la divina liturgia, habiendo contado con la participación de numerosos hermanos, miembros de la comunidad.

El arzobispo, durante la homilía, animó a los hermanos a ubicarse en una actitud de constante conversión, para poder percibir la presencia del Señor en sus vidas y poder compartir la auténtica renovación y la fe apostólica.

Dentro del marco de la celebración, el arzobispo invitó a los hermanos al reconocimiento de sus limitaciones y a ponerse en las manos del Señor, para ser renovados por Él.

Después de la invitación, el arzobispo oró por los hermanos y los bendijo, implorando del Señor su protección y el sostener a los hermanos en su camino de fe.

Al final de la celebración de la divina liturgia, el arzobispo bendijo a los lectores de la comunidad, renovando su compromiso de proclamar las lecturas de la Sagrada Escritura en la comunidad.

Antes de renovar la bendición, el arzobispo recordó a los hermanos que su ministerio encontrará sustento y eficacia, en la medida que ellos estén dispuestos a dejarse transformar por el Señor.

El sábado 4 de diciembre por la mañana, el arzobispo llegó hasta la comunidad central de San Juan Atitán, Huehuetenango, ubicada en la aldea Sajchilaj.

El arzobispo fue invitado y acompañado por el presbítero encargado pastoral, padre José Raúl López, quien acompañó al arzobispo en todas las actividades. La primera que se realizó fue la bendición del baldaquino y del nuevo sagrario que han colocado en el templo.

Después de las bendiciones iniciales, se procedió a la celebración de la divina liturgia, presidida por el arzobispo y concelebrada por el padre José Raúl.

Durante la homilía, el arzobispo recordó a los hermanos el sentido del tiempo del adviento, como tiempo de retorno al Señor, para poder gozar de todas las bendiciones que Él tiene preparadas para quienes confían en Él.

Hacia el final de la celebración de la divina liturgia, el arzobispo invitó a los hermanos a emprender un tiempo de oración, en el que, reconociéndose pecadores, se pusieran en las manos del Señor.

El arzobispo, junto al padre José Raúl, oró por los hermanos, los bendijo y les animó a seguir siendo fieles a la llamada del Señor y tratando de vivir como auténticos discípulos suyos.

Después de la celebración itúrgica, el arzobispo dedicó algún tiempo para dialogar con los hermanos y tener breves encuentros con quienes estaban participando.

El arzobispo animó al consejo pastoral a tratar de trabajar intnsamente, para lograr que se pueda crecer en la organización y proyección y, de esa manera, se pueda ser elevados a parroquia.

El domingo 5 de diciembre, por la mañana, por invitación del Padre Pedro Martínez y del consejo pastoral del centro pastoral cuya sede está en la comunidad de San Nicolás, el arzobispo llegó hasta la comunidad de San Nicolás.

Los hermanos habían acudido a participar en buen número y el arzobispo presidió la celebración de la divina liturgia y exhortó a los hermanos a volverse al Señor, haciendo eco a la invitación que, en el evangelio que se leyó, hacía Juan Bautista.

Dentro del marco de la celebración de la divina liturgia, se administró la confirmación de la crismación y el envío a un numeroso grupo de jóvenes, procedentes de las diferentes comunidades del centro pastoral.

El arzobispo exhortó a los confirmandos a asumir con seriedad el compromiso de ser enviados como misioneros, sobre todo, trantando de dejar que el Espíritu Santo transforme sus vidas.

También dentro del marco de la celebración de la divina liturgia, el arzobispo presidió la celebración del matrimonio entre Santos y Heidi, dos miembros del centro pastoral.

El arzobispo, dirigiéndose directamente a los nuevos esposos, les recordó que el vivir de acuerdo con el don del Espíritu Santo que se les concede en el matrimonio, es lo que les permitirá ser uno, de acuerdo a la fe de la iglesia.

Después de la celebración de la liturgia y, mientras se compartía un ágape fraterno, se celebró también una reunión del arzobispo con el consejo pastoral del centro pastoral.

La temátic abordada giró en torno a los pasos que se deben seguir y los requisitos con los que se debe cumplir, para poder ser elevados al rango de parroquia, así como de los aspectos importantes que esto conlleva.

El domingo 5, por la tarde, el arzobispo llegó hasta la comunidad de Monrovia, ubicada en el municipio de San Juan Ostuncalco, del departamento de Quetzaltenango.

Aunque llegó con retraso, debido al tiempo que diró el encuentro con el consejo pastoral de San Nicolás, los hermanos les eperaban ansiosos y con gran devoción participaron en la celebración de la divina liturgia.

Dentro del marco de la celebración de la divina liturgia, se administraron los sacramentos de la iniciación cristiana a tres niños, con lo cual se marcó el renacer en la fe y en el compromiso de esta comunidad.

