El sábado cinco de marzo, día en el que la arquidiócesis cumple nueve años de su creación, junto a la incorporación en la Santa Sede Siro Ortodoxa de Antioquía y en el que el arzobispo celebra su septuagésimo cumpleaños, el arzobispo llegó hasta la Catedral de San Juan Comalapa.

Como parte de la formación, el arzobispo explicó qué es lo que significa ser parte de la Iglesia Siro Oerodoxa de Antioquía, desde el punto de vista histórico, de la fe y de la liturgia.

Al final de la formación que impartió el arzobispo, se abrió el espacio necesario para que los participantes en el decanato pudieran plantear algunas preguntas.

El arzobispo explicó cuestiones referentes a la historia, especialmente lo que implica Cátedra o Sede y aspectos sobre la historia de la Iglesia, así como algunas cuestiones de tipo teológico

Después de la actividad inicial que se realizó en la Basílica de San Juan Bautista, el arzobispo presidió la celebración de la reconciliación en la Santa Iglesia Catedral.

Durante la reflexión sobre las lecturas bíblicas, el arzobispo presentó cómo, para poder participar de la vida que el Señor derrama en el creyente, es necesario vivir en continua actitud de renuncia y de avanzar hacia el futuro que el Señor tiene preparado para cada uno de quienes le sirven y le siguen.

Finalmente, durante la celebración de la Divina Liturgia, el arzobispo señaló que se daba gracias por la incorporación en la Santa Iglesia Católica Apostólica Siro Ortodoxa de Antioquía y por el noveno aniversario de la creación de nuestra Arquidiócesis.

Igualmente, dio gracias por celebrar su septuagésimo cumpleaños, expresando que se acoge a la misericordia de Dios, para que le otorgue el perdón de los pecados y se pone en las manos del Señor, dispuesto a cumplir íntegramente su voluntad.

El un área aledaña a los templos, los consejos de la Catedral de San Juan Bautista, prepararon un sencillo agasajo para el arzobispo y por el aniversario de la Arquidiócesis.

El arzobispo agradeció a los hermanos y les animó a seguir, cada día con mayor radicalidad, en actitud e conversión y de disponibilidad a ponerse en las manos del Señor.

Finalmente, el arzobispo dio el tiempo necesario para ir saludando a los hermanos que habían participado en las diferentes actividades que se habían celebrado.

El arzobispo bendijo a los hermanos y les agradeció su presencia y su disponibilidad a vivir la fe con entrega generosa y con radicalidad.

Antes de retornar para el seminario, el arzobispo concedió una entrevista al equipo de medios de comunidación de la Catedral San Juan Bautista.

El equipo le pidió que diera un mensaje con ocasión de la Cuaresma. El arzobispo señaló lo que implica la conversión y animó a todos los fieles a no quedarse con las tradiciones externas sino que ellas sean expresión de la actitud de cambio y de entrega generosa a cumplir la voluntad de Dios.

El domingo 6 de marzo, por la mañana, en el Seminario Santa María del Nuevo Éxodo, se celebró el decanato del centro de Guatemala, abarcando los departamentos de Guatemala y Sacatepéquez.

El arzobispo presentó la formación acerca de la historia, identidad y liturgia de la iglesia, así como de las consecuencias que esto genera en la forma de vivir y organizar la iglesia.

Una vez que hubo terminado la formación impartida por el arzobispo, se abrió el tiempo para intercambiar puntos de vista y perspectivas sobre diversas cuestiones.

En general, se coincidió en que se vive una profunda experiencia de la presencia del Señor en la vida de las comunidades y se está dispuestos a asumir los compromisos propios de la misión que hemos recibido.

Los coordinadores o representantes de las diferentes comunidades que participan en el decanato del centro de Guatemala, rindieron informe de la marcha de las comunidades.

En general se subrayó que, con excepción de una o dos comunidades, en donde la situación se mantiene, en las demás comunidades se experimenta un crecimiento no solamente en el número de fieles sino, sobre todo, en su identificación con la Iglesia.

Los padres Orlando, Henry y Luis, participaron en toda la celebración del decanato y al final, tuvieron tiempo para compartir sus puntos de vista y perspectivas.

Se habló de la importancia de que se abran espacios para la participación de los seminaristas en las comunidades, por ser algo que permite ir ayudando en el proceso de formación.