Durante tres años, esta comunidad, debido a la defectuosa atención de un presbítero había quedado al margen de la vida de la iglesia y no había experimentado ningún crecimiento. Ahora, bajo la atención del arzobispo y con la ayuda del hermano Julián Bal, está experimentando un verdadero renacimiento

En la media noche entre el martes 7 y el miércoles 8 de diciembre, llegó el arzobispo, desde Guatemala, para hacer la visita a las comunidades de la Parroquia San Miguel Arcángel, de California. El miércoles por la noche, comenzó la visita en la comunidad Pacto Divino.

Allí, el arzobispo presidió la celebración de la divina liturgia en honor a la purísima concepción de la siempre Virgen María. Durante la homilía, el arzobispo exhortó a los hermanos a asumir una disponibilidad análoga a la de la Virgen María, descubriendo la voluntad del Señor y tratando de ponerla en práctica.

Después de la celebración de la liturgia, el arzobispo invitó a la oración a todos los hermanos participantes, habiéndose estos puesto de rodillas y habiendo sido bendecidos por el arzobispo.

Se pidió al Señor que ayude a todos los hermanos a profundizar en el sentido de fe y a perseverar inquebrantables en el testimonio del Evangelio y en la misión.

Al final de la celebración, se intercambió un saludo de paz con todos los presentes y se dialogó brevemente acerca de los pasos pertinentes para la constitución de la parroquia local.-

El arzobispo agradeció a los hermanos su participación y cariño y les animó a poner en práctica cuanto el Señor les invita a hacer, mientras se celebra la divina liturgia.

El jueves 9 de diciembre, por la mañana, el arzobispo llegó hasta la sede de la Arquidiócesis del oeste de los Estados Unidos de nuestra santa iglesia, para presentar los saludos de Navidad y Año Nuevo a Su Eminencia a Mor Clemis Eugene Kaplan, Arzobispo Vicario Patriarcal de esa arquidiócesis.

Los arzobispos dialogaron durante buen tiempo, acerca de los logros y desafíos que se experimentan en las arquidiócesis y de las perspectivas de futuro que se tienen.

Después del encuentro, Mor Clemis invitó a Mor Santiago Eduardo a visitar la Catedral de San Efrén, cuya remodelación ha sido prácticamente concluida.

El templo quedó muy hermoso y es una invitación a todo el pueblo de Dios para sumergirse, en cada celebración en el misterio de la comunión de los Santos y de la presencia mística y sacramental de todo el Cuerpo de Cristo, que se actualiza en la celebración litúrgica.

El jueves 9, por la noche, el arzobispo llegó hasta el lugar en donde se reúne la comunidad de El Pescador. Se trata de un templo que es rentado parcialmente y que, durante el presente mes, se encuentra en remodelación, por la que celebración tuvo que organizarse de forma especial.

Durante la homilía, el arzobispo explicó que las profecías que se hacen en el Antiguo Testamento, tienen que se reinterpretadas a la luz del misterio del Señor, para entender su actualidad y el reconocer que en verdad, las mismas se han cumplido.

Tanto cuando el arzobispo llegó como cuando se retiró, ofreció el tiempo necesario para encontrarse con varios de los hermanos y para animarles en su caminar de fe.

Los hermanos, progresivamente, se van identificando con mayor profundidad con la identidad de la iglesia y se esfuerzan por ser auténticos discípulos del Señor.

El viernes 10 de diciembre, por la noche, en la parte posterior de la residencia del hermano Ronaldo Diego, el arzobispo presidió la celebración de la divina liturgia para los catequistas de las comunidades de la parroquia de San Miguel Arcángel.

A pesar del frío que azotaba, los hermanos participaron con gran devoción. El arzobispo, en la homilía, les animó a seguir avanzando en el camino de conversión, para reconocer la presencia viva del Señor en sus vidas.

Después de la celebración, el arzobispo oró sobre los hermanos durante algún tiempo, invitándoles a poner toda la confianza en el Señor y a abrirse a cumplir incondicionalmente su volutnad.

Después de la oración, el arzobispo impartió la bendición sobre ellos y les exhortó a trabajar incansablemente por dejar que la presencia del Reino de Dios en ellos, transforme sus vidas y manifieste en todo momento.

Después de la celebración litúrgica, el arzobispo impartió la formación que estaba preparada para la ocasión, como parte de la profundización en el tema de la espera mesiánica en el pueblo de Israel.

Se abordó cómo fue que se formó el Reino de Israel, cuáles fueron sus características, cómo en él se desarrolló inicialmente el profetismo y la profundización en la espera de un nuevo Moisés, que, a la postre, sería la forma como el Señor cumpliría sus promesas.

La actividad del 10 de diciembre, concluyó con un tiempo en el cual los hermanos participantes en la formación, tuvieron la oportunidad de plantear algunas cuestiones que tenían.

Se plantearon cuestiones referentes a la temática abordada, pero también otras relacionadas con el sentido de la fe y de la ortodoxia y de los orígenes de la Iglesia.