Poco antes del mediodía, iniciaron las celebraciones litúrgicas con quienes estaban participando en el decanato del centro de Guatemala.

Lo primero que se hizo fue la administración del sacramento de la reconciliación para todos los que sintieron la necesidad de acercarse y participar en él.

Durante la homilía, el arzobispo explicó cuál es el sentido de las tentaciones que sufrió el Señor con respecto a la definición del estilo de su misión y cómo eso tiene consecuencias directas en la vida actual.

La parte de actividades litúrgicas culminó con la celebración de la divina liturgia presidida por el arzobispo y concelebrada por el Padre Orlando.

El arzobispo animó a entrar en una actitud de disponibilidad total, para recibir con apertura los dones que el Señor da y, de esa manera, ser capaces, como el Señor, de resistir a las constantes tentaciones que se presentan.

La actividad terminó depués de mediodía, con un tiempo de compartir fraterno para festejar el noveno aniversario de la Arquidiócesis y el septuagésimo cumpleaños del arzobispo.

Los hermanos de la sede parroquial de los Guates, trajeron un pastel, se cantó y, seguidamente se compartió con todos los hermanos.

El lunes 7 de marzo, al mediodía, en el Seminario Santa María del Nuevo Éxodo, el arzobispo presidió la liturgia de la reconciliación en la que concelebraron los miembros del Consejo Arzobispal, así como los formadores y seminaristas.

En la reflexión el arzobispo explicó el sentido que tiene el capítulo 25 del Evangelio de Mateo, a la luz del contexto general de todo el Evangelio y cómo el texto implica la exigencia de compromiso en la misión de la Iglesia.

También en el seminario, el arzobispo presidió la celebración de la divina liturgia, en la que concelebraron los Padres Fredi Mux y Pedro Martínez de la Vicaría del Occidente; Orlando López y Tomás Canajay de la Vicaría del Centro y Norvin Ruíz de la Vicaría del Norte.

El arzobispo hizo énfasis en que, a través de la participación en la divina liturgia, se reciben los dones necesarios, no solo para la vida personal sino también los que se está llamados a compartir con toda la humanidad.

Después del almuerzo y de un tiempo de fraterno compartir, se celebró la reunión trimestral del Consejo Arzobispal, también en el Seminario de San Lucas Sacatepéquez.

Se revisaron una serie de cuestiones de tipo pastoral, que afectan la vida de la Arquidiócesis y se asumieron compromisos concretos, como son el trabajar en forma totalmente unida, porque la fe apostólica y la identidad de la Santa Iglesia se irradien en todas las parroquias y comunidades de la Arquidiócesis.

Con ocasión de la Gran Cuaresma del año 2022, Su Santidad el Patriarca, Ignacio Efrén II, ha publicado una Encíclica, dirigida a toda la Santa Iglesia Católica Apostólica Siro Ortodoxa de Antioquía.

En la misma, recuerda la responsabilidad que tiene el ser humano en el cuidado de la creación y exhorta a que se asuma una actitud de esencialidad y de respeto de la naturaleza, que lleve a sentar las bases para la reconciliación entre los seres humanos y el restablecimiento del medio ambiente.

El martes 8 de marzo, el arzobispo llegó hasta Los Ángeles, California, para hacer la visita pastoral y seguir con los procedimientos orientados a que el nuevo templo pueda ser puesto en uso.

La actividad pastoral dio inicio el miércoles por la noche, visitando la comunidad Pacto Divino. La visita comenzó con la administración del sacramento de la reconciliación a quienes lo necesitaron.

Durante la reflexión de las lecturas bíblicas, el arzobispo explicó cómo es que el signo de Jonás, es decir el llamado al arrepentimiento y la conversión, fue suficiente para que los ninivitas reaccionaran y se conviritieran.

Por lo mismo, el arzobispo invitó a los hermanos a reconocer los múltiples signos que el Señor da en la vida de cada quien y a suplicarle que, a partir de los mismos, se viva en constante arrepentimiento, confesión del pecado y conversión.

Finalmente, el arzobispo presidió la celebración de ls divina liturgia con los hermanos de la comunidad Pacto Divino, habiéndo exhortado a los hermanos a vivir en una actitud de auténtica conversión, para ser renovados en el Espiritu.

Recordó a los hermanos que, a través de los misterios del cuerpo y la sangre del Señor, es como se comunica la vida eterna y que, sin embargo, para percibir esta realidad es indispensable asumir una actitud de humildad y conversión.

El 28 de febrero, de forma milagrosa y, a pesar de tener una enorme deuda que se debe amortizar, se logró concluir la compla del templo en el que tendrá su sede la parroquia de San Miguel Arcángel en Los Ángeles.

Actualmente el edificio se encuentra en acelerado proceso de remodelación. Hasta la compra era un templo Bautista, que durante largo tiempo no había sido remodelado. Ahora el desafío que se tiene es hacer todos los trabajos necesarios para remozarlo y para convertirlo en un templo Siro Ortodoxo.

Para mantener el sentido de comunión, Mor Santiago Eduardo invitó a Mor Clemis Kaplan a visitar el templo que está siendo remodelado, quien aceptó de buena gana la invitación. Mor Clemis visitó las diferentes partes del edificio y expresó su alegría de que, finalmente, se pueda contar con un edificio propio, a pesar de la enorme deuda que se tiene. También el Corepíscopo Sabu de la parroquia de Santa María en Withier, ofreció al arzobispo que, dado que cambiarán una serie de elementos de decoración en el templo, las mismas serán dadas al arzobispo para poder ayudar en el proceso de remodelación.

Ese mismo día, un grupo de hermanos de la parroquia pudieron estar presentes durante la visita de Mor Clemis.

El jueves por la noche, el arzobispo llegó hasta la sede temporal de la comunidad El Pescador, para visitarles, comenzando con la administración del sacramento de la reconciliación.

Después de la administración de la reconciliación el arzobispo explicó a los hermanos en qué consiste la oración, en el sentido cristiano y les animó a comprometerse en vivirla como actitud, con continuidad y radicalidad.

Después de la celebración de la reconciliación, el arzobispo presidió, con los hermanos de la comunidad El Pescador, la divina liturgia, correspondiente al jueves de la primera semana de cuaresma.

El arzobispo animó a los hermanos a descubrir en la Eucaristía, el medio para que, estando bien preparados, el Señor responda y se manifieste, cuando se vive en actitude oración.

Después de la actividad litúrgica, el arzobispo se reunión con algunos de los miembros del equipo que coordina la comunidad El Pescador, para informar acerca de los planes futuros de la parroquia.

El arzobispo explicó que, dentro del templo parroquial, tendrá su centro todo lo referente a la vida propiamente de la pertenencia a la iglesia como es la celebración y administración de los sacramentos.

Además explicó que los ministerios no serán suprimidos sino respetados en su identidad y administración, y, los que tengan su lugar de reunión en la sede parroquial, solamente deberán coordinarse con el consejo económico, acerca del uso que hará de las instalaciones de la sede, cada uno, de acuerdo a sus necesidades.

El viernes por la noche, en la parte posterior de la residencia del hermano Ronaldo Diego, el arzobispo presidió las actividades mensuales con los catequistas de la parroquia San Miguel Arcángel de California.

La actividad comenzó con la administración del sacramento de la reconciliación, para quienes estaban dispuestos a reconocerse pecadores y a emprender el camino de la reconciliación.

El arzobispo también presidió la celebración de la divina liturgia, en la que participaron los catequistas de la parroquia de San Miguel Arcángel, en Los Ángeles, California.

El arzobispo exhortó a los hermanos a descubrir el rostro cercano del Señor, que nos responde y se nos manifiesta cuando, de modo humilde, nos acogemos a su presencia.

Después de la actividad litúrgica, el arzobispo impartió formación para los catequistas, continuando con la explicación de los diferentes grupos sociales que existían en Israel en el tiempo del Señor.

El arzobispo también presentó, en forma concreta, un informe del proceso que se está llevando dentro de la organización de la parroquia y cuáles son las perspectivas que se tienen en el futuro.

Finalmente, los hermanos tuvieron la oportunidad de plantear algunas cuestiones relacionadas, tanto con la temática bíblica como con los asuntos que había presentado el arzobispo.

El arzobispo fue respondiendo a las diferentes cuestiones, haciendo énfasis en que la raíz de todo lo que se hace está en el Señor, que, en su persona viene a cumplir todas las promesas que se habían hecho a los largo de toda la Antigua Alianza